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Ropa de cama de lino crudo, almohadas azules y plaid de Filocolore. Manta de Zara Home.
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Un refugio en la montaña
Este dormitorio es perfecto para una escapada romántica en la montaña. Envuelto por la madera y con paredes de piedras es rústico y acogedora a la vez gracias al aspecto mullido de su cama, vestida en beige y azul pastel, y a los complementos de fibras. Cada vez que sale en nuestro Instagram triunfa, así que te ayudamos a copiar su look con este shopping.
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Los mejores dormitorios para inspirarte
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Los mejores dormitorios para inspirarte
Si te falta inspiración para renovar el dormitorio -más allá del cabecero- esta selección de dormitorios te encantará. Los tienes de todos los estilos: urbanos, rústicos, modernos, minimalistas... ¡Ideales!
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Papred del cabecero revestida con baldosas de Porcelanosa. Cabecero, de Kenay Home. Cama, de Emma. Mesitas de noche, de Crisal. Lámparas de techo, de El Corte Inglés. Ropa de cama, de Filocolore. Cortinas, de Toral Decoración. Alfombras, de Rols.
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Elegancia y romanticismo
Un dormitorio romántico es elegante, acogedor y cálido. En él estás cómoda y muy a gusto. Y este tiene todo eso y mucho más. Porque si algo llama la atención es su pared del cabecero, revestida con baldosas cerámicas con relieve y acabado madera. La ropa de cama también es clave: esta en caldero con matices rosados y blanco aporta luz y calidez.
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Este dormitorio está en La Maison Bambou, una casa ubicada en Francia que se alquila a través de la página web: www.marialisboavilla.com
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Un dormitorio inspirado en el paisaje
El mural que decora la pared del cabecero de este dormitorio ha marcado, también, su decoración, romántica y delicada con un aire muy francés. Es de Gancedo y da continuidad visual al paisaje que se cuela por las ventanas. Y es que la interiorista Fanny Iniesta se ha inspirado en los colores de los Alpes franceses. Puedes copiar el look de este dormitorio.
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Cama con dosel de bambú y mesita de noche de Maisons du Monde.
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Con una romántica cama con dosel
La cama con dosel llena este dormitorio de un aire romántico y acogedor, junto con los tonos rosas de la ropa de cama y sus vaporosas cortinas. Como la cama tiene tanto protagonismo no se ha querido llenar en exceso el espacio. Las paredes, por ejemplo, son de mortero lo que le dan una textura muy natural.
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Ropa de cama, manta y mesita taburete de Zara Home. Cojines de El Corte Inglés y Zara Home.
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Un dormitorio con vistas
Aunque no lo parezca este dormitorio está en una casa cántabra que antes era una cuadra. Los grandes ventanales, sus paredes de piedra pintadas sin estucar y sus vigas de roble le dan un aire campestre actualizado y dan todo el protagonismo a las vistas.
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Cabecero realizado a medida por la arquitecta Cristina Carbonell. Mesita de noche, en La cabana d'Arana. Lámpara de pie, de Azul-Tierra.
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El romanticismo del estilo rústico
Los colores cálidos y la luz de las velas crean esa atmósfera acogedora y romántica. Y con esas vistas, ¿qué más se puede pedir?
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Manta estampada de Wallace Sewell y cojines de Teixidors, en Matèria.
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De madera y con vistas al lago
En esta cabaña de montaña en el Pirineo francés está envuelta de madera por dentro y por fuera. Tiene columnas de abeto, paredes forradas de madera de alerce y el suelo es de roble. Es perfecta para un fin de semana romántico de desconexión con vistas al lago y a las montañas. Vestida con sábanas de lino, mantas de mohair y muchos cojines la cama invita a dormir hasta tarde y desayunar en ella.
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Las mesitas y la lámpara son de Maison du Monde. La funda es de Filocolore y los cojines son de Cado.
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Elegante con toques de azul
Los propietarios querían un dormitorio con un toque provenzal, por eso compensaron los muebles de madera sólida con un papel pintado de flores en la pared del cabecero. La otra pared pintada de azul intenso le da un toque actual. Es un proyecto de Meritxell Ribé-The Room Studio.
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Cabecero, diseño de Marta Tobella y Kubuni Reforms, realizado en DM lacado. Ropa de cama, de Filocolore. Cojines, de Pepitablanca. Apliques, de Jieldé en Avanluce. Mesita, de Sacum. Butaca y banco de Crearte. Cuadros, de Carmen Figuera. Alfombra, de KP.
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Romántico y para el día a día
Porque nada impide que tu dormitorio tenga ese look romántico todos los días del año, no solo en los momentos especiales. Añade elementos que garanticen la calidez, como un banco o una butaca con patas de madera. Equilibra la seriedad de las líneas rectas con algún elemento que aporte dinamismo, como una mesita auxiliar con sobre redondo reconvertida en mesa de noche. Añade también algún toque rosado mediante la ropa de cama. ¡Perfecto para quererse todos los días del año!
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Dormitorio con hornacina en el cabecero, diseño de ST Interiorismo y realizado por Jorma. Lámpara de techo, de Gonu Iluminación. Mesitas de noche y banco, de Omnibus. Funda nórdica y plaid, de Caravane, en Filocolore. Cojines y plaid de lino, de Le Monde Sauvage.
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Con vistas al exterior
Para conseguir un dormitorio romántico, no solo la ropa de cama ha de ser gustosa e invitar a pasar las horas muertas en la mejor compañía, sino que también es necesario garantizar la calidez. Materiales como la madera te ayudarán a conseguirlo. Pero, si, además cuenta con unas impresionantes vistas, ¡no querréis salir de la cama!
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Cabecero de Calse y aplique de DCW.
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Con un cabecero con capitoné
Entre señorial y actual, este dormitorio decorado por Natalia Zubizarreta tiene el su cabecero con capitoné su mejor baza decorativa. Mullido, elegante y atemporal, su sola presencia pone un toque romántico y chic a todo lo que toca. ¡Nos encanta!
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Sábanas de Zara Home. Manta de La Maison. Plaid y mesita de Clay Barcelona. Lámparas, jarrón y cuadros en Sacum.
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Luminoso en blanco
Nadie dijo que para que un dormitorio sea romántico deba tener rosa. El blanco junto con la madera crea ambientes serenos y luminosos llenos de encanto también. Este dormitorio tiene truco, es la casa de la interiorista Marta Tobella de Sacum que le ha dado un estilo effortless chic, entre rústico y nórdico. No te pierdas el resto de esta preciosa casa de campo en la ciudad.
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Papel pintado de Laura Ashley y muebles en Federica&Co
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Con papel pintado de flores
Lo de revestir paredes y techos con papel pintado de flores es muy inglés y le sienta genial a este dormitorio en Cantabria. Sus colores han marcado la decoración del resto de dormitorio, en blanco y azul, con muebles antiguos y toques en color amarillo. Luminoso, alegre y súper acogedor.
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Ropa de cama y cojines de flores, de Filocolore. Cuadrantes y plaids, de Caravane. Cortinas diseño de Knowhaus.
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En rosa y mostaza
No solo de rosa vive el romanticismo. Combinado con un color vibrante como el mostaza, el resultado no solo es romántico, sino también moderno y muy acogedor. Y, para que sea luminoso, paredes blancas, cortinas blancas y, por supuesto, en la ropa de cama.
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Mesa y butaca de herencia y flexo de Cado. En el suelo, estera de Gra.
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En blanco y verde con chimenea
Todo invita a quedarse en el dormitorio de la masía que Ana heredó. Para que fuera tan luminosa y acogedora blanqueó los paneles de madera de las paredes y los muebles que eran de calidad. En el dormitorio, sin embargo, optó por un refrescante verde hoja en la pared del cabecero a juego con la ropa de cama.
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Apliques de Marset, en Susaeta Iluminación. Ropa de cama de La Maison, cojín de terciopelo de Muy Mucho. Alfombra diseño de Sube Interiorismo, de KP Alfombras.
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Romántico y de ciudad
Este dormitorio pertenece a un piso señorial de 1910, pero la interiorista Begoña Susaeta ha actualizado sin que pierda todo su encanto. Vemos esta historia en sus techos y puertas de madera, y el toque del siglo XXI en su cabecero de hierro con cuarterones y su aire minimal. La ropa de cama rosa consigue, una vez más, llenarlo de encanto y un toque femenino. Puedes revisitar este piso centenario de Bilbao.
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Escritorio de anticuario, funda nórdica, cojines y manta, de Zara Home. Alfombra, de Maisons du Monde
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Con un mural floral
Los tonos suaves de la ropa de cama invitan a relajarse y el mural en la pared del cabecero con detalles salvajes suma encanto a la decoración. Este dormitorio lo tiene todo para conquistar a sus dueños noche tras noche.
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Dormitorio con paredes de madera.
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Aires de montaña
La atmósfera que se crea en una cabaña de madera invita a que el romanticismo invada el el dormitorio.
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Cabecero y cómoda pequeña de Catalina House. Mesita redonda de Merc&Cía. Alfombra de Ikea y cómoda antigua de Mavi Lizán.
El Mueble
Un dormitorio clásico en blanco y madera
Calma y serenidad es lo que transmite este dormitorio decorado en tonos claros y con muebles de madera. La ropa de cama de lino en blanco y beige siempre es una elección cálida y luminosa que combina genial con el color miel de la madera.
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Cabecero diseño de Gabriela Conde con tela de Lucky Mora Estudio.
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Un dormitorio pequeño y coqueto
A pesar de ser pequeñito, este dormitorio parece una suite. La decoradora Gabriela Conde lo abrió al salón para que no quedara tan encajonado. Las separan unas cortinas, muy livianas que dan intimidad sin impedir el paso de la luz. Tiene pocas piezas muy bien elegidas: un cabecero orejero, confeccionado con una tela rústica, que le un toque especial, una mesilla muy ligera y flexos empotrados.
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Colcha, de Textura, y butaca, de Azul-Tierra.
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Techos que enamoran
Tanto los techos como las paredes dotan de gran personalidad a cualquier estancia. En este caso, estas vigas de pino blanco coordinan con la claridad del dormitorio consiguiendo el efecto deseado.
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Butaca y lámpara de Miv Interiores. Edredón de Zara Home. Cojines de Rue Vintage y en la butaca, de Kenzaandco.
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Veraniego y con un look mediterráneo
Este dormitorio pertenece a una antigua finca de payés en Ibiza, rodeada de pinos y sabinas y con unas vistas espectaculares al mar y a las buganvillas. Por eso en su interior se ha optado por una decoración tan neutra, para dar todo el protagonismo al paisaje. La unión de blanco y un suave arena dan luz y tranquilidad a este dormtorio de verano volcado al exterior.
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Mesita de noche y silla, de Becara. Alfombra, de BSB. Papeles pintados, de Clarke & Clarke.
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Romantic bedroom
Y lo decimos en inglés porque el toque british supura hasta por las paredes.
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Butaca, de Azul Tierra. Lámpara de Becara.
El Mueble
La llama del romanticismo
Un ambiente cálido con mantas y un fuego en la chimenea es un gran escenario para un dormitorio romántico.
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Cama Aurore, de Roche Bobois. Armario, en Cottage. Cortinas de lino, de Güell-lamadrid. Butaca, lámpara de sobremesa, mesa velador, cómoda y candelabro, en Coton et Bois.
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Suite romántica
Maderas blancas, detalles de cristal y telas naturales envuelven este dormitorio de ensueño.
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Mesa velador y butaca, de Cottage Little House. Cojines, de Filocolore. Cestos y libros, de Azul-Tierra.
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Love is in the air
Detalles románticos, mensajes poderosos y un ambiente evocador que a la vez invita a relajarse.
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Papel pintado de Castorama. Banqueta antigua y manta lila, en Pardo.
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Como en el bosque
Un papel de ramas en blanco y beige hace de cabecero en el dormitorio de esta casa cántabra. Con gruesas vigas de madera y rodeada por el verde, es casi como dormir en el bosque.
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Plaid de cuadros, de Tierra Extraña. Manta, de Zara Home Puf, de Minim.
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A través de la ventana
O mejor dicho, de los ventanales. Porque tras ellos se esconden unas vistas maravillosas. Y dentro, en el dormitorio, lo que uno observa también deleita a los ojos y a los oídos con el crepitar del fuego.
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Sillón tapizado con lino Albury, de Becara. Mesa auxiliar, de Roche Bobois. Al fondo, cama, de Coco-mat; dosel, de Güell-lamadrid; secreter y banco, en Little house; espejos, en Mer&Cía, y maleta, en Luzio. Alfombras, de Ikea.
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Con antesala
Un gran arco da la bienvenida a este dormitorio espectacular presidido por una cama con dosel.
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El papel pintado es de Laura Ashley y la lámpara de techo, en Federica & Co.
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El romanticismo del shabby chic
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Banqueta restaurada por Ruedeco, lámpara de techo de Natura Casa y papel pintado de Lara Costafreda en Coordonné.
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El romanticismo llega en primavera
En este dormitorio es primavera todo el año. Alegre y colorista y lleno de naturalidad gracias al uso de las fibras vegetales de la alfombra y la lámpara de techo.
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Cabecero realizado a medida por Tapicería Marcasal. Taburete de madera, en la Maison, mesita de noche de Miv Interiores, lámparas de techo, en Doméstico Shop y alfombra beige en Matèria.
El Mueble
Romántico y del siglo XXI
Un dormitorio millenial: romántico, sencillo y donde el menos es más.
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Mesita de noche y butaca, de Cottage Little House. Lámpara de techo, cortinas y pavimento de parquet, de Home Deco. Alfombra de yute natural, en Filocolore. Chifonier, en Cottage Little
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Aroma romántico
Las flores siempre han formado parte de la simbología del romanticismo. Perfuma tu dormitorio con ramos de flores. Nunca fallan.
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Papel de Vescom y cabecero con tela de Gu¨ell-Lamadrid. Mesita de Taller de las Indias. Ropa de cama de La Maison.
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Abrazado por el papel y los textiles
En este dormitorio todo está pensado para abrazarte y hacerte sentir como en casa. Las paredes de madera pintadas en blanco y con papel pintado, la butaca tapizada a cuadros, y la ropa de cama de lana y algodón que juega con las capas para darle un aspecto más mullido y acogedor al dormitorio. Y sus tonos rojos, encienden la pasión.
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Cama, de Ka International. Cómoda y silla blanca, de Becara. Cortinas, de Ikea. Mesilla de noche, realizada por Germans Ollers. Pavimento de tarima blanqueada.
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De estilo provenzal
Azul y blanco: una combinación muy fresca y campestre a la vez.
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Cabecero y aplique, en Miv Interiores y butaca, en Scandi.
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Baño de calidez
Los colores tostados de la madera aportan calidez a este dormitorio de montaña.
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Cabecero realizado a medida por Tapicería Deco Lur Sofá; banqueta de Arterole Home; alfombras de KP y apliques, de Faro, en Susaeta Iluminación.
El Mueble
Estilo asegurado
Decorar el dormitorio con rosa es caer rendidos ante el estilo que conseguirás en la estancia. Fresco, jovial y moderno. Ah, y por supuesto romántico.
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El armario es de obra de Grup Escrivá Interiors. La bandeja es de India&Pacific. El puf y la lámpara de techo, también.
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Al natural
En este dormitorio cada detalle está cuidado está pensado para conseguir ese ambiente desenfadado y espontáneo.
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Cabecero diseño de Torredálbiz Interiorismo, con tela de Becara. Mesitas de noche, en Casa de Abastos. Lámparas aplique Tolomeo, de Artemide, en Biosca & Botey. Lámpara de techo en Las Tiendas de la Granja. Espejo, de Laura Ashley.
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Toques vintage
El tocador ejerce de mesita de noche improvisada en este dormitorio cálido.
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Cabecero, de Lienzo De Los Gazules. Mesita y lámpara de sobremesa, de Becara. Alfombra de sisal y cuero, de La Garriga Verda.
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Dulce rústico
Los muebles en crudo, el envigado en madera clara y el butí de estampado campestre crean un dormitorio rústico de estilo muy romántico.
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Dormitorio con bañera.
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Con bañera
¡Y encima exenta! Porque con un dormitorio así, el baño para cuándo lo reservamos? ¿Antes o después?
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Cama tapizada en lino y cortinas, en Estuco. Banqueta y espejo sobre la chimenea, en Cachemir. Alfombra, de Mancil Decoraciones.
El Mueble
Al calor de la chimenea
Techo en ligero tono azul grisáceo. Interiores.
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Butaca y banqueta a los pies de la cama, en Rialto Living. Mesita de noche y lámpara de sobremesa, en Sleeping Company.
El Mueble
Rendidos al mar
Un gran dosel cubre y protege la cama de este dormitorio. Los colores azules evocan el mar que se contempla desde la ventana.
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Cabecero, mesita de noche y lámpara de sobremesa, todo de Jardin D'ulysse España. Cortinas y estores de lino, de Coordonné. Alfombra, de Fort Gama. En la pared, papel, de Laura Ashley, de Rafael Martín Bailón.
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Un ligero toque francés
Este dormitorio pequeño está decorado al detalle.
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Mesita de noche y armario, realizados a medida.
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Invitación al romanticismo
Natural y soft en este dormitorio los muebles están hechos a medida con un cabecero de tela. ¿Te has fijado en la belleza de la puerta?
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Cama, banqueta y cabecero, de Mujika Interiorismo. La´mpara, de Deluz. Escritorio, de Ethnicraft, en Mujika Interiorismo.
El Mueble
Las mejores vistas románticas
Abrir los ojos al despertarse y encontrarse con una paisaje tan bucólico como este dormitorio.
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Alfombra de Kilim, de Becara. Cesta de Zara Home.
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Romanticismo enmarcado
Los doseles llevan en el ADN el estilo romántico. De madera, de hierro o de acero cepillado, como el de este dormitorio, bajo estos muebles vivirás momentos románticamente auténticos.
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Cama modelo Llamas y mesitas modelo Perpignan, de Becara, en el estudio de Mónica Garrido. Cortinas, de Jardin D'ulysse España. Alfombra de lana, de Ikea.
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El dormitorio de una antigua rectoría
La pared de piedra y las vigas de madera le dan un toque rústico encantador a este dormitorio dotado de cama con dosel.
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Dormitorio con cabecero metálico y ropa de cama blanca y rosa.
El Mueble
Romanticismo con sabor campestre
Las piezas de madera y los detalles metálicos vintages casan genial con los muebles de forja en blanco aportando un aire romántico
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Banqueta, en Beni Decoració. Lámparas de sobremesa, en Interior Design by Kühn & Partner.
El Mueble
Oda al cuadrado
En madera de roble en tonos rosados, la cama con dosel adquiere un aire muy femenino. Fíjate en los detalles geométricos. En este dormitorio triunfa un forma en particular, el cuadrado. Y es que los cuadros vuelven a ser tendencia.
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Mesita de noche y lámpara, de Calattini. Cortinas, de Gancedo.
El Mueble
Otro tipo de dosel, el mismo dormitorio romántico
Si ya de por sí el dosel aporta romanticismo a tu dormitorio, si lo vistes con tul lo acentuarás mucho más. Si tu dormitorio es amplio, una cama con dosel es perfecta, ya que decora por sí solo. También puedes optar por este tipo de "falso dosel" donde las cortinas caen desde el techo.
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Cabecero y mesita de noche, de Casa y Campo. Aplique, de Años luz. Butaca, banqueta y cómoda, de Oficios de Ayer.
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Un papel para el romanticismo
Enamórate de los papeles pintados y elige un estampado floral. Las flores no solo son tendencia sino que si desprenden delicadeza conseguirás que tu dormitorio se llene de aire romántico.
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Cama y banqueta de hierro, en El Corte Inglés. Butaca de rejilla y mesita de noche portuguesa de madera pintada, en Ámbar. Cortinas, de Gastón y Daniela. Lámpara de sobremesa, en Côté Soleil. Lámpara aplique de hierro, en Canterano.
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Dormitorio de invitados
Con un dormitorio así, nunca querrán marcharse. Su dosel romántico es acogedor y muy elegante. A él se suman el piecero, también de metal, como el banco.
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Cama de hierro Ripalda, de Gonzálbez. Butaca, de Roche Bobois. Visillos de lino, Tignes-Duck Egg, de Designers Guild, en Usera Usera.
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Nítido y transparente
El dormitorio pocas veces tiene reservado un lugar privilegiado en nuestra casa. Pero, ¿y si dedicáramos el mejor lugar para nuestra "cueva"? Y encima rodeados de cristal disfrutar de las vistas del jardín.
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Mesita de noche, de Handbel. Las sábanas y los cuadrantes, de Zara Home.
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El romanticismo del gris y la madera
El futuro es de madera y el romanticismo ha de ser presente y futuro. Y por supuesto no tiene que ser todo rosa. Atrévete a pintar una pared con un color oscuro, como esta tonalidad de gris.
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Colchas, de La Maison. Espejo y banqueta, de Velafusta.
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Romanticismo nostálgico
El romanticismo no siempre ve las cosas de color de rosa (y si no que se lo digan a Espronceda). Igual que el azul no sólo es símbolo de calma y tranquilidad (y de melancolía), también puede evocar ambientes románticos. Así que unidos son perfectos.
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Mesita de noche blanca, en DM Interiors.
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Luz natural
Un dormitorio bañado por la luz del sol al atardecer baña dormitorio y el techo envigado de madera aún acentúa más el carácter cálido y acogedor. Un apunte: el cabecero fantasma que se ha conseguido gracias a una gran hornacina.
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Cama y cabecero, de Carrillo.
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Un tándem romántico
No fallan: el blanco y el azul grisáceo, en sus tonalidades más clásicas, crean un dormitorio romántico de corte clásico o si lo prefieres un dormitorio clásico lleno de romanticismo.
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Cabecero, puf y espejo, en Maiolica. Cómoda, de Adaleya y butaca, de Gajisa.
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El magnetismo del espejo
No falla, seguro que no puedes pasar por delante de un espejo y pasar de largo. Pues imagínate si tienes uno de tamaño extragrande en tu dormitorio.
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Cabecero y la mesita de noche, de Pomas, en Cassa.
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Romanticismo con historia
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Escalera, en Chus Martín. Apliques, de Leroy Merlín. Cortinas de lino, en Filocolore.
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Dormitorio romántico rural
Las vigas de madera aportan la nota más rústica de este dormitorio donde combinan piezas de estilo más romántico como el cabecero tapizado y la banqueta en capitoné (en Entredós).
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Dormitorio clásico romántico en blanco.
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Piezas únicas
Lámparas de techo de estilo romántico, papel pintado con tonos suaves, texturas que arropan, un maniquí... Y al final, un baño para sumergirse en el ambiente.El estilo romántico también se consigue con piezas únicas elegidas cuidadosamente.
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Cama, de Coco-Mat. Dosel, de Güell-Lamadrid. Secreter y banco, en Little House. Maleta, en Luzio. Alfombra, de Ikea.
El Mueble
Elegantemente romántico
El dúo que forman el blanco y el beige es perfecto para tener éxito. Completa el look romántico y sofisticado la lámpara de techo y por supuesto el dosel.
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Dormitorio romántico con espejo dorado.
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Romántico chic
Un dormitorio pequeño y muy bien resuelto en cuanto a funcionalidad y decoración. El murete de obra, con una hornacina a modo de repisa, sirve de cabecero y de separación con el vestidor.
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Lámparas y cabecero, realizado a medida y tapizado con terciopelo, de Pedroso y Osorio en el Estudio de miriam Alía. Papel pintado, de Osborne & Little, espejo, de Leroy Merlín, ropa de cama de Zara home y alfombra de BSB.
El Mueble
Curvas evocadoras
Las curvas son evocadoras, sexys y vuelven a ser tendencia. Y si no, mira las sinuosas curvas del cabecero y el espejo sobre la mesita de noche...
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Butaca, de home Design International, lámparas de Coton et Bois y alfombra gris de Zara Home.
El Mueble
Texturas que abrigan
Cortinas vaporosas, plaids gustosos, alfombras de pelo largo y muchos elementos furry. Todo invita a pasar una velada romántica envuelta de texturas agradables al tacto.
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Espejos y apliques, en Cottage Little House.
El Mueble
Romanticismo a medida
Aprovecha al máximo cada centímetro de tu dormitorio para conseguir almacenar todo lo que necesites y mucho más con muebles a medida.
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Banqueta, en India & Pacific, lámpara con pantalla de lino, en Carolina Blue, silla y alfombra, en La Maison.
El Mueble
Detalles románticos
Un mueble o un accesorio decorativo con personalidad suficiente puede ayudarte a conseguir el ambiente romántico que buscas, como en este caso la lámpara de techo.
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Banqueta y lámpara de sobremesa de Angel Des Montagnes, en Carmen Caubet.
El Mueble
Amor de alta montaña
Por muchas cumbres borrascosas que existan todo en este dormitorio invita a pasar una velada romántica envuelta de texturas agradables al tacto.
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Cama y mesita de noche, en Coton et Bois.
El Mueble
Romántico y masculino
Un dormitorio romántico no es una cuestión de género. ¡Qué diría Lord Byron a aquellos que etiquetan el romanticismo como algo femenino!