Te damos buenas ideas para sacarle el máximo provecho a una cocina pequeña y alargada. ¡Toma nota!
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Desde la distribución a la elección de los muebles, pasando por los colores y ¡hasta el tipo de encimera! Todos estos detalles (y algunos otros) influyen a la hora de decorar una cocina pequeña y alargada. El objetivo principal es lograr ampliarla visualmente y evitar el indeseado efecto tubo. Estos 12 ejemplos de cocinas no sólo lo consiguen, sino que además se presentan la mar de bonitas, cómodas y estilosas. ¡Toma nota de todas sus claves!
¿Cómo hacer que una cocina pequeña se vea más grande?
Mobiliario, de Cubic Cuines. Papel pintado, de La Maison. Lámparas, de Ineslam.
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Con península para evitar el efecto tubo
Las cocinas alargadas, aunque sean pequeñas, pueden dar una desagradable sensación de efecto pasillo. Para evitarlo, la interiorista Marta Prats diseñó una península y la equipó con muebles blancos alistonados. También creó un office muy acogedor con arrimadero lacado y un original papel pintado. Una alfombra de fibra en el suelo delimita y protege la zona.
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Cocina a medida realizada en microcemento y madera, según diseño de los propietarios. Alfombras, de Llobera.
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En colores claros
Para que una cocina pequeña parezca más amplia, nada como elegir colores claros. Las paredes de esta se lacaron en blanco y los muebles se pusieron en madera clara, a juego con las vigas del techo. Como es ancha, se dispuso el mobiliario en ambos frentes. Nunca pongas muebles altos en los dos lados para evitar sobrecargar el espacio. Con el fin de romper su distribución alargada, Olga Gil-Vernet optó por poner tres alfombras similares redondas.
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Mobiliario Line, de Santos. Encimera, de Silestone. Pavimento porcelánico efecto madera, de Himabisa.
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Una cocina pequeña y alargada con buenas vistas
Con unas vistas tan maravillosas al final de esta cocina pequeña y alargada era un pecado no aprovecharlas. La interiorista Nataliza Zubizarreta optó por quitar el tendedero que había originalmente para ganar un office donde poder desayunar, comer y cenar mirando al mar. La cocina se amuebló en blanco, con baldas a un lado y armarios al otro. Los electrodomésticos, mejor pequeños para no restar movilidad.
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Mobiliario, de Santos. Barra y encimera, de Neolith. Apliques de latón diseñados por la decoradora.
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Con barra de desayunos
Otra opción para aprovechar la planta rectangular de una cocina pequeña es crear una barra de desayunos. En este proyecto de Lucía Mariñas para su propia cocina, la interiorista diseñó un frente de armarios y cajones donde albergar el fregadero y la vitro. Paralelo a ella, y aprovechando el tabique, una barra de una sola pieza sirve de office y superficie de trabajo. ¿Quieres ver más barras de desayunos para pisos pequeños?
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Mobiliario, de Cubic Cuines. Encimera de teca recuperada.Taburetes, de Criteri Sant Cugat. Lámparas, de Bover, en Avanluce.
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La encimera, mejor clara
La elección de la encimera también es clave a la hora de decorar una cocina pequeña y alargada. Decántate siempre por una en color claro o que contraste con el resto de elementos. La interiorista Marta Prats ha optado por una blanca en la cocina y otra de madera recuperada en la península. Esta última la ha prolongado por los tres lados para ganar una barra con taburetes. La mini librería con estantes en esta cocina abierta facilita su integración en el salón.
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Muebles realizados por Carpintería Querol Serra. Encimera, de Silestone.
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Integrada en el salón
Una de las cosas que te puede preocupar en tu cocina pequeña y alargada es cómo integrarla en el salón, si es abierta. Fíjate en esta propuesta de Mireia Masdeu. ¡No tiene desperdicio! La interiorista ha optado por un diseño nórdico atemporal en un gris suave. En el lado opuesto a la barra, un aparador bajo hace de repisa para poner la tele, de asiento y zona de almacenaje.
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Mobiliario, diseñado y realizado por Sacum. Taburete, de Pilma. Alfombra vinílica, de Sanku.
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Con puertas correderas
Otra de los grandes aciertos para ganar metros y maximizar el espacio en una cocina pequeña y alargada es optar por puertas correderas, tanto en los accesos como en los armarios. En esta de la imagen, Marta Tobella ha optado por una corredera acristalada para acceder a la zona de lavadero y tendedero. Así la luz natural se cuela en la cocina durante todo el día.
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Mobiliario, en Cubic. Mesa y sillas, en Kenay Home.
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Una distribución bien pensada
Si tu cocina pequeña y alargada tiene forma de U, puedes aprovechar la pared del fondo para ubicar el fregadero, sobre todo si cuenta con una ventana que permita el paso de luz natural. En esta de la imagen tan luminosa, la interiorista Adriana Farré ha elegido el mobiliario con molduras en un gris suave. En el lado opuesto de la cocina ha colocado el comedor.
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Proyecto de Bäse Interiorismo realizado por Camacho Construcciones, igual que la corredera.
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Electrodomésticos camuflados
En esta otra cocina en paralelo, Bárbara Serra ha colocado en un frente el fregadero y la vitro. En el otro, ha aprovechado toda la pared para almacenar y camuflar los electrodomésticos, panelados en la misma madera de nogal. Y es que esta es otra clave para las cocinas pequeñas y alargadas: ocultar o disimular lo más posible la nevera, la lavadora y el fregaplatos. En este caso, el frigorífico se integra gracias al color gris de los muebles bajos y al suelo porcelánico de juntas invisibles.
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Mobiliario diseño de Sole Murube con mobiliario de Kvik. Silla, de Kave Home. Aplique, de Skurup.
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Sí a los frentes lisos y a la ausencia de tiradores
¿Más claves para decorar con acierto una cocina pequeña y alargada? Opta por líneas rectas y huye de lo recargado. Elige frentes lisos, muebles bajos con cajones grandes y tiradores ocultos (el sistema de apertura en uñero o tipo push son perfectos). El Estudio Murube Ecléctica diseñó esta bonita cocina en un tono verde, súper moderna.
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Mobiliario, de Leicht, en Azul Acocsa. Encimera, de Silestone. Taburetes, de Pilma
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¿Una isla? Sí, pero ligera
¿Puede una cocina pequeña y alargada tener una isla? Sí, pero elige un modelo que sea ligero, como esta de la imagen. La interiorista Belén Campos ha optado por una barra abierta de Silestone, igual que la encimera. Belén ha jugado al contraste con el mobiliario en gris antracita y madera de roble. Los colores oscuros son posibles siempre y cuando la cocina pequeña sea luminosa.
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Mobiliario lacado, de Santos. Encimera, de Dekton. Mesa, de Ondarreta. Sillas tapizadas de Crisal Decoración.
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Una cocina pequeña y alargada con barra y office
Nos encantan las cocinas en paralelo. El Estudio Martínez Elorza ha elegido para esta un mobiliario clásico en blanco, lo ha enfrentado con una barra de desayunos y, a continuación, el office con una mesa extensible. ¡Súper completa! Si tu cocina, además de pequeña y alargada, es estrecha ¿sabes cuánta distancia debes dejar entre los dos frontales? Al menos un metro y medio. Así la movilidad en la cocina será más cómoda. ¡Tenlo en cuenta!