Las encimeras de granito están siendo reemplazadas por dos soluciones mucho más efectivas y estilosas

Para dar un toque de calidez al blanco de la encimera porcelánica y los frentes de los muebles de esta cocina, se ha optado por revestir la zona del antepecho con otro porcelánico, pero con acabado en madera. Esta opción mantiene la elegancia y versatilidad de emplear un solo color en el mobiliario y la superficie de trabajo, sin renunciar al toque cálido que aporta la madera. Para enfatizar su estilo moderno, puedes jugar con el grosor de la encimera. La de esta propuesta tiene un grosor considerable que consiguen un look muy actual. Este es un proyecto del arquitecto Jorge Rincón Wong (JRW Arquitectura e Interiores). 

Elegir una encimera porcelánica será sinónimo de durabilidad. Son resistentes a los golpes, a los arañazos, al calor, a las manchas y a los rayos UV, pero también son más fáciles de limpiar debido a su baja porosidad. Y, aunque puedes encontrarla en muchísimos acabados, es en colores lisos cuando mejor resultado dan. Combinadas con el color de los muebles ofrecen un look sencillo, actual y sin florituras. 

En esta cocina sin muebles altos, el color blanco se ve 'calentada' por el suelo en acabado madera y la piedra de la pared.  Es un diseño de Inés Portell. 

En esta cocina, la elección de una encimera porcelánica y unos muebles en acabado en negro puede ser una apuesta arriesgada. Más aún si el antepecho se ha elegido con el mismo acabado, como en esta cocina diseñada por la interiorista Nezha Kanouni y realizada a medida por Kok Estudio Marbella. La clave para que el color negro no se coma la decoración es el blanco de suelos y techos, que regala amplitud. Y, por supuesto, la luz natural que entra por la ventana.   

Cierto que el total look en negro puede ser potente, pero si eliges una encimera en porcelánico de fino grosor y unos muebles con un frente liso, sin tiradores, el resultado será limpio y muy moderno. Lo vemos en esta cocina diseñada por la interiorosta Sylbia Preslar, donde también la campana y la perfilería del cerramiento de cristal son de color negro. Eso sí, para suavizarlo sin que resulte frío, las paredes se han pintado de un cálido blanco hueso que ayuda a subir la temperatura y suavizar el efecto del negro.

Una cocina con la encimera y los muebles con el mismo acabado no tiene por qué ser aburrida. Cierto que estos diseños lucen un estilo más sobrio, más sencillo, pero con los complementos adecuados podrás conseguir aportarle un look más personal. Por ejemplo, unos tiradores dorados aportarán un look chic y sofisticado, subiendo el nivel decorativo del espacio y dotándolo de un matiz más sofisticado. También elementos de madera o de fibra natural son clave para subir la temperatura visual. Es un proyecto de Pia Capdevila.   

Una encimera de porcelánico de poco grosor será sinónimo de modernidad, pero si quieres conseguir un look algo clásico apuesta por el mismo color de muebles, sí, pero con unos frentes con unas sencillas molduras. Puedes, además, añadir unos detalles en negro, creando un atractivo contraste que aporta elegancia. Y es que la combinación del blanco con matices en negro es sinónimo de un estilo actual y contemporáneo, sin dejar de lado el aspecto más tradicional que dan las molduras. Es un proyecto de la interiorista Marta Prats.      

Otro ejemplo de que una cocina y encimera de un mismo color no tiene por qué ser sosa. En este espacio, proyectado por el equipo de Mujika Aramendi Decoracion es el suelo, las paredes y las molduras de los frentes de los armarios son los que aportan personalidad. Y es, precisamente, gracias al uso del blanco en encimera y muebles que los interioristas han podido dar rienda suelta a la creatividad, con un suelo en mosaico, la pared con azulejos marrones con brillo y los frentes de armario, con unas molduras con un patrón geométrico. 

La madera es la mejor acompañante para una cocina con la encimera y los frentes de los muebles del mismo color. Aplicada en suelos y techos, así como en parte del mobiliario, le conferirá un look más rústico a una cocina moderna, con un resultado que aúna las características de ambos estilos. Se trata de un proyecto de la interiorista Lara Vallés, de Space Stage Studio.

Huye del aburrimiento en estas cocinas que apuestan por todo al mismo color, incluyendo materiales que aporten textura y volumen a la decoración. Aquí, el papel pintado con efecto textil juega un papel fundamental, ya que también ayuda a dar calidez. Los suelos con acabado en madera (ya sea porcelánicos, laminados o vinílicos) también ayudan a subir la temperatura. Y, si a esto sumamos unos estores tipo paquetto que aporten volumen, como en este proyecto de Natalia Zubizarreta, el resultado no es plano, sino todo lo contrario.   

Te hemos ofrecido muchos ejemplos de cómo llevar el color u otros materiales a una cocina con la encimera porcelánica y los muebles del mismo color. Pero, ¿por qué no aplicar el mismo color a toda la cocina? Si buscas un efecto sobrio, elegante y, sobre todo, que supere el paso de las tendencias, esta es tu mejor opción. Lo vemos en esta cocina proyectada por la interiorista Sandra Mora.