18 ideas para pintar el baño con color (y no es blanco)

Pantone eligió el greenery como color estrella del 2017 y, varios años después, sigue siendo una elección 10. Es una alternativa vital y fresca para pintar el baño de color, al que puedes dar un punto sofisticado combinándolo con dorados. Aquí, además, se ha optado por el "color-block" e incluso el mobiliario es verde. 

Si ya has visto que el verde funciona bien, debes saber que, en el baño, lo hace en cualquiera de sus tonalidades. Y hay materiales que te ayudarán a llevarlo a sitios en los que una pared de yeso convencional no puede instalarse. Así, el microcemento es un nuevo material que permite tintarlo con diversos pigmentos que ayudan a llevar el color, incluso a los muebles. 

El color también triunfa en baños de pequeñas dimensiones, pero ¿qué hacer para que no resulte agobiante y empequeñezca demasiado el espacio? Pinta las paredes de color a distintas alturas, como en esta propuesta. Y los techos, mejor blancos. 

El gris aporta un toque sereno y señorial a este baño rústico. Lo consigue el color que se ha elegido para las paredes: el gris antracita, que es uno de los colores más "solemnes" que podemos elegir. La madera del resto de la decoración sube la temperatura e instala a este baño en su faceta más montañera. 

Qué suave y cuánta luz desprende este baño que necesitaba claridad debido a las paredes de madera, que oscurecen el ambiente. Este color gris perla, es delicado y ofrece un resultado fue exquisito. Y es que el gris claro funciona como el blanco, en cuanto a claridad, recibe la luz y la rebota, pero matizada.

Si quieres un espacio cálido y acogedor, atenta a esta idea para pintar las paredes del baño. Fórralas con revestimientos de madera y píntalo de un azul grisáceo. Es un color luminoso, elegante y perfecto incluso para un baño pequeño como este. 

El gris petróleo le queda perfecto a espacios con un toque clásico, pero también en espacios rústicos como este. Combinado con la madera es cálido y acogedor. Eso sí, este color es solo para baños muy amplios o que reciban mucha luz natural porque es un tono con mucha presencia.

Sí. Un techo muy alto ayuda a hacer una combinación exquisita. Sanitarios y azulejos blancos ayudarán a que el negro no se vea tan poderoso, mientras que los detalles en madera ayudan a dar calidez al conjunto. El contraste entre los dos provoca que el blanco todavía se vea mucho más blanco. 

El rosa es uno de los colores más elegidos para decorar. Da un toque chic y muy, muy actual. Además, también es un color femenino, acogedor, sofisticado y perfecto para un baño pequeño en el que se busque la luminosidad. Si lo combinas con detalles en dorado, el efecto será muy glam. 

El azul es uno de los colores más elegidos en los baños de los "Mueblers" (los lectores de El Mueble, claro). Y es que es una elección con la que difícilmente te equivocarás. Es fresco y luminoso, y en un tono tan intenso como este, acoge.

¡Claro! La pintura no solo es apta para paredes alicatadas hasta media altura. También lo es para paredes con baldosa hasta el techo. Elige pintura especial para azulejos. No solo se agarrará perfectamente, sino que también aguantará bien la humedad. ¿Quieres saber cómo pintar los azulejos del baño?

El verde menta es un tono que no falta en detalles o espacios tendencia. Es fresco, suave y muy happy. Aquí se ha optado no solo en pintar las paredes sino también las carpinterías e incluso la bañera de estilo antiguo. Único.

Esta combinación para pintar las paredes del baño es para espíritus atrevidos y libres: un mueble de cierto aire rococó, un gran espejo, lámpara de lágrimas, azulejos grises a media altura, suelo de mosaico hidráulico y... ¡fucsia en las paredes! Arriesgado pero, realmente, queda de miedo. Mira más ejemplos de baños clásicos como este, ¡te vas a enamorar!

Si no te atreves a ponerle a tus paredes un color potente, quédate en la gama de los grises que tienden a marrón. Dan calidez a la vez que decoran con estilo. Aquí, el color topo de la pintura también tiñe el mobiliario de este baño decorado por Iñaki Mújika.

Los tonos beige, más o menos intensos, y los arena, triunfan siempre. En baños atemporales o de estilo rústico quedan muy bien porque suman calidez al ambiente. Además, son sufridos y aguantan perfectos durante más tiempo que los colores más claros.

En un baño grande, pintar las paredes de blanco puede ser una opción arriesgada por ser frío y ampliar en demasía el espacio. Así, puedes utilizar un amarillo suave, como este, para llevar la calidez sin perder la luminosidad. 

No solo pintes las paredes, también elige los azulejos del mismo color y lleva el rodillo hasta las puertas. El efecto es 100% envolvente y precioso. Para elegir esta opción lo mejor es tener un baño con mucha luz natural porque, según el tono que elijas, puede empequeñecer algo el espacio.

El azul claro funciona muy bien porque produce un efecto de "distanciamiento" entre las paredes, con lo que amplia visualmente el espacio. Además, transmite serenidad, privacidad y relax, sensaciones ideales para un espacio íntimo como el baño.