Antes y después: 7 muebles oscuros y viejos que ahora querrías tener

"Tengo unos clientes buscadores de tesoros. Compraron con la idea de darle a este mueble una nueva oportunidad", nos cuenta Ceci, de @cecicipi. ¿Quieres ver cómo está ahora?

"Necesité la ayuda de mi carpintero amigo, que se ocupó de reemplazar y poner masilla en los faltantes y el enchapado roto. Luego yo imprimé y pinté con chalk paint", nos cuenta. ¡Vaya cambio!

"Estas sillas Thonet pertenecieron a un inmigrante polaco. Abuelo de mi clienta. Fue un regalo de sus padres, es decir los bisabuelos de mi clienta, y se usaron en la mesa principal en su boda. Y luego las volvieron a usar al cumplir los 50 años de casados. O sea ¡toda una vida en la familia!", nos cuenta Ceci.

"Para este trabajo tuve el vía libre. Me dejaron hacer. Es un trabajo de hace unos años, de cuando aún no había pintura a la tiza en Argentina. Pinté las sillas con látex, hice el color y luego pinté flores y ese pájaro tomado de una postal antigua. Luego protegí con barniz", cuenta Ceci. 
 

"Este mueble tenía como destino la vidriera de un local de ropa. Viajó 170 km para llegar a mí y otro tanto para volver a su casa..." ¿Quieres ver cómo está ahora?

"Pinté con látex color natural, desgasté y una vez hecho eso pasé a pintar las flores. Así lo pidieron. Cubierto de flores. Es pintado, ¡no decoupage!", explica Ceci. ¡Nos encanta!
 

"Formaba parte del mobiliario de la casa de mis abuelos y está en mi poder", explica Ceci. ¿Quieres verla ahora?

"Bajo del lustre oscuro de esta mesita, encontré ¡nogal perfumado! Aunque en este caso en lugar de usar alcohol usé rasqueta y removedor en gel. Protegí con laca al agua incolora", nos comenta.

"Este espejo es otra joyita que encontraron mis clientes 'buscadores de tesoros'. Vinieron de un pueblo cercano para hacerse atender", cuenta Ceci. Veamos si mereció la pena...

"Este espejo lo lijé y traté con la técnica de los paños mojados para poder retirar el estuco. Luego protegí con laca al agua", explica Ceci. ¡Voilà!

Lo encontraron los mismos clientes del espejo y la primera mesita. ¡Y es que merecía otra oportunidad!

"Este ropero fue una titánica tarea ¡de 20 días! En este caso lavé con removedor en gel, espátula y viruta. Y luego pinté unos pajaritos en las puertas, ¡para que no fuera tan serio! Porque es para una nena", explica Ceci. ¡Nos encanta!

"¡Este es mío! Perteneció a mis abuelos y está en esta casa desde siempre. ( Vivo en la casa que era de mis abuelos y conservo el mobiliario original)", confiesa la argentina.

"Como típico mueble provenzal, tenía un lustre oscurísimo de goma laca. Así que lo trabajé con alcohol y viruta. ¡Me llevó su buen tiempo! Protegí con cera líquida", cuenta Ceci. ¡El resultado merece la pena!

"¡Hola! Soy Ceci y reciclo y pinto muebles y objetos. En realidad, soy conservadora de museos, pero salvo un tiempo, siempre me dediqué a pintar. Lo hice toda la vida como hobbie, hasta que pasó a ser mi modo de vida. Me apasiona transformar y las segundas oportunidades, poder encontrar el potencial escondido en objetos que muchas veces son despreciados o dejados de lado. ¡Ah! La pared que uso actualmente de fondo para las fotos también la pinté yo", nos dice.