Antes y después: 12 muebles restaurados im-pre-sio-nan-tes

"Este aparador- mueble radio español de los años 40 lo renovamos como parte de un proyecto de interiorismo", nos cuentan Alon y Mally, del barcelonés Studio Alis.

"Las medidas de este aparador nos encajaban perfectamente en el rincón donde pusimos el televisor y entonces solo era cuestión de adaptar su aspecto al espacio que hemos decorado. Para eso le teníamos que dar un aire fresco. Hemos quitado las puertas y las patas, los elementos decorativos más anticuados. Con eso también hicimos espacio a los objetos que la clienta quería poner ahí (tipo altavoces, router, dvd). Hemos pintado el mueble en blanco, dejando el sobre y los dos cajones en madera y hemos cambiado los tiradores. La radio original la hemos dejado como un elemento decorativo. Aunque no funciona da mucho carácter nostálgico al mueble y encajaba bien con los otros elementos decorativos de la casa", nos explican de esta auténtica joya que han creado.

"Sus líneas y curvas delicadas de estilo nórdico no estaban en acorde con su tono oscuro y cojines de estampado anticuado. Así que en este caso el cambio ya lo vimos de forma inmediata y era solo función de llevarlo al cabo. Decapando, lijando y dando un acabado que haga lucir la madera y respeta la época y el estilo del mueble y retapizando los cojines con un color neutro más acorde con los nuevos diseños", explican sobre su trabajo.

"Una vez empezamos a decapar la pieza descubrimos otras capas de color por debajo, lo que nos permitió crear este efecto decapado en la parte inferior de forma natural. Aun así queríamos darle un toque más moderno y atrevido al mueble, así que optamos a por hacer una combinación entre el viejo con toda su magnitud y belleza y el nuevo en forma de colores más vivos y acabados lisos", explican.

Por fuera es rosa, por dentro un bonito turquesa. ¡Precioso!

Esta cajonera española de los años 50 con patas inclinadas estaba muy deteriorada... ¡Te encantará cómo ha quedado ahora!

"Teníamos muchas ganas de darle una nueva vida, ya que los retos nos gusta. En piezas como esta de tan mal estado y de calidad medio baja la restauración clásica normalmente no vale la pena, así que hemos optado por pintarla y queríamos hacer algo colorido y vivo. En este caso hemos optado por utilizar Chalk-Paint. El cuerpo está pintado en verde, los cajones en rosa y las flores blancas están hechas con esténcil. Para mantener algo de sus rasgos originales hemos optado en dejar las patas en madera. Como ya hemos añadido tantos motivos decorativos queríamos que los tiradores sean más discretos y por eso hemos optado por tiradores más pequeños de cerámica blanca que camuflen entre las flores", explican desde Studio Allis. El resultado es genial.

"A este escritorio francés de los años 60 le queríamos dar un toque más femenino y glamuroso, inspirándonos por sus motivos curvados...", apuntan. ¡Mira qué gran resultado!

"Le hemos pintado en blanco roto con efecto envejecido- decapado delicado y le hemos añadido dos líneas – una ancha de color turquesa y otra más estrecha de color dorado. Los tiradores son de cristal con forma de diamante y con la base dorada. Está pensado para hacer servir como escritorio/ tocador", explican desde Studio Allis.

"Hemos optado por un efecto degradé, un efecto fácil de conseguir cuando pintamos varios cajones. Nos gusta mezclar nuestras propias pinturas con pigmentos, así podemos llegar a resultados exactos en cantidades pequeñas.

Un truco por si queréis conseguir este efecto en vuestro mueble: en vez de comprar varias pinturas podéis comprar un bote del color más oscuro y otro de color blanco. En botes separados vais mezclando diferentes cantidades para conseguir diferentes tonalidades del mismo color". ¡Genial!

"De la parte superior creamos un mueble independiente añadiendo patas Chippendale prefabricadas de madera. Para dar al mueble un efecto decorativo  y para que luzca la vajilla blanca que hemos imaginado dentro, pintamos el interior en un azul gris oscuro. Para el exterior hemos elegido un color más suave que lo complementa". WOW

"Se trata de un mesa italiana de los años 50 atribuida al diseñador Ico Parisi", explican los restauradores. ¿Quieres ver cómo está ahora?

"Al decapar la pata, descubrimos una magnífica madera de palisandro y ya no teníamos duda que la queremos destacar y hacer lucir. Como el sobre estaba deteriorado y teníamos claro que lo íbamos a cambiar, optamos por un sobre de vidrio cortado a la medida y la forma original", explican. Ahora es una mesa moderna ¡espectacular!

"Siempre antes de empezar intentamos imaginar donde iría el mueble aunque ya sabemos por nuestra experiencia que no siempre acaban donde imaginamos. Por su tamaño, rediseñamos el mueble pensando en una habitación infantil.

Primero hemos decapado el mueble para que la madera luce en su tono original. La cornisa superior estaba rota, así que la hemos cambiado por otra, igualando los tonos de la madera. Para añadir interés decorativo pintamos líneas blancas a lo largo del mueble y alrededor de las puertas. En los paneles de las puertas pegamos telas para añadir un toque de color y algo de estampado". ¡Precioso!

Esta butaca de los años 50 tapizada en skay de color verde militar claramente necesitaba un poco de atención y amor para volver a ser una joya...

"Hemos restaurado la madera y le dimos un acabado acorde con su época y estilo. A la hora de tapizarla hemos optado por la combinación de dos telas, una con un estampado geométrico con aire mid-century y la otra lisa de un tono complementario.

El truco para combinar una tela estampada con otra lisa es escoger un color que ya existe en la tela estampada y que queremos destacar para la tela lisa – así aseguramos que se complementan.

Para darle un aspecto más moderno, a la hora de tapizar hemos cambiado la forma de la butaca definiendo mejor sus líneas", explican.

"Para ganar altura le hemos añadido patas y hemos utilizado un lavabo exento. Importante mencionar que hemos reducido los cajones en el interior para que sean útiles y que la tubería pase por detrás. Hemos pulido el mármol para poder aprovechar las piezas originales. Como era un mueble que pusimos a la venta, hemos optado por un color neutro que pueda encajar en muchos lavabos. Hemos elegido tiradores de cerámica de color negro para añadir interés decorativo a la pieza". ¡Qué bonito!

Los restauradores detrás de estos muebles espectaculares. Tienen tienda y taller en Barcelona.