Una joven pareja fue a comprar papel pintado al estudio de la interiorista Gloria Sanz . Lo que parecía un "lavado de cara" inicial para su vivienda, terminó convirtiéndose en una reforma total. ¡Así ha quedado su tríplex tras la reforma! Antes: una entrada aburrida y oscura El nuevo hogar de la pareja contaba con muchos metros cuadrados disponibles, pero estaba mal aprovechado. Además, tratándose de una pareja joven, la decoración era anticuada y necesitaba ser actualizada. A pesar de que el suelo de madera existente era bonito, le restaba luminosidad y desentonaba con el verde chillón de las paredes. ¡Había algo que no encajaba! Después: una entrada moderna, bonita y juvenil ¡Mira qué cambio! Solo con la entrada, la casa transmite una sensación totalmente distinta. "Contábamos con un presupuesto ajustado , así que tuvimos que ingeniárnoslas en muchas ocasiones", explica Gloria. "Mediante estas escaleras se accede a la segunda planta. Apostamos por un restyling para darles un aspecto más actual: eliminamos las barandillas, las lacamos en negro y añadimos paneles", señala. Antes: unas paredes verdes afeaban el aspecto del recibidor El recibidor es una de las estancias más importantes de la casa. Te da la bienvenida, y por eso la decoración debe ser cálida y agradable. Con este recibidor tan extraño y frío, uno perdía las ganas de adentrarse a conocer las otras habitaciones. Después: un recibidor chic y elegante que invita a entrar Después de la reforma, el pequeño recibidor tiene más estilo y es funcional. "En la primera planta, dejamos una cocina con salón comedor incorporado que se separa del recibidor mediante una puerta de cristal corredera que permite aprovechar la luz natural que entra de la cocina y salón", relata la interiorista. ¡Nos encanta como ha quedado! Antes: una sala de estar muy dividida y sin gracia La planta baja antes de la reforma estaba compartimentada y era sosa. Se mantenía el color verde menta en las paredes y el suelo oscuro le restaba luminosidad, a pesar de tener grandes ventanas. Sin duda, era necesario colocar muebles nuevos y una pintura neutral que sacara a la luz todo su potencial. ¡Y así ha sido! Después: una planta open concept mucho más actual En esta primera planta se ubicó el recibidor, una zona de almacenaje, un dormitorio, un baño completo y la sala de estar open concept mucho más moderna y bonita que antes. Han cambiado el color de las paredes y han apostado por tonos negros y grises en la decoración, que encontramos tanto en el salón comedor como en la cocina, dando continuidad visual . Los detalles en amarillo mostaza , como la lámpara de araña del comedor, animan el espacio. Después: una cocina pequeña, pero funcional ¿A quién no le gustaría innovar sus recetas en esta nueva y moderna cocina ? Ahora la pareja dispone de mucha encimera para trabajar, junto con electrodomésticos nuevos de última generación. La interiorista añadió también una pequeña barra con taburetes en amarillo que cumple la función de office para los desayunos. Después: un salón agradable y bien decorado Como el presupuesto era limitado, el cambio en el salón fue algo más discreto, pero igualmente necesario. Lo que antes era un espacio vacío y anticuado, ahora es una estancia moderna, cómoda y con buen gusto . Con la mesa de centro y mueble del televisor han introducido detalles de madera, que siempre da calidez , mientras que la butaca combina con el mobiliario negro de la cocina. Se nota como se ha cuidado hasta el último detalle. Antes: un baño de invitados desfasado y olvidado En la planta baja encontramos un baño de invitados completo que parecía de otra época: las baldosas eran antiguas y estaban descuidadas , y la grifería tampoco es que funcionara muy bien. De toda la casa antes de la reforma, los baños eran los que necesitaban un cambio con urgencia. Después: un baño moderno totalmente actualizado ¡No parece el mismo! El baño de invitados tras la reforma de Gloria Sanz Interiorismo es digno de un hotel de lujo. Han cambiado el mobiliario y también la grifería, que ahora es de color negro, lo que aporta sobriedad y elegancia a la estancia. La bañera ha sido sustituida por un moderno y funcional plato de ducha y el espejo redondo combina con el papel pintado de una de las paredes. Antes: un dormitorio infantil insulso y sin muebles Una habitación infantil debe ser una estancia alegre, coqueta y luminosa. Asimismo, debe ser un espacio que transmita tranquilidad y paz, para que el infante se sienta a gusto y duerma. Antes de la reforma, este dormitorio estaba vacío y no tenía nada especial . Después: una habitación infantil bonita y con encanto No fue necesario poner mucho más que un papel pintado y un par de muebles bonitos para transformar completamente la imagen de esta habitación. Nos ha gustado mucho como ha quedado el armario verde pastel, igual que la cunita de madera y fibras. ¡Adorable! Antes: un dormitorio principal desaprovechado y anticuado En el dormitorio principal sucedía más de lo mismo: era más amplio y tenía potencial, pero no le habían sabido sacado partido. Las paredes pedían a gritos una lavado de cara y el suelo de madera oscuro le restaba luz a la estancia. Después: un dormitorio principal grande y atemporal "En esta planta incorporamos un dormitorio al dormitorio principal para dotarlo de un vestidor", explica Gloria. Tras la reforma, el dormitorio es moderno y ha ganado en todos los sentidos, pues las paredes azules y el suelo de madera clarito han reducido la sensación de estrechez. Los detalles en color mostaza y negro los podemos encontrar también en la planta baja. Antes: un baño completamente obsoleto "En el baño de esta planta realizamos un simple lavado de cara manteniendo el mueble de obra original", indica la interiorista. Había mucho margen de mejora , ya que partían de un baño con unas baldosas azules y blancas que lo echaban todo a perder. Después: un baño grande de revista Esta es una de nuestras partes favoritas. El baño es espectacular, y la iluminación crea el ambiente de un spa. ¿Lo mejor? ¡Una increíble ducha con mampara para relajarse al terminar el día! Antes: una escalera envejecida y sin gracia La madera oscura y el papel pintado de las paredes afeaban la zona de la escalera , la cual guía a la última planta de la casa, la buhardilla. Carecía de gracia y la interiorista pensó que era muy importante dedicar parte del presupuesto a renovar la imagen de esta zona de paso. Después: una escalera muy elegante y especial "En la última planta retiramos la barandilla de la escalera original y la pintamos. Además, cerramos una zona complicada y poco funcional que había y allí pusimos más zona de almacenaje", explica Gloria. De lo que parecía una zona de paso sosa y sin función, la interiorista ha creado un rincón muy útil y a la última . Antes: una zona de trabajo desordenada y perfectible La última planta hacía la función de zona de trabajo, pero tampoco quedaba muy claro. En general, nadie solía utilizar la buhardilla y el suelo oscurecía la estancia. Y eso sin hablar del techo, que necesitaba una mano de pintura urgentemente. Por otro lado, la barandilla metálica de la escalera claramente desentonaba. Después: una zona luminosa pintada en tonos grises "La pareja es muy deportista, así que al final dejamos esta planta totalmente diáfana porque necesitaban un espacio para utilizar de gimnasio ", resalta Gloria. Solo con actualizar la claraboya del techo y un poco de "chapa y pintura", la buhardilla está mucho mejor. ¡Y sin gastar mucho dinero! Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter .