80 aniversario de IKEA: ¿quieres ver la portada del catálogo de IKEA del año que naciste?

El catálogo de IKEA llega a nuestras casas y se queda rondando por ahí hasta que llega el siguiente. En España, lleva decorando nuestras casas desde hace varias décadas y se ha convertido en uno más. ¿Quién no tiene algún mueble o accesorio de IKEA?  

Apareció en una publicación dirigida a agricultores y en ella decía "A toda Suecia". Ya por entonces, su creador Ingvar Kamprad, ya enviaba los muebles desde su pueblo, Agunnaryd, a todo el país.  

Bajo el lema 'El camino de las buenas compras', el creador de la famosísima multinacional daba sus primeros pasos en el mundo del mueble. En 2013 se hizo una reedición de esta butaca que, además, fue la protagonista del catálogo de ese año. 

 Además, su aniversario lo está celebrando por todo lo alto, porque recientemente ha abierto una nueva tienda urbana en la Diagonal de Barcelona número 532. ¡Descúbrela!

Durante este año, Kamprad tuvo una idea que revolucionó la industria del mueble: una exposición permanente con todos sus muebles. Aunque después había que encargarlos, fue el principio de los laberintos que conocemos hoy en día. 

En el catálogo de 1953, ya ponía algo así como "muebles más baratos". Kamprad ya sabía entonces que la clave era hacer muebles para todos los bolsillos. De hecho, hoy IKEA se erige como una de las tiendas con muebles de diseño a precios supercompetitivos. 

Este año ya empiezan a salir muebles en el catálogo. Y porque vemos que es en blanco y negro, pero esa butaca y la mesita de centro bien podrían ser protagonistas de un catálogo más actual. 

Kamprad empieza a definir el modelo de negocio que aún hoy pervive (y que es el reclamo para que muchos visitemos su tienda). 

1956, un lema: "Lista de deseos al precio deseado". Con ese reclamo y la sencilla silueta de una butaca, Kamprad sabía lo que quería el gran público. 

Ni muebles salen en esta portada. Solo la silueta de un gato. Y con eso parece que fue suficiente para seguir consolidándose en un mercado en auge. 

¿Sabes de dónde viene el nombre IKEA? Es un acróstico de su nombre, la granja donde nació y su pueblo. La I de Ingvar, la K de Kamprad, la E de Elmtrayd y la A de Agunnaryd. ¡IKEA!

"Un vistazo a los muebles más deseados". Y siguen siéndolo hoy en día. Por cierto, ¿el diseño de esa butaca no te resulta actual y muy familiar? Si cuando dicen que todo vuelve... 

El mundo se moderniza y, con él, el catálogo de IKEA. Sencillo, ¿verdad? Unas gafas de sol reflehan dos ambientes, un comedor y un salón. Porque lo vemos y lo deseamos. ¡Era listo el señor Kamprad!

1961 es el primer año en el que vemos una imagen de ambiente en una de las portadas. Lo que hoy llamaríamos retro moderno entonces era de lo más actual. Aunque, ¡admitámoslo!, cualquiera de esos muebles quedaría genial en un salón de hoy, ¿verdad?

Es posible que debamos a IKEA mucho en cuanto a términos decorativos se refiere y sobre todo en tendencias. Y en 1962 ya utilizaba las alfombras y las lámparas para separar ambientes. Esta portada ¡tiene tres!

Los estampados y el blanco relevan a los muebles oscuros y con mucha presencia. Butacas ergonómicas y con tapizados de color. Si estuviéramos en 1963, bien podría ser una portada de El Mueble. 

Kamprad ya vende todo tipo de muebles. Desde sofás, mesas, estanterías o escritorios. La madera recupera el protagonismo que perdió el año anterior y se implanta un ambiente sobrio y elegante. La verdad que el sofá parece extracómodo. 

Elegancia total. Los sofás de cuero negro con las patas en dorado también podrían ser de hoy en día. El mueble de pared tal vez no tanto, pero entonces fue una revolución. Estilo y almacenaje era lo que necesitaban las casas. Y con IKEA lo tenían además a precios muy asequibles. En este año, IKEA abre su primera tienda en Estocolmo, la capital de Suecia. Se inspiró en el diseño circular del Museo Guggenheim de Nueva York. Toda una declaración de intenciones. 

Las lámparas redondas hacen su aparición. De hecho, son míticas esas lámparas de papel (todos hemos comprado alguna en alguna ocasión). ¿Verdad que el aparador y la estantería son ideales? 

Una de las claves del éxito de IKEA es ofrecer un mismo mueble de diversos colores. ¿Que no te gusta en negro? Lo tenemos en naranja, azul y ¡hasta amarillo! Ya se empieza a ver el colorido que caracterizará a los 70. 

Ya en 1968, Kamprad apostaba por piezas multifuncionales como esta butaca con reposapiés (que sirve también de asiento). Comodidad a precios de saldo.  

El último catálogo de la década de los 60 es un aperitivo de lo que vendrá después en los 70. Colores con fuerza, blanco y formas sinuosas. El diseño cambia y evoluciona. Como el mundo. Por cierto, que este fue el año en el que abrieron su primera tienda fuera de Suecia, en Dinamarca. 

Es la primera vez que sale una persona en el catálogo de IKEA. Y el sofá modular es otro avance de lo que vendrá y que hará a la multinacional ser famosa. 

Vuelven los sofás modulares y las estanterías (también modulares) con aperturas a diferentes lados. Kamprad ya empezaba a despuntar en sus diseños. 

IKEA comienza a democratizar los muebles de diseño con estas piezas que bien parecen de coleccionista. Empiezan también a venderse las mismas piezas con estampados diferentes. ¿Y qué me decís de la enorme lámpara de papel?

Diván, chaise longue, sofá para uno, para dos o cama. No sabemos muy bien cómo llamar a este mueble, pero ¡nos encanta! Kamprad innova y el mundo le escucha. 

En 1974, IKEA ya apuesta por los espacios de reunión. Saben que nos gusta recibir en casa, así que la estampa que aquí se muestra es perfecta. Por cierto, nos alucina el sofá que puede reclinarse (como las tumbonas actuales). La ligera estantería (hoy en día venden una similar) y las butacas son lo más. 

¿No tiene hoy IKEA una butaca que bien podría ser la hija de esta? Y se vendía con y sin reposapiés. Kamprad ya se olía por aquel entonces que no todos necesitamos lo mismo. Y con ¡estampados a cuadros! 

Los muebles de pino hacen su llegada. ¡Y mira que fueron un greatest hit en deco! ¿Acaso hay casa que no haya tenido uno de esos? Y, por primera vez, esta portada apuesta por la vida cotidiana, por el día a día. 

¡Esa es la mítica butaca de IKEA! Aunque hoy el diseño de sus patas es algo distinto, ¡es prácticamente la misma! También por primera vez vemos un sofá esquinero que aprovecha el espacio con estilo. ¡Kamprad era un visionario! 

Una vuelta a lo clásico. En esta portada del catálogo de IKEA triunfa la mezcla de estampados del papel de la pared con las rayas de los sofás. Cierto que los muebles, aun hoy, quedarían estupendos en cualquier salón. Blanco y madera, ¡no falla (pasen los años que pasen)! Este año se abrió la primera tienda en España, en Telde, en la isla de Gran Canaria. Ya entonces las islas eran destino de muchos veraneantes del norte de Europa.   

Blanco y con tapizado en capitoné. Aunque los muebles se van modernizando, a finales de los 70 hay una vuelta a ese estilo clásico y elegante, aunque con un cierto punto kitsch. Aunque la culpa es del tapizado de skay. 

IKEA pone por primera vez en su portada mobiliario infantil y ¡con niños! Pero también cosas para la cocina y una pequeña muestra de la variedad de sus creaciones. Cierto que tiene cierto aire de revista juvenil, pero ¡qué le vamos a hacer! ¡Comenzaban los 80!

Esta portada fue una llamada a todos los públicos. Desde el abuelo al nieto, IKEA quería dar a conocer que no solo hacía muebles para hogares actuales, también para los más clásicos en los que se buscan muebles confortables. ¡Y sale la, ya mitiquísima, mesa Lack! Que levante la mano quien no ha tenido una en su casa. 

Vuelve la imagen del salón a la portada del catálogo. A estas alturas, IKEA es conocida en todo Suecia y poco más necesita que un poco de estilo.  

Así es la portada de IKEA en 1983. En su leyenda dice algo así como "Aquí tienes la gama de decoración del hogar más grande de Suecia. Con muchas ideas para crear o renovar su hogar". 

Después del blanco total, vuelve el color. Y, ¡cómo no!, la mesa lack comienza a versionarse en más tamaños y con más funciones. 

Parece que en 1985 esas eran las tendencias. Un ambiente elegante y clásico es el que triunfa en el catálogo de este año. Por cierto, ¿no ves una silla estilo Thonet al fondo? Su creador las fabricó de manera que el usuario pudiera montarla. ¿Sería de ahí de donde sacaría la idea? 

A estas alturas, IKEA ya sabe bien lo que triunfa. Y la variedad de textiles y tapizados comienza a pasar del monocromo a los colores. Eso sí, los diseños se mantienen. Porque si algo funciona, ¿para qué cambiarlo?

Maderas claras, cuero y formas sinuosas. Lo que nos deja la portada de 1987 respira modernidad y un toque algo más actual. ¿Será esa vitrina el origen de la Billy?

Los sofás son uno de los buques insignias de la compañía. Y parece que a finales de los 80 ya lo sabían. Elegante cuero negro o camel es lo que se lleva entonces. Parece el origen del modelo Klippan. 

Modernidad y clasicismo se aúnan en última portada de los años 80. A estas alturas ya casi todo vale u el ambiente clásico de este salón contrasta con el alegre tapizado del sofá. Tal vez, demasiado alegre. 

IKEA comienza la década de los 90 con fuerza. Y ya va viendo dónde está la clave: neutros en los tapizados y color en los pequeños detalles, como los cojines o esa especie de cortina florida que va por encima de los estores. Y la mesa Lack, ¡se queda a la mitad!

Un sofá elegante con cojines estampados y un plaid colocado con mimo. ¿Nos habrá copiado Kamprad para esta portada de 1991? 

A principios de los 90 los muebles oscuros vuelven a hacer aparición. Ese característico color que se asocia con las maderas nobles contrasta con la vitalidad de los sofás enfrentados.   

Color pero con textura. Y que no falte una mantita colorida para darle el contrapunto. Poco más necesita IKEA en 1993 para triunfar entre sus adeptos. 

"Muchas noticias. IKEA rebaja sus precios". Aunque actualmente IKEA no hace rebajas como tal, sí que reduce el precio de muchos de sus artículos más exitosos. 

De hecho, ¿se fue alguna vez? Con la butaca blanca y madera al natural parece que este pequeño rincón de lectura hubiera sido sacado de una revista actual. 

En 1996, IKEA ya empieza a ver un filón en los espacios pequeños. Muebles multifunción en los que cabe de todo (desde la tele hasta los libros) son la clave de un año en el que se instaló el primer IKEA en la península, en Badalona.  

Muebles ligeros y que se pueden mover cómodamente. Las piezas plegables (como la silla negra) o apilables (como la banqueta blanca del fondo) comienzan a ser uno de los greatest hits de la marca. Aunque una cosa está clara, gracias a que la banqueta con forma de sillín de bici no ha perdurado. De verdad, gracias. 

Una nueva apuesta por los niños. A finales de los 90 los salones dejan de ser salas de museo y empiezan a ser un espacio para pasar en familia. E IKEA lo sabe. 

Como te decíamos en 1998, los niños se apoderan del salón. Y parece la conquista silenciosa. Ya no es un espacio para recibir, es un espacio para vivir y relajarse en familia. Sofá blanco y fibras, ¿esta gente ve el futuro o es que nosotros hemos viajado al pasado?

Parace que la idea de los niños en el salón funcionó. Comienzan a verse muebles más modernos y rompedores, como la mesa auxiliar redonda en forma de bandeja o el aparador metálico rojo que aun hoy se sigue vendiendo. Por cierto, ¿están mirando un móvil?

A principios de los años dos mil volvió el blanco. IKEA sabe que los muebles de ese color triunfan: son atemporales, elegantes y encajan en cualquier estilo. ¿Y el corte de pelo a tazón? Un clásico también. 

Un clásico en todo piso de alquiler que se precie. La mesa Lack continúa con su carrera al estrellato y las alfombras de pelo gustoso comienzan a aparecer.  

Ergonomía, comodidad y calidez. Esto es lo que vende la portada del catálogo de IKEA en 2003. Y parece que no necesita de nada más. 

Si en 2003 funcionó, en 2004 volvieron a repetir. Y como lema "Tu guía con miles de productos". Hoy en día, siguen así. Por cierto que esta butaca es el origen del sillón Gubbo, aunque mucho más clásico en su forma hoy de lo que fue en su origen. 

En 2005, IKEA apuesta por las tradicionales camas de forja y, como dicen, "por crear la habitación de tus sueños! Y a este dormitorio no le falta de nada. Desde los pies de cama hasta el armario estrecho (genial para casas pequeñas) con espejo. 

Por el color, y por el dormitorio. Parece que en 2004 les fue bien colocando un dormitorio y no hay que dejarlo pasar. Por primera vez vemos el cuadradito (que tanto nos gusta) de 'Hemos bajado el precio'. ¿Verdad que la cama se parece mucho a la Malm?

Este fue el origen de las portadas que conocemos hoy en día. La familia que sale ya no está estática, sino que se mueve, juega, vive su casa. Y, de nuevo, el blanco manda en 2007. 

A finales de la primera década del nuevo siglo, los colores seguían con fuerza. Y, por primera vez, vemos el sofá Karlstad (otro conocido de los pisos de alquiler). Las rayas hacen presencia y copan los estampados. 

IKEA comienza a soltar esos lemas que se nos meten en la cabeza y nos encantan. El modelo sigue siendo uno de sus éxitos. Ahora también en opciones con más plazas y muchas opciones de tapizado.  

O eso parece que nos quiere decir IKEA con la portada de 2010. Para todas las estancias y para todas las familias. Ahí está la clave. 

"El interior es lo que cuenta", dice la portada. IKEA hace una declaración de intenciones: tenemos más que diseño, tenemos calidad. 

Cada vez las casas son más pequeñas. Y en 2012 eso fue lo que quiso reclamar IKEA. Muebles apilables y que caben en cualquier sitio. 

En 2013 IKEA ya está en muchos países y hace una reedición de uno de sus muebles con más solera. Esta butaca sale en el primer catálogo de IKEA, en 1951. ¿Te has fijado?

No es hasta 2014 que una cocina fue la estrella de portada. Más que una cocina, la despensa. El sillón Strandmon se presenta en un vivo rojo, que actualmente sigue luciendo como muchos otros: mostaza, beige, azul, tropical... 

En esta portada del catálogo de IKEA se aúnan con armonía el color y los estampados florales, que hacía décadas estaban relegados a un segundo lugar por otros más vivos. Ahora se busca la calma, el confort. Esa cama...  

De nuevo una apuesta por la vida en familia. Y esta vez en la cocina. Los muebles blancos (ya estaban ahí) ven suavizada su frialdad gracias a la madera al natural y la gran presencia de plantas. Es la primera vez que hay tantas en una portada. ¿Una llamada a la naturaleza, tal vez? 

Desde 1974 que IKEA no se acordaba de nuestros amigos. En esta ocasión, además, aprovechan a presentar el carrito Råskog como mesita auxiliar, pero vale para mucho más. Mira estos hacks.  

Moderna, colorida, vital. Así es la portada de 2018, en la que IKEA nos invita a vivir momentos únicos en nuestro salón. Verde y mostaza se unen con el rosa palo y crean una combinación, cuanto menos, interesante. 

Y ya lo han conquistado. Les ha llevado algunas décadas pero ahora los salones son para ellos. Los reyes de la casa. Sofás que aguantan invasiones y muebles que soportan huracanes. ¡El salón es suyo!

Eso se respira en la portada de 2020. Un dormitorio para relajarse, con la siempre infalible combinación de blanco y negro (aunque es la primera vez en una portada del catálogo). 

Con este catálogo, IKEA demostraba una vez más que se puede dormir bien de forma económica, y lo sugiere con este dormitorio sofisticado en tonos azules y grises. Sería su último catálogo en papel desde que decidió publicarlo digitalmente.

En 2022 IKEA innovó con la publicación de su catálogo de forma digital. Para comenzar una nueva era, escogieron la combinación de muebles blancos y madera en cocinas, baños y dormitorios.

Este año la apuesta de IKEA está en muebles y decoración atemporales, como mostró con este bonito dormitorio en tonos grises, blancos y neutros. Este ha sido el último catálogo de IKEA y habrá que esperar al año que viene para ver las nuevas tendencias en el hogar.