Aunque etimológicamente su nombre significa "habitación de la casa para dormir" lo cierto es que hoy en día los dormitorios son muchísimo más que esto. Estos espacios se han convertido en los reyes de la versatilidad, pues además de invitar al descanso se transforman a veces en vestidores, en zonas de estudio a tiempo parcial, de lectura...

Esta faceta multitasking hace necesaria una distribución óptima, que nos permita sacar el máximo partido a cada zona, pero sin olvidar que su función primordial sigue siendo ofrecer el mejor de los descansos. La clave: respetar las medidas ideales y la proporción. (Si quieres saberlo todo sobre el orden, no te puedes perder la guía del orden de El Mueble. Descarga aquí el ebook).

Cómo distribuir un dormitorio principal para poder dormir, guardar y relajarse

Dormitorio con papel pintado verde con flores, ropa de cama rosa viejo y muchos cojines, tocador con banqueta y espejo con luces de camerino

- El círculo ideal. Un dormitorio será cómodo si puedes trazar un círculo de unos 260 cm de diámetro. Es el que te permitiría incluir una cama de 135 o 150 cm y el espacio libre alrededor para moverte bien.

Blanco, maderas claras y detalles de cristal te ayudarán a aligerar el espacio, siendo la mejor combinación en dormitorios de pocos metros

- Despertarse con vistas. Coloca la cama en paralelo o frente a la ventana. Ver el exterior hará que percibas el espacio más grande. ¡Así de simple!

- Armario disimulado. El armario es la pieza que más ocupa (60 cm de fondo). Cada persona necesita un cuerpo de entre 80 cm y 1 metro de ancho para poder organizar sus prendas.

Plano dormitorio

Medidas útiles en el dormitorio principal

  1. Alrededor de la cama. Lo ideal sería dejar un espacio de 60 cm a cada lado de la cama para poder acceder a ella sin tener que hacer malabarismos.
  2. De la cama al armario. La distancia mínima recomendada es de 1 m para abrir las puertas sin obstáculos. Si no tienes el espacio suficiente, apuesta por las puertas correderas dejando un paso de unos 80 cm.
  3. Cada hueco cuenta. Puedes aprovechar el espacio bajo la ventana para crear una zona de estudio. Basta con un tablero de 1 m de largo y 30 cm de fondo.

Cómo distribuir un dormitorio infantil y crear un mundo para jugar y estudiar

Dormitorio infantil con papel pintado en una de las paredes, escritorio a medida con silla Eames que hace L transformándose en cabecero con estantería

- Muebles a medida. No lo dudes: los muebles a medida permiten aprovechar al máximo los metros liberando espacio. Distribuye siguiendo las paredes para dejar una amplia zona en el centro para jugar. ¿El mínimo ideal? 150 x 150 cm.

- Donde duerme uno... duermen dos. Si comparten habitación una buena idea para liberar espacio son las literas. Las tipo tren, al tener las camas desplazadas, son las más cómodas. Y, además, permiten aprovechar su estructura para guardar. El único "pero" es que necesitan al menos 3 m de largo por 2,20 m de ancho.

- Y para el armario... Necesitas un espacio mínimo de 40 cm de fondo por 120 de ancho. Elige los interiores flexibles para poder separar las baldas a medida que vayan creciendo y su ropa también aumente de talla.

- Del juego al estudio. Si tus hijos ya tienen más libros que juguetes, plantéate hacerles una librería no más alta de 180 cm y fíjala a la pared para ganar seguridad.

Plano dormitorio infantil

Medidas útiles en el dormitorio infantil

  1. Más que un cabecero. Un mueble a medida de 20 cm de profundidad hace de cabecero a la vez que ayuda a guardar o sirve de repisa para el despertador, por ejemplo.
  2. Mesa de estudio. Debe medir, como mínimo, 120 cm de largo x 60 cm de ancho. En una habitación compartida, añade 80 cm de ancho.
  3. Baldas. Crea con ellas una librería a su altura de 30 cm de fondo. Si son pequeños, por seguridad no la pongas bajo la ventana.

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