La pared del cabecero suele ser una de las grandes protagonistas de la decoración del dormitorio. Sin embargo, hay ocasiones que dejarla en blanco es la mejor opción, porque existen otros elementos que destacan más. Y no necesita ni cuadros, ni papel pintado, ni color para llenar de encanto y luz el dormitorio.

Además, que sean blancas no significa que sean aburridas. Pueden tener molduras, un cabecero que las llene de vida o una práctica hornacina. Estos 7 dormitorios tienen un poco de todo y buenas ideas que te inspirarán. 

A continuación, repasamos algunas de las mejores fotos e ideas de dormitorios sin una pared del cabecero decorada y en blanco, que podrían inspirarte en tu próxima reforma. Una vez más, se reafirma la teoría del 'menos es más' en decoración con estas propuestas llenas de estilo que te dejamos. 

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1.

Un dormitorio rústico con lamas pintadas en blanco

Un dormitorio rústico con lamas pintadas en blanco 00507346

Cabecero y mesillas de la propietaria. Butaca de Miki Beumala.

El Mueble

Este dormitorio abuhardillado se ha convertido en un luminoso y estiloso refugio de montaña gracias a la intervención de la interiorista Ana Galofré. “En realidad, de suelo a techo todo era de madera de pino barnizada, que oscurecía mucho. Le dimos más luz pintándolo todo de color lino, que a la vez es cálido, no como el blanco más puro que puede resultar frío”, explica. La pared del cabecero era de madera oscura y se ha aclarado para ganar luz y sensación de espacio. Además, las lamas en vertical también ayudan a sumar altura visualmente. La moqueta de alga pone el contrapunto más cálido en el dormitorio, decorado con muebles atemporales y ropa de cama con toques azules. 

2.

Con una hornacina a modo de cabecero

00545058 Dormitorio con lámparas suspendidas, banquetas y mesillas tipo cajonera

Lámparas en Punto Luz. Mesillas de Amazon. Taburetes de Catalina House.

El Mueble

Todos los elementos de este dormitorio se alían para potenciar la luz, crear un espacio relajante y no abigarrar el espacio. Es un proyecto del interiorista Sergi Pons donde paredes, techos y estores en blanco crean una luminosa base. La pared del cabecero, lisa y en blanco, integra una práctica hornacina perfecta para tener los libros a mano. La decoración se completa con unas ligeras mesillas voladas, lámparas de techo y un dúo de banquetas a pie de cama. El suelo de madera pone el contrapunto de calidez. Y la ropa de cama, de cuadros y en tonos verdes, un  toque más sofisticado.  

3.

La pared del cabecero con unas elegantes molduras

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Cómoda antigua de Mavi Lizán. Cabecero y funda de Catalina House.

El Mueble

Las molduras son un elemento que suben el nivel de cualquier pared. En el caso del dormitorio es una manera elegante y atemporal de enmarcar la cama y subir el nivel decorativo de todo el espacio. En este dormitorio luminoso y con estilo, el cabecero de lino a tono con la pared no compite con las molduras, lo mismo que la ropa de cama, también en tonos claros. La calidez de la madera del suelo, los muebles y algún complemento es el único punto de contraste. El dúo blanco y madera es siempre una apuesta ganadora que llena de encanto y luz el dormitorio. 

4.

El cabecero con capitoné es protagonista

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Cabecero a medida de Deco Lur Sofá. Banqueta de Artelore Home. Alfombras de KP.

El Mueble

El cabecero con capitoné en rosa tiene tanta presencia en este dormitorio que la pared que lo enmarca se ha dejado lisa sin ningún elemento decorativo para no hacerle la competencia. La interiorista Begoña Susaseta ha pintado en un color arena claro, paredes y techo y solo ha destacado en blanco las vigas de madera y las carpinterías. La ropa de cama combina rosa y gris, que añade un toque actual al conjunto. 

5.

Un dormitorio muy sereno, todo en blanco

Un dormitorio muy sereno, todo al blanco 00511634 O

Cabecero de La Maison. Banquetas y tronco de Alto Interiorismo.

El Mueble

La decoración de este dormitorio de montaña es sencilla y serena para dar protagonismo a las vistas. El blanco lo envuelve todo y solo rompen su hegemonía, el discreto cabecero de lino y las banquetas de roble a pie de cama. Es un proyecto de Alto Interorismo que ha apostado por un minimalismo sereno. La mesillas son una sencilla base en forma de tronco y las lámparas se han suspendido para diluir al máximo su presencia.  

6.

Un dormitorio estiloso con molduras y un cabecero que contrasta

 Un dormitorio estiloso con molduras y un cabecero que contrasta 00513110

Cabecero y taburete de Rue Vintage 74. Mesita de noche de Decolab.

El Mueble

En este dormitorio la pared vuelve a ser blanca, sí, pero se llena de estilo y aire más vestido gracias a las molduras que enmarcan, por un lado, el cabecero, y, por el otro, las mesillas. Son de Orac Decor, fáciles de instalar y de pintar, con lo que se han fundido en el mismo color de paredes y techo. El resto de decoración, obra de Decolab, apuesta por un aire clásico pero no aburrido. El cabecero, de terciopelo gris con relieve, llama la atención, y los auxiliares de madera ponen el necesario toque de calidez. 

7.

Cuando las vigas y las carpinterías son protagonistas

Dormitorio con cabecero de esparto y vigas azules. 00489198

Cabecero hecho a medida por Nice Home Barcelona. Banqueta de La Maison.

El Mueble

El azul de las vigas y las carpinterías tienen tanta fuerza en este dormitorio de pueblo que el resto de elementos ha apostado por el blanco y la calidez de fibras y maderas. Son blancos paredes y techos y la base de la ropa de cama. Y de fibras, el cabecero de esparto hecho a medida, pero también el banco a pie de cama y la alfombra trenzada. Es un proyecto de Dara Díaz, Nice Home Barcelona.