El verano ya ha llegado y es necesario cambiar el chip. Los bañadores y bikinis se convierten en nuestras prendas favoritas y les damos más uso que nunca. Por eso, es imprescindible aprender cómo lavar bañadores y bikinis para mantenerlos en buen estado toda la temporada de baño.
A pesar de que no lo parezcan, los bañadores son muy delicados debido a su composición, y elementos externos como el sol, el cloro o la sal afectan a la calidad del material. Por eso parece que se estropean mucho más rápido que otras prendas. Hoy te enseñamos cómo cuidar y lavar tus bañadores y bikinis para que luzcan como el primer día.
Cómo lavar el bañador y el bikini
Cómo quitar la arena del bañador
Al volver a casa, antes de lavar el bikini a mano o meter el bañador en lavadora, hay que eliminar los restos de arena poniendo las prendas en remojo durante unos minutos. Para ello, podremos utilizar una palangana con agua fría. Verás como se desenganchan todos los granitos de arena.
Lava siempre el bañador después de usarlo
Es preciso que enjuagues o laves con agua el bikini o el bañador después de cada uso. No es recomendable que vayas de la playa a la piscina, y de la piscina a casa, sin haberlo lavado en ningún momento. Después de cada uso, lava tu traje de baño con jabón neutro y agua templada. De esta manera quitarás la sal y el cloro.
¿Cuándo se lava el bañador en la lavadora?
No es necesario que metas tu traje de baño todos los días a la lavadora. Una vez por semana es más que suficiente, siempre y cuando lo hayas lavado después de cada uso con un poco de jabón neutro. Sin embargo, este lavado semanal en la lavadora es necesario porque elimina la suciedad mucho más a fondo.
Es importante que utilices una funda de algodón y un programa de lavado para prendas delicadas, igual que el detergente. El programa de lavado es mejor que sea corto.
Cómo limpiar las manchas de crema solar del bikini
A veces se nos ha ido la mano con la crema solar y hemos manchado el bañador o bikini. Para eliminar las manchas amarillas que deja la crema solar, añade detergente para prendas delicadas directamente sobre la mancha. Después de aplicar un poco de detergente, frota ligeramente hasta que la mancha haya quedado eliminada por completo.
También puedes empapar un paño o bayeta con vinagre blanco y frotar la mancha antes de lavar el bañador, siempre con jabón neutro y agua fría. Evita este tipo de manchas aclarando bien el bañador con agua después de cada uso y guárdalo solo cuando esté bien seco.
Cómo cuidar los bañadores
¿Te has parado a pensar que, en proporción a la cantidad de tela que te brindan, los bañadores son tus prendas más caras? Todos recordamos algún traje de baño precioso o espectacular que se nos rompió de tanto usarlo, castigado por el salitre, el cloro y el sol.
Asimismo, estos consejos alargarán la vida de tus bañadores y podrás usar tus favoritos durante muchos años más.
Cuidado con el sol y la ropa tendida
Además de enemigo de la juventud de tu piel, el astro rey hace estragos en tu ropa tendida, incluido tu traje de baño. El problema de exponerlo mucho al sol es que, después de un rato secándose, quedará acartonado y en unas pocas horas habrá envejecido mucho.
¿Lo mejor? Dejarlo secándose en la sombra y con el estampado hacia dentro. Además, evita ponerle pinzas, pues en este tipo de tejido es muy fácil que se queden las marcas. Eso sí: asegúrate de recoger el bañador cuando esté totalmente seco; de lo contrario, pueden aparecer malos olores y hongos.
No escurras el traje de baño
Si eres de las personas que escurre el traje de baño después de usarlo, lo estás haciendo mal. Con esta técnica haces que la tela pierda su forma y elasticidad. Para secarlo, lo mejor que puedes hacer es dejarlo envuelto entre dos toallas, para que estas absorben toda la humedad.
También puedes simplemente dejarlo secar sin escurrir, ya que esta prenda de baño está fabricada especialmente para que esté continuamente mojada. Ten paciencia y ya verás como se seca igual de rápido.
No planches el bañador o el bikini
El bañador no se plancha, ya que los materiales que lo forman no están preparados para soportar un calor tan fuerte, intenso y localizado. Así que quedas advertido o advertida: nunca planches tu traje de baño si no quieres quedarte sin él.
Protege tu traje de baño preferido
Cuanto menos uses tu traje de baño favorito, menos lo estropearás. Por ejemplo, a la hora de ir a un parque acuático, lo mejor es que no te pongas tu bikini preferido, pues estará todo el día expuesto al sol y al cloro.
Aquel bañador que sea 100% poliéster será el indicado para estas ocasiones, ya que el tejido tiene mayor resistencia que los de lycra.
Guarda bien el bikini para usarlo la próxima temporada
Presta también atención al guardar y doblar los bañadores. No lo hagas de cualquier manera. Primero, dale un lavado con un programa para prendas delicadas, déjalo secar al aire libre pero lejos del sol y guárdalo dentro de una bolsa de tela en una caja –a ser posible, en un entorno un poco húmedo–.
Intenta que no esté muy apretado y en contacto con otras prendas de ropa. Verás que de esta forma queda intacto para el año que viene.
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