Los gatos son curiosos por naturaleza, y al igual que a los humanos, también les encanta comer. Sin embargo, se ha comprobado que hay ciertos alimentos que, más allá de resultarles deliciosos o atractivos a nivel visual, pueden provocarles reacciones de lo más inusuales. Concretamente, pueden hacer que se exciten, que maúllen con una intensidad frenética, e incluso que se vuelvan más activos y juguetones. Alucinante, ¿verdad? Pues a continuación descubrirás cuáles son estos alimentos y si son seguros o no para tu mascota.

Comida húmeda

La comida húmeda es una auténtica fuente de adicción para cualquier gato. La intensidad de su olor, la suavidad de su textura... Es un hecho, todos los felinos se vuelven locos de alegría ante su presencia, y rara vez tardan más de cinco minutos en devorarla. Por suerte, las latas de comida húmeda son saludables para ellos, así como una excelente fuente de hidratación, especialmente para gatos que no beben suficiente agua. No obstante, es fundamental elegir marcas de confianza para asegurarse de su calidad.

Atún

Seguro que cada vez que abres una lata de atún, tu gato llega a la cocina en un santiamén, y es que se trata de otro alimento que vuelve locos a los felinos y que hace que comiencen a maullar con fuerza. En cualquier caso, y aunque el atún puede ser un delicioso premio ocasional, no debe convertirse jamás en la base de su dieta, ya que provocaría deficiencias nutricionales en el animal, como la falta de vitamina E y el hierro que tanto necesitan, entre otros.

Catnip

El catnip es famoso por su efecto estimulante en los gatos. La nepetalactona –el compuesto activo del catnip–, actúa sobre los receptores olfativos de los felinos, induciéndoles un estado de euforia. Los gatos expuestos al catnip, por lo general, se excitan repentinamente, comienzan a jugar, se vuelven muy activos... No solo eso, también pueden maullar y babear intensamente. Este peculiar comportamiento es inofensivo y suele durar entre 10 y 15 minutos.

Tomillo y valeriana

Además de la hierba gatera, hay otras hierbas como el tomillo y la valeriana que pueden causar reacciones eufóricas en los gatos. La valeriana, en particular, puede tener un efecto calmante similar al de la hierba gatera, aunque no todos los gatos responden de la misma manera a ella.

Leche

Aunque algunas personas creen que los gatos pueden beber leche y, de hecho, en los pueblos siempre ha sido una costumbre popular, lo cierto es que muchos de los felinos son intolerantes a la lactosa. Esto significa que, a pesar de que el olor de la leche es muy atractivo para ellos, si la consumen podrían sufrir malestar estomacal, además de diarrea y otros problemas digestivos. 

Aceitunas

Algunos gatos muestran un interés inusualmente alto por las aceitunas, el clásico aperitivo que nunca falta en el vermut dominguero. Pero, ¿a qué se debe esta atracción? Pues bien, parece ser que las aceitunas contienen compuestos que pueden tener un efecto similar al de la hierba gatera. Para tu tranquilidad, debes saber que las aceitunas no son tóxicas ni dañinas para estos pequeños felinos, aunque hay que tener mucho cuidado con los huesos. 

Antes de terminar el artículo, queremos recordarte que, aunque estos alimentos pueden ser irresistibles para muchos gatos, deben ofrecerse con moderación, y en lo que respecta a la leche, asegurarse antes de dársela de que el animal no es intolerante a la lactosa. De cualquier modo, ante la duda, lo mejor que puedes hacer es consultar con tu veterinario de confianza.