María quería un pequeño despacho en su salón, pero no sabía cómo conseguirlo. Ahora tiene el rincón deseado y, a la vez, un salón más actual y luminoso. Lo más importante para María era ganar espacio en su salón para un despacho. “Me gustaría terminar trabajo en casa, cerca de mis hijos, pero no tengo dónde hacerlo”. Le propusimos prescindir del comedor, ya que apenas se utilizaba, y colocar en su lugar un escritorio. “¡Ha quedado perfecto! Como si siempre hubiera estado ahí”.
En cuanto a la zona de estar, sustituimos los sofás por otros más mullidos de Ikea, y por una confortable butaca de Amadeus, engamada con el resto del ambiente. También cambiamos las cortinas por unas de lino de Güell-Lamadrid, confeccionadas por Alfil. Las nuevas lámparas y alfombras blancas de Ikea terminaron de transformar el salón de María.
"Es fantástico”. Así define María el cambio logrado gracias a los nuevos sofás, lámparas y alfombras de Ikea, y la butaca de Amadeus. Las cortinas de lino confeccionadas por Alfil con tela de Güell-Lamadrid han vestido más las ventanas.
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