Móntate la oficina en casa: escritorios, reposapiés y soportes de teclado

Este escritorio es perfecto para integrarlo en el salón, porque resulta decorativo por sí solo. De madera, cuenta con dos cajones y un par de huecos para los papeles. Aquí, además, se ha reconvertido un mueble bajo en apoyo extra del despacho, para guardar documentos y tener los archivadores a mano. Similar al Nalu de Kave Home (349 €). 

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Se llama Hiba y es una composición de La Redoute muy práctica para habilitar un completo despacho en casa. De roble y metal, aúna 2 muebles en uno: por un lado el escritorio y, por el otro, la librería para tener desde los papeles hasta los periféricos a mano. El escritorio mide 130 x 70 x 75 cm y la estantería 30 x 70 x 145 cm. El conjunto tiene un precio de 440 €. 

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¿Tienes que teletrabajar en casa y no sabes dónde meter tu mini zona de despacho? Inspírate en esta idea, en la que una estantería en escalera con tres cajones se ha reconvertido en un pequeño escritorio para salir del paso. Al ser muy estrecha se adapta a cualquier rincón. Es el modelo Mobela de Kave Home y vale 379 €.  

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El escritorio Brixton de La Redoute aúna una estética muy cuidada, que recuerda a una consola, con la funcionalidad que se le pide a una superficie de trabajo. Cuando no se usa, la superficie queda totalmente despejada gracias a su cajón para tener a mano el material de oficina, y una compuerta para guardar el portátil. Además, cuenta en la parte trasera con un práctico pasacables oculto. Mide 110 x 48 x 78 cm y en acabado roble tiene un precio de 499 €. 

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Este escritorio antiguo tipo notario es muy práctico para montar un rincón de trabajo en casa, porque aún siendo ligero, cuenta con 5 cajones que se convierten en un gran aliado del orden, algo indispensable cuando la zona de trabajo está integrada en otra estancia, como aquí el salón. Se trata de una pieza antigua que se restauró y pintó en blanco, para actualizarla. Es similar al escritorio Confection de Maisons du Monde que vale 299 €.  

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¿No tienes mucho espacio en casa? Con este escritorio abatible podrás contar con una zona de trabajo de quita y pon. Se llama Gaston y es una propuesta práctica y muy chic de Hartô. En acabado roble, gris pizarra y verde agua, cuenta con un sobre abatible, dos cajones pequeños y uno más grande. Mide 80 x 37 X 72 cm y cuesta 796 € en Smallable.com

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Querer es poder. Y el hueco debajo de la escalera es un espacio tan bueno como cualquier otro para habilitar una zona de trabajo. Elige un escritorio de poco fondo –con 45 cm puedes trabajar con comodidad– para que resulte más ligero. Aquí se ha optado por un diseño de madera con sabor rústico. Es similar al modelo Hallen de Miliboo, que cuesta 429,99 €. 

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Este soporte para portátiles de Ocday ofrece una altura de visión cómoda y contribuye a mantener la columna vertebral en una posición cómoda. La parte inferior, al quedar libre, es muy útil para guardar el teclado y despejar el área de trabajo rápidamente. Confeccionado con una aleación de aluminio de alta calidad, está indicado para ordenadores de entre 11 y 17". Su precio es de 27,99 € en Amazon.

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Es el modelo Thinh de Kave Home y destaca por su diseño de inspiración industrial, con su estructura de madera de acacia maciza en acabado natural blanqueado y pies y detalles de metal pintado envejecido. Sus dos cajones son muy prácticos para tener lo más pequeño en orden. Sus medidas son 125 x 60 x 77 cm y cuesta 529 €.

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El escritorio Fylo de El Corte Inglés puede servir de consola, gracias a su poco fondo de 36 cm, y de escritorio, ya que cuenta con una práctica bandeja extraíble para el teclado. Además, se completa con un par de cajones para guardar. Mide 100 cm de ancho y, lacado en blanco, tiene un precio de 199 €. 

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El escritorio Klaus de Made.com dará un toque de estilo a cualquier estancia de la casa. Su estructura de metal negro se combina con un original sobre de hormigón y una cajonera de madera tintada. Sus medidas son 140 x 65 x 75 cm y vale 549 €.

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Se llama Naturaliste y es una propuesta tan práctica como decorativa para ganar un completo despacho en casa. Inspirado en los antiguos muebles de oficio, este escritorio realizado en madera de mango macizo cuenta con dos hileras de cajones a ambos lados y nichos y compartimentos para guardar. Además, integra un tablero inferior extraíble, muy práctico para el teclado del ordenador. Mide 150 x 75 x 116 cm y cuesta 999 €. 

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El escritorio Opus de Miliboo destaca por su diseño atemporal que se inspira en el diseño danés de los años 50. Combina un acabado de madera natural y pintada en blanco con unas patas en fresno macizo. Además de su amplia superficie de trabajo (140 x 38 cm), cuenta con cuatro hornacinas y dos cajones para guardar y un práctico pasacables. Cuesta 379,99€. 

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El reposapiés SoleMate de Kensington eleva las piernas para mejorar la postura y la circulación, reduciendo la presión lumbar. Tiene diferentes posiciones, siendo la inclinación máxima de 20 grados. Su panel de sujeción texturado evita el deslizamiento. Sus medidas son de 45 cm x 35 cm y cuesta 35,79 € en Amazon. 

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El escritorio Moneta2 de Conforama ofrece una cómoda superficie de trabajo y abundante espacio para guardar desde documentos hasta el portátil si quieres dejar la superficie en orden. Mide 110 x 60 x 74 cm y tiene un precio de 129 €. 
 
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Este escritorio es tan minimalista como práctico: al ser volado, ocupa poquísimo y se ve muy ligero. Y, además, se ha equipado con dos cajones para tener los utensilios de oficina en orden y así mantener despejada la mesa cuando no se está trabajando. 

La alfombrilla refrigeradora Chill Mat de Targus es perfecta como soporte del ordenador en la mesa o incluso para colocarlo sobre el regazo, proporcionando una superficie cómoda y ergonómica para mantener la refrigeración del portátil. Es indicado para portátiles de hasta 17". Cuesta 29,90 € en El Corte Inglés.

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Para dibujar, hacer manualidades y escribir sus primeras palabras, este pequeño escritorio es ideal. Y es que, para sus primeros años de cole, no es necesario contar con un gran escritorio. Aquí, la decoradora Begoña Susaeta ha aprovechado el espacio junto a la ventana, con un sobre azul que integra un par de cajones para tener en orden sus utensilios de escritorio. 

¿No tienes una mesa donde teletrabajar? Transforma un mueble que tengas por casa en un escritorio improvisado. Una consola, por ejemplo, puede valerte. Y, si te queda demasiado alta, siempre puedes completar la silla con unos cojines. Además, si tiene cajones, como esta, podrás guardar el material de oficina tras la jornada laboral. 

El equipo de Dröm Living aprovechó la galería del dormitorio, que disfruta de mucha luz natural y tranquilidad, para habilitar una zona de despacho pequeña pero muy completa. Con un escritorio con poco fondo y en blanco, que apenas ocupa espacio, una cajonera y una zona de baldas. 

Este secreter es super práctico, sobre todo si debes teletrabajar en casa y no cuentas con despacho. Con el sobre abatible se convierte en completo escritorio con solo bajar la tapa. Además, para que todo esté en orden, cuenta con pequeños cajones para el material de oficina y tres huecos para papeles y demás. Y si lo necesitas, puedes reconvertir la cajonera en archivador. ¿Y lo mejor? Todo, en una sola pieza, que recogida es un mueble más del salón. 

Este escritorio volado está pensado para aprovechar una zona de paso, de ahí que el lateral sea en diagonal, que ocupa menos espacio. Cuenta con dos cajones y una pequeña repisa. 

¿Su habitación es pequeña? Alíate con los muebles a medida y convierte cada cm en espacio útil. Aquí, la decoradora Cristina Pérez ha planificado una cama a medida, lo que le ha permitido integrar en el mismo espacio una cama extra y cajones, y ha prolongado el cabecero a modo de cómodo escritorio, completado con una cajonera y baldas. ¡Todo, en el mínimo espacio! 

Aprovechar un espacio muerto del salón con un escritorio pequeño es una solución perfecta para habilitar una zona de despacho en casa. Lo ideal es que esté en una zona alejada del tránsito y, a poder ser, lejos de la tele, para tener menos distracciones. Aquí, el escritorio se ha completado con unas baldas a medida que salvan la columna. 

A falta de metros, ¡un exceso de ingenio! En esta habitación infantil se ha ganado una mini zona de escritorio sin renunciar a dos camas. La clave ha sido planificar una cama alta y se ha aprovechado el espacio debajo con otra en perpendicular, lo que ha liberado un espacio para una mesa de escritorio pequeña.