Antes y después: 11 muebles restaurados (y con estilo) que te dejarán con la boca abierta

"El espejo estaba pintado de dorado, con tallados y texturas. La clienta quería aclararlo y eliminar el dorado", aclara Carolina y Pilar. Y el resultado ha sido...

¡Un espejo con mucho más encanto! "Pulimos toda la superficie con lija para fijar la pintura. Elegimos esmalte al agua y un color blanco antiguo. Para finalizar, "decapamos con la ayuda de una lija más fina las molduras para realzarlas y que destaquen". De esta forma, se consigue potenciar las zonas del espejo "donde se desgastaría normalmente", afirman Carolina y Pilar de Vade Retro.

Esta mesilla de noche cuenta con una amplia gama de posibilidades. Por eso, Carolina y Pilar se pusieron manos a la obra y decidieron darle una nueva vida a esta mesilla tan coqueta. "La mesilla estaba barnizada, las bisagras sin brillo, y las patas pintadas de blanco. En algunas partes, la madera estaba rota".

El conjunto de mesillas de noche que encontraron Caro y Pilar, no tienen nada que ver con estas nuevas mesillas. Unas piezas renovadas, con mucha más presencia y listas para dar luz y calidez a cualquier dormitorio. "Al lijar las mesillas, para eliminar todo el barniz, la madera quedaba muy manchada y había que completar varias partes con masilla. Por eso, decidimos pintar algunas partes de blanco con esmalte al agua y otras, dejarlas con madera lavada. Las zona de la madera las hemos intentado proteger con laca al agua cristal satinada". Para mantener la esencia de las mesillas, las chicas de Vade Retro quisieron dejar "los tiradores originales".

Caro y Pilar se encontraron con estas sillas de capitoné tapizadas en crema y dorado, y quisieron darle un toque mucho más divertido. ¡Alucinarás por completo cuando veas cómo han quedado estas sillas!

"Pintamos con esmalte al agua y decapamos sutilmente para resaltar los tallados originales. Volvimos a tapizar las sillas con un tejido de pana en un azul turquesa". Para terminar, Caro y Pilar volvieron a realizar todo el relleno de las sillas. ¡Y así de espectacular han quedado las nuevas sillas de capitoné!

Durante el proceso de restauración, "se eliminó por completo el tapizado y el relleno. Utilizamos un removedor en gel para sacar la pintura. Pulimos con lijas gruesas y finalizamos con una lija mucho más fina".

A esta cómoda tan oscura le faltaba un cambio ya que estaba muy desgastada. ¿Quieres saber cómo han conseguido recuperar la cómoda las chicas de Vade Retro?

¡Y así ha sido el cambio! Han conseguido que esta cómoda vuelva a deslumbrar. "Lijamos generando mordiente para la pintura. Luego, pintamos la cómoda con un color blanco antiguo, y usamos esmalte al agua". Para terminar la restauración de este mueble, "decapamos con una lija muy fina".

Este pequeño taburete tenía un significado muy especial para una de las clientas de Carolina y Pilar. Se trataba de un taburete que había hecho el abuelo de una de sus clientas hace muchos años. Sin embargo, el taburete, debido al paso del tiempo, ya se encontraba en mal estado, pero la clienta no quería deshacerse de este taburete con tanta historia. ¿Cómo crees que ha sido el cambio?

¡Qué cambio! Las chicas de Vade Retro lo tenían muy claro: "decidimos conservar su esencia, dejando los clavos originales, los machaques del tiempo, rayones, etc…". Para hacer la restauración, Caro y Pilar se centraron en el cambio de color. "Pintamos con esmalte al agua de color amarillo, y terminamos decapando los bordes sutilmente".

Esta mesilla de noche estaba muy estropeada. Además, el color tan oscuro de la madera, al estar barnizada no le favorecía nada. Tampoco "tenía nada de tiradores". Y cuando veas el resultado que han conseguido Carolina y Pilar, ¡te quedarás con la boca abierta!

Esta mesilla seguro que la podrías encontrar en cualquiera de nuestras casas de El Mueble. Para restaurar y conseguir esta mesilla tan coqueta, "eliminamos el barniz aplicando removedor en gel y retirándolo con espátulas y una viruta mediana. Lijamos con grano grueso y fino", comentan Caro y Pilar. Para finalizar, "limpiamos la superficie con un trapo húmedo y un poco de detergente. También intentamos proteger la superficie con una laca al agua".

"Esta estantería estaba barnizada en color caramelo, y muchas partes de hierro contaban con óxido", aclaran Caro y Pilar.

"Pulimos con una lija mediana todas las partes de hierro negro que estaban oxidadas. Posteriormente, limpiamos y pintamos con esmalte sintético negro con antióxido". De esta forma, se previene que el óxido no se vuelva a impregnar en el metal. Para finalizar la restauración de la estantería, Carolina y Pilar lijaron las tablas y los cubos pertenecientes a la estantería "hasta llegar a eliminar por completo el barniz antiguo". Después, para darle un toque mucho más industrial pintaron "el interior de los cubos con esmalte al agua en negro", y lo que era madera lavada, lo protegieron "con laca al agua satinada".

Este aparador también era del abuelo de una clienta de Carolina y Pilar. "Estaba muy desmejorado, y muchas partes contaban con pequeños intentos de reciclado casero". ¡Y así es cómo consiguieron que este aparador recuperara su encanto!

"Lijamos la tapa y los cajones hasta llegar a la madera natural. Pulimos toda la estructura del mueble porque iba a ser pintado. Cambiamos también los fondos de los cajones, y los reemplazamos por unos nuevos". Para terminar el nuevo mueble y darle más alegría, "pintamos con esmalte al agua en un tono verde menta, y protegimos la madera lavada con laca al agua". Tampoco faltaron "los tiradores de madera" pintados en el mismo color del resto del mueble.

"Esta cajonera Luis XV estaba impecable, pero con mucho barniz y demasiado oscuro. Los tiradores casi ni se veían", comentan Carolina y Pilar.

¡Y vaya que ha merecido la pena la restauración! Pero, ¿cómo lo han hecho posible? Pues primero han comenzado a "retirar todo el barniz". "Utilizamos un removedor en gel, retirándolo con viruta y espátulas. Lijamos con una lija mediana y fina". Para terminar el proceso de restauración, "protegimos con laca al agua satinada, y añadimos los tiradores originales". 

"Esta mesilla de noche estaba barnizada de un color caramelo, y la tapa estaba muy estropeada. Los cantos estaban rotos, e incluso le faltaban partes de madera".

"Decidimos rescatar todo lo que se podía de la madera. Para eso, utilizamos una lija gruesa, número 80; y para finalizar, una lija fina número 220. Las patas y los cantos, decidimos pintarlas de blanco". Para terminar esta mesilla de noche que ha dado prácticamente nueva, Carolina y Pilar decidieron proteger "la madera lavada con laca al agua".

"Esta cómoda provenzal estaba pintada con pintura sintética blanca", afirman Carolina y Pilar. Pero eso no fue ningún impedimento para que convirtieran la cómoda en una pieza de un estilo totalmente diferente.

"Pulimos la superficie con lija número 80, y luego con lija fina 220. Luego pintamos con esmalte al agua en un color menta y decapamos los bordes de forma sutil con otra lija fina", comentan Carolina y Pilar.

"Somos Pilar y Carolina, creadoras de Vade Retro. Las dos somos profesionales, una odontóloga y la otra Artista Plástica. Somos de Rafaela, provincia de Santa Fe, Argentina. En Vade Retro reciclamos todo tipo de muebles por encargo, además de comercializar muebles que compramos y reciclamos nosotras. Encontramos en un hobbie, una fuente de trabajo, y eso es porque lo hacemos con pasión".