Pisos pequeños: un dúplex de apenas 70 m2 en dos plantas muy bien aprovechadas (con vídeo del ANTES y plano)

En este vídeo te enseñamos el antes y después del cambio de este pequeño dúplex. No te pierdas todas las fotos a continuación, con todas las ideas y el plano.

"Este es un dúplex de obra nueva", nos explica la interiorista Paula Duarte, "y, aunque es una vivienda a estrenar, y eso siempre gusta, los acabados resultaban fríos. Por eso, más que una reforma, lo que los propietarios deseaban era hacerlo más cómodo". 

¿Cómo lo hicieron? "Lo primero, y uno de los cambios más importantes, fue abrir la cocina, algo que marcó la distribución. A su lado, organizamos la zona de día según las actividades de la familia: para empezar, el estar con un sofá y una chaise longue", explica Paula. 

"Luego, en el comedor nos pidieron un espacio cálido para hacer cosas en familia, como jugar a las cartas, tomar café o incluso estar y cenar con los amigos, por eso diseñamos un banco de cuadros Vichy para darle un ambiente de 'bistró' francés", comenta la interiorista. 

¿Y la cocina? Los muebles eran sencillos y el espacio era realmente pequeño. "La abrimos al salón, sin tabiques, y la distribuimos aprovechando toda la planta en forma de U, con cajones inferiores y armarios altos que llegan hasta el techo", continúa. 

Uno de los frentes está completamente aprovechado con almacenaje. El color blanco refleja la luz y la cocina parece más grande.

"Para crear una zona de office ideamos una barra que en realidad es una mesa alta con cuatro taburetes”, dice Paula. Los propietarios, por cierto, tenían un ‘capricho’: “Nos pidieron una pequeña vinoteca. Hicimos un aparador a medida, con dos armarios vinotecas y una zona de almacenaje junto a la barra, que sirve para desayunos y comidas o cenas informales”

En la cocina, manda una estética campestre, pero limpia. Para potenciar esta primera característica, se colocó un fregadero tipo farmhouse de porcelana. Para la segunda, se 'abusó' del blanco en armarios, azulejos y complementos. 

El rellano está aprovechado como espacio de juego, con muebles con cajones para que los niños tengan donde guardar.

“El dormitorio principal era muy estrecho y largo. Diseñé un cabecero de obra, para poder adelantar un poquito la zona de la cama y que hubiera espacio para una cama de matrimonio, o dos individuales. Para la pared, elegimos este papel pintado, que es maravilloso y es el protagonista real del dormitorio”, afirma la interiorista. 

Nos ha encantado este dúplex. Sin duda, ¡volveremos!

Este dúplex está repartido en dos plantas. La baja tiene 40 metros útiles, con salida al jardín. Para hacer una zona de día amplia, decidieron abrir la cocina.

El apartamento tiene 30 metros útiles. Incluye dos dormitorios y un pequeño distribuidor que se ha aprovechado como sala de juegos para los niños.