Las sobras de comida son muy comunes en todos los hogares, están presentes en nuestras vidas un día sí, y al siguiente también. Y es que, a veces, cocinamos más de lo necesario por error o porque queremos asegurarnos de tener suficiente comida para todos, y, al final, resulta que nos hemos pasado con las cantidades y termina sobrando. Incluso, otras veces, estas “sobras de comida” las hacemos a conciencia, es decir, cocinamos más de la cuenta para dividirlo en porciones y tener, de esta forma, varias comidas listas para toda la semana. 

Guardar las sobras de la comida tiene numerosos beneficios, más allá de que, algunas de estas sobras, como por ejemplo el trozo de pizza sobrante de la noche anterior, están más deliciosas al día siguiente. Por ejemplo, al guardar y consumir las sobras, reducimos el desperdicio de alimentos que tiramos a la basura, lo cual es positivo tanto para el medio ambiente como para nuestro bolsillo, gastamos menos dinero en la compra de nuevos ingredientes. Por supuesto, también ahorramos tiempo y esfuerzos cocinando, bastaría con coger un tupper con sobras, calentarlo y ¡comida lista en cuestión de escasos minutos! Pero, eso sí, por seguridad alimentaria, es muy importante saber cómo y cuándo debemos guardar esas sobras, ¿calientes o frías? Te lo desvelamos en las próximas líneas.

NO, NO ES GUARDARLAS EN UN TUPPER Y YA ESTÁ

Asegurar la seguridad alimentaria es vital, gran parte de las intoxicaciones alimentarias ocurren en los hogares, y, aunque el verano sea la época más delicada por el calor, ningún mes del año está exento de riesgos. Y no, no basta con meter las sobras de comida en un tupper o tapar el plato con papel de aluminio y dejarlos en la encimera de la cocina hasta el día siguiente, estas no son las formas idóneas de conservar estas sobras para su posterior consumo.

Las sobras se deben guardar en la nevera, aunque tampoco debes meterlas calientes directamente, esto podría crear un microclima de condensación muy apetecible para las bacterias, incluso, podría elevar la temperatura interna del frigorífico, lo que podría afectar al resto de alimentos que guardes en su interior y estropearlos. Lo recomendable es aplicar la regla de las dos horas, es decir, lo ideal sería guardar las sobras en la nevera dentro de las dos horas posteriores a su preparación e intentar no pasarnos de ese tiempo.

En qué momento debemos guardar las sobras de la comida en la nevera

En qué momento debemos guardar las sobras de la comida en la nevera

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CONSEJOS PARA ENFRIAR LA COMIDA RÁPIDAMENTE

Para no estar pendiente del reloj calculando el tiempo que le queda a la comida para enfriarse y no pasarnos de esas dos horas, existen varios trucos para enfriar la comida rápidamente y dejarlas a la temperatura idónea para refrigerarlas. Por ejemplo, una vez la termines de cocinar, apaga el fuego, retira la tapa y vierte el contenido a recipientes de vidrio grueso con tapa hermética y deja que se enfríen. Si la comida está muy caliente, puedes dividirla en porciones más pequeñas para que se enfríen más rápido.

Enfriar rápidamente las sobras antes de meterlas en la nevera se hace aún más importante cuando estas son líquidas, como sopas o guisos. En este caso, un consejo ingenioso es colocar la olla o el recipiente donde la hayas cocinado en un baño de hielo. En definitiva, el enfriamiento rápido es esencial para prevenir el crecimiento de bacterias dañinas para nuestro organismo.

EL ÚLTIMO PASO, LA CONGELACIÓN

Si tienes pensado comerte estas sobras de comida más allá de un par de días, la congelación es tu mejor opción para prolongar su congelación de manera segura para tu salud. Pero antes de lanzarte a abrir la puerta del congelador, así sin más, también debes asegurarte de que estas sobras se hayan enfriado por completo en la nevera. Congelar alimentos calientes no solo puede afectar a la vida útil de tu congelador, sino que también puede afectar a la calidad de la comida.

En resumen, guardar las sobras de comida no solo es beneficioso para el bolsillo, sino que también reduce el desperdicio de alimentos, ahorra tiempo y ofrece opciones convenientes y saludables para futuras comidas. Eso sí, como te acabamos de comentar, es importante almacenar y consumir las sobras de manera adecuada para mantener la seguridad alimentaria.