17 ideas originales para decorar con libros más allá de la estantería

Los libros se han convertido en auténticos objetos de culto y hay ejemplares tan bonitos y decorativos que bien merecen quedar a la vista. Por eso, es muy habitual ver grandes tomos de moda, interiorismo, arquitectura o artes gráficas, entre otros, decorando las mesitas de centro de los salones más elegantes. Deben colocarse de manera ordenada y simétrica, pudiendo apilar los ejemplares de menor volumen. Queda extremadamente elegante al mismo tiempo que seguro va a inspirar a más de uno de tus invitados. Todo es cuestión de elegir los libros que van más acorde con el estilo el resto de objetos deco de la estancia.

Los huecos y las paredes de la escalera son las grandes olvidadas de la casa. Por eso, si tienes una con anchura suficiente y está desaprovechada, puedes utilizar la pared interior para instalar una librería a medida con muchísima capacidad. La que vemos en esta imagen está lacada en beige y tiene los peldaños de madera, y ha sido reformada por la arquitecta Clara de Castro. ¡Qué idea tan práctica!

Es habitual que los frentes donde se coloca el sofá se decoren con cuadros o espejos. Sin embargo, puede haber otras alternativas sencillas e igualmente decorativas. Elige una librería moderna, ligera, con capacidad para muchos libros y con un diseño de líneas rectas. ¡Verás qué rápido cambia el aspecto de tu salón! Lo vemos en esta reforma que ha hecho el equipo de Egue y Seta.

Cualquier espacio es bueno para guardar tus libros preferidos. Y si no, inspírate en esta idea: se ha aprovechado el hueco libre entre la puerta y el techo para habilitar una hornacina muy capaz, que hace de nexo de unión entre las dos librerías de los laterales.

¿Hay algo más placentero para los amantes de la lectura que leer un rato antes de acostarse? Muchas veces, una sola mesilla no tiene capacidad para albergar todas nuestras lecturas, así que una idea genial es utilizar los huecos donde normalmente pondríamos las mesillas para levantar una librería a medida que enmarque el cabecero de la cama. Es una manera genial de aprovechar el espacio y tener nuestros libros a mano. ¡Pero hay muchas más opciones! Sigue mirando las imágenes que ponemos a continuación.

Como objetos de culto que son algunos ejemplares, qué menos que exhibirlos en casa con orgullo de coleccionista. Con unas sencillas baldas sobre un frente vacío, ya sea en el recibidor o en el salón, te quedará un rincón súper artístico y sofisticado. Elige las baldas del mismo color que la pared para que recaiga todo el protagonismo en los libros.  ¡Nadie se resistirá a pararse frente a ellos y echar un vistazo!

¿Quieres que tu escalera sea tan decorativa como práctica? Aquí tienes un ejemplo que no dejará indiferente a nadie. Se trata de una estantería escalonada de madera, diseñada por la interiorista Beatriz Wolf. Sus peldaños son perfectos para subir al altillo y sus huecos mantienen libros y documentos ordenados.

Poner el techo como límite cuando el espacio no da para más es la premisa a la que se aferran muchos amantes del papel que acumulan cantidades ingentes de libros y revistas. Una opción decorativa y desenfada, aunque nada funcional, es apilarlos en vertical en un rincón de la casa o haciendo montoncitos en el suelo sobre una pared vacía. Sin embargo, en el universo deco, existen otras opciones mucho más prácticas que emulan esta forma de organizar los libros. Son las estanterías verticales, que cuentan con pequeñas baldas que permiten hacer composiciones muy curiosas con libros que parecen flotar en el aire.

Las librerías bajas nos encantan porque permiten aprovechar huecos difíciles, como por ejemplo, bajo las ventanas. Esta librería en forma de L diseñada a medida se adaptó a la estructura de la habitación para ganar más almacenaje, y para acompañarla y crear un rincón de lectura de lo más completo, Pia Capdevila colocó una preciosa butaca con su lámpara de pie a juego a modo de rincón de lectura.

¿Otra opción que no precisa de obra? Coloca un banco de proporciones generosas debajo de la ventana y pon los libros apilados en montones encima y debajo de él.

Colocar un banco con personalidad, como este en madera cepillada con aspecto vintage, es una buena fórmula para dar vida a un rincón sin gracia. Este modelo dispone de una repisa inferior para colocar de forma ordenada libros y revistas. Su longitud, además, permite colocar encima un espejo que amplifica el espacio y resulta una idea perfecta para un recibidor pequeño.

El recibidor es la carta de presentación de las personas que habitan la casa. Si sois grandes lectores, nunca estará de más colocar algunos libros en el aparador de la entrada. Junto a otros objetos como jarrones, figuras o espejos, ayudarán a crear rincones muy especiales. 

El final de este pasillo guarda una pequeña sorpresa. Se ha colocado una pequeña butaca que se puede utilizar como descalzadora o, si te fijas bien, se puede convertir en un recogido y agradable rincón de lectura gracias a la estantería llena de libros que se ha integrado antes de llegar a las escaleras, para aprovechar al máximo el espacio y tenerlo decorado sin necesidad de muchos más elementos. 

La decoradora Cristina Pérez aprovechó el espacio de este dormitorio con un gran cabecero multifunción. Es de obra e integra dos hornacinas que se han protegido un cristal, y una gran librería, perfecta para tener en orden y a mano desde libros hasta objetos decorativos. En blanco, resulta ligera a pesar de su gran volumen. 

Aparte de la originalidad de crear camuflar una cama plegable en una librería, destacamos en esta imagen una tendencia que estamos viendo en todas las redes sociales bajo el hashtag de backwards books. La idea es tan sencilla como colocar los libros en tus estanterías dados la vuelta, dejando la parte del lomo escondida y las páginas a la vista. De esta manera, se crea una sensación de uniformidad y neutralidad en la librería que, no será práctico, pero sí muy decorativo si se quiere reducir el ruido visual en el ambiente.

Si te gusta el estilo romántico y quieres darle a tu salón comedor un aspecto confortable y acogedor, esta librería, adquirida en Berenis Antigüedades, es tu mejor elección. Gracias a sus puertas acristaladas puedes ver todo su interior, resguardando a los libros del polvo.

El saber no ocupa lugar... tampoco en el baño. Guardar los libros en esta zona íntima de la casa no es habitual, pero nos parece una opción excelente cuando es tan decorativo y práctico como la solución que nos ofrece esta casa.  Sus propietarios aprovecharon la bañera exenta para "forrarla" con una estructura que integra baldas para tener a mano los libros mientras tomas un baño.