Así es la mini casa de apenas 22 m2 diseñada por la elegante modelo y diseñadora francesa Ines de la Fressange

Ines de la Fressange materializó la imaginación y el sueño que tenía en la mente y el resultado fue una mágica cabaña donde esconderse, relajarse y encontrar de nuevo su alma infantil. Contó con la ayuda de Mobalpa, que trabaja bajo la premisa de crear espacios con líneas depuradas, materiales innovadores y con soluciones de distribución para nuevos usos, convirtiendo cada proyecto en un diseño personalizado hasta en el más mínimo detalle, sin perder de vista las tendencias y alejándose de lo convencional.

Ya en el exterior se aprecia el estilo de la musa francesa. La mini casa se caracteriza por sus escaleras de madera, paredes blancas y detalles de color, como la puerta verde, que combina con la naturaleza que hay alrededor. "Al escuchar la palabra 'cabaña', siempre me vienen a la mente cosas alegres, de la infancia. Sé que, aunque soy una adulta que ha aprendido mucho y ha evolucionado, mi infancia sigue siendo decisiva y alimenta mi trabajo. Puede que esta cabaña sea un sueño infantil", revela Ines.

Nada más entrar en esta coqueta mini casa nos encontramos con unas escaleras de madera que llevan al dormitorio y otra al lado de metal negro para llegar a los espacios de almacenaje superiores. Todo se ve bien puesto y ordenado porque, es imposible que una casa se vea bonita sin que esté todo en orden.

La gran librería que enmarca la puerta de entrada está diseñada a medida y se adapta al desnivel con numerosos estantes que albergan los objetos decorativos traídos de todos lados por Inès. Crear una entrada "de verdad" en una casa tan pequeña ha supuesto todo un reto superado con acierto.

En la entrada de esta mini casa también puedes encontrar, por ejemplo, un banco estratégicamente situado permite descalzarse nada más acceder a la cabaña. Y los estantes para dejar los complementos.

La escalera hace las veces de zona de almacenaje con acceso por ambos lados a unos nichos a medida de los peldaños. Por el lado del escritorio, los nichos guardan libros y carpetas. Por el lado de la entrada, sirven para dejar el calzado. La optimización en su máximo esplendor, aprovechando cada rincón.

Basta con subir los pocos escalones unidos al escritorio para llegar a la zona de descanso. ¡Aquí la palabra cabaña cobra todo su sentido! Al correr la cortina, se descubre un pequeño dormitorio con una cama en el suelo y algunos nichos altos de almacenaje. El cabecero lleva integrado un proyector de vídeo pensado para tumbarse y disfrutar. Mullido y acogedor, este espacio invita literalmente al descanso

Bajo el espacio de almacenaje alto, hay unos escalones que bajan hacia un pequeño vestidor donde guardar la ropa y los accesorios, enmarcado de forma original por una ventana que permite la entrada de luz natural durante el día. Los perfiles LED de las estanterías ayudan a iluminarla discretamente al caer la noche. Unos arcones deslizantes grandes, un ropero, estanterías nicho con crucetas de madera, baldas y un bufé de estilo campestre acristalado expone los accesorios con mucho estilo. Un pequeño espacio estudiado para optimizar la organización del vestidor al máximo.

A la derecha del vestidor se encuentra un rincón con un espacio de aseo personal con una encimera diseñada a medida para adaptarla a los tabiques. El color de la madera hace destacar la pieza de lavabo y el elegante grifo monomando de pared en color negro. Bajo el lavabo, se ha diseñado una estantería de madera y metal para los accesorios de mayor uso, y en la pared de la derecha se ha instalado un mural de madera en el que colgar joyas y accesorios.

Toda idea es poca para aprovechar el espacio cuando se decora una mini casa como esta. Así, se ha incluido una zona de almacenaje situada frente a la puerta de entrada y en alto. Los estantes, útiles al mismo tiempo que decorativos, se diseñaron a medida para optimizar al máximo el espacio disponible. Se accede a esos espacios de almacenaje con una escalera que pone un toque industrial de estilo Brooklyn.