Lo primero que veías al entrar en esta casa en las afueras de Barcelona era la escalera. Pero no una escalera bonita, sino una anticuada y muy pesada visualmente que afeaba la vivienda. Así que la decoradora Marta Prats, responsable de la reforma, no lo dudó: la escalera iba fuera. Y a partir de ahí, los cambios se sucedieron hasta convertir una vivienda que se había quedado anticuada en una super cómoda para una familia con dos niñas pequeñas. 

1 /10

1.

Cambio de escalera, nuevo look en la zona de día

Escalera blanca con cómoda de madera

La escalera fue la primera intervención de la decoradora, y solo con eso, la zona de día se transformó. "Hicimos una escalera nueva mucho más ligera, blanca y con los peldaños volados de madera a juego con el nuevo pavimento". 

Cómoda de Westwing. Escalera reformada por la decoradora Marta Prats.

2.

Un salón que ha ganado luz con una nueva distribución

Salón con vista al recibidor y la escalera

El sofá, que ahora mira al exterior, antes estaba orientado hacia la pared. "Es increíble cómo se ha transformado el espacio con este simple cambio, ahora la luz circula de punta a punta". En esto también ha contribuido el nuevo suelo –el anterior era de jatoba y le restaba claridad a la casa– y las puertas acristaladas, ya que las de origen eran ciegas.  

Sofá de Cusó Tapissers y butacas de La Maison. Mesa de centro y cuadros de Valeria Sidañez, en Sacum.

3.

Una personalísima alfombra que enmarca el espacio

Salón con sofá rinconero, butacas de fibras y gran alfombra de flores

Si el salón se transformó por completo con la nueva distribución del espacio, fue ponerle la alfombra y la magia fue completa. "Esta preciosa alfombra de flores es una pieza de herencia que es... espectacular", resume la decoradora.

En las butacas, cojines de lino de La Maison y manta de H&M Home. Armario bajo detrás del sofá de Ikea. 

4.

Ahora la luz fluye de punta a punta del salón

Salón con butacas de fibras y detrás ventana

"La luz en esta vivienda es preciosa", apunta Marta, y antes de la reforma no se le sacaba todo el partido posible. Ahora, con la nueva distribución del estar fluye sin obstáculos. 

5.

Una cocina más luminosa y cómoda al abrirla al comedor

Corredera blanca que separa el salón de la cocina-comedor

La corredera que separa el salón de la cocina ya estaba, pero se aprovechó la reforma para cambiarla por esta blanca y acristalada, así la luz fluye mejor. Aunque el gran cambio fue abrir la cocina al comedor: "Así no solo ganaba más luz, sino que para el día a día resultaba mucho más cómoda. De hecho, se prolongó la encimera de la península por los tres lados para ganar una zona de taburetes donde poder comer los cuatro en familia".

En el comedor, alacena de herencia, y mesa y sillas Thonet, en Casamitjana Barcelona.

6.

Total look en blanco para la cocina

Cocina blanca con campana de obra

Como nota de la cocina, que se planificó totalmente blanca, el pavimento, un porcelánico que imita la pizarra, y la encimera de la isla, que atesora una anécdota: "Se trata de un gran plafón de madera de teca recuperada. Era del propietario, que la tenía guardada, y la quiso usar en la cocina. La verdad es que le da un punto de calidez a una cocina muy blanca", explica la decoradora. 

Mobiliario de cocina de Cubic Cuines.

7.

Un divertido papel pintado que viste el dormitorio

Dormitorio con papel pintado de flores y cabecero en capitoné rosa

"Usamos el papel para romper con el monopolio del blanco. Pero nos atrevimos con un diseño muy divertido. Nos pareció gracioso y con el cabecero en capitoné rosa le da mucha personalidad a la suite", apunta Marta. 

Papel pintado de Woodland, cabecero, banqueta y funda nórdica, todo de La Maison. Edredón de Filocolore.

8.

Un dormitorio en suite con un vestidor tipo closed

Dormitorio en suite con vistas al baño

El dormitorio cuenta el baño en suite y un completísimo vestidor tipo closed que la decoradora planificó abierto porque quedaba cerrado por una puerta corredera. En el baño se repitió el mismo pavimento que en la cocina, un personalísimo porcelánico que imita la pizarra que contrasta con el blanco que se impone en esta estancia. 

Silla Thonet, en Casamitjana Barcelona. Y en el baño, pavimento porcelánico que imita la pizarra. 

9.

Un mueble bajolavabo doble muy capaz

Baño con mueble bajolavabo blanco

La decoradora aprovechó la amplitud del baño para planificar un completo mueble bajolavabo doble, así cada miembro de la pareja dispone de su propio espacio para guardar. 

Mueble diseño de la decoradora y realizado por Fusteria Catot. Espejo, en Sacum. 

10.

Una bañera exenta como protagonista del baño

Bañera exenta y pared revestida de un porcelánico que imita el mármol Calacatta

En el baño, el capricho fue la bañera, una pieza exenta de aire retro que decora por sí sola. Además, la pared se revistió con un porcelánico que imita el mármol Calacatta que parece enmarcarla.

Bañera y revestimiento porcelánico de Neocerámica.