El cuarto de baño debe ser una de las estancias donde la limpieza esté siempre a la orden del día: es el lugar de la casa que utilizamos para nuestra higiene personal, así que es más que necesario que siempre tenga un aspecto saludable y limpio. Sin embargo, y según la experta en limpieza Eli Jiménez (@huele.a.limpio), muchas veces adoptamos una serie de hábitos que, sin darnos cuenta, no son tan prácticos como creemos y nos afectan más mal que bien.

Por ejemplo, la experta nos cuenta que una mala costumbre muy generalizada en muchas casas es dejar la toalla mojada dentro del cuarto de baño después de salir de la ducha y habernos secado con ella. La especialista en limpieza nos cuenta los peligros de esta "inofensiva" práctica y nos desvela otros 4 errores que se cometen en los baños. Si quieres aprender los trucos de limpieza de las expertas, no te pierdas nuestro e-book gratuito con 50 trucos para una casa impoluta. 

No dejes las toallas mojadas dentro del cuarto de baño

La verdad es que es un gustazo salir de una ducha calentita y envolverte en una suave toalla para secarte. Sin embargo, aunque parezca una situación placentera, si no has secado la toalla de la manera correcta, puede que te estés envolviendo en bacterias y malos olores sin darte cuenta. ¿El motivo? Pues, como bien nos ha comentado la experta en limpieza Eli Jiménez (@huele.a.limpio), si dejamos secar las toallas mojadas dentro del cuarto de baño, estaremos creando un ambiente con las condiciones perfectas para la proliferación de hongos y bacterias.

Esto sucede porque los cuartos de baño suelen ser espacios cerrados con poca ventilación y un alto nivel de humedad. Así que, si dejamos las toallas mojadas colgadas en el toallero o directamente en la mampara de la ducha, no podrán secarse completamente, ocasionando malos olores y la posible aparición de hongos y bacterias. Por eso, la experta en limpieza nos recomienda que, una vez nos sequemos el cuerpo con la toalla tras la ducha, las colguemos al aire libre para asegurarnos de que se secan correcta y completamente.

Importante: cuando salgas de la ducha y te seques con la toalla, cuélgala al aire libre

Importante: cuando salgas de la ducha y te seques con la toalla, cuélgala al aire libre

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Más errores que debes evitar hacer en el cuarto de baño

Además de aconsejarnos colgar la toalla con la que nos hemos secado después de la ducha al aire libre para que no acumule ni malos olores ni bacterias, Eli también sugiere que no cometamos más estos otros cuatro errores tan comunes en los cuartos de baño:

1. No dejes la tapa del inodoro abierta

Por si no lo sabías, cuando tiramos de la cisterna se liberan gotas microscópicas que pueden contener bacterias y virus. Si la tapa del inodoro está abiertas, estas microgotas se esparcen por el aire, llegando a las superficies más cercanas, como el lavabo, las toallas los cepillos de dientes.

A partir de ahora, acuérdate siempre de bajar la tapa del inodoro después de cada uso

A partir de ahora, acuérdate siempre de bajar la tapa del inodoro después de cada uso

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2. No utilices alfombrillas de baño de tela

Aunque queden muy coquetas en el suelo y su tacto sea muy suave para nuestros pies, las alfombrillas de tela tienen el gran inconveniente de acumular humedad si no se lavan ni se secan correctamente, pudiéndose convertir en un foco de moho y bacterias. En su lugar, Eli recomienda usar una alfombrilla de diatomita, un material antideslizante, de secado rápido y muy absorbente que, además, no hace falta lavar con tanta frecuencia.

3. No dejes los cepillos de dientes al aire

Como comentó antes la experta, si dejamos la tapa del inodoro abierta y los cepillos de dientes están colocados en alguna superficie cercana, les pueden llegar las microgotas que se dispersan al tirar de la cadena. Además, también quedan totalmente expuestos a la humedad. Lo mejor es que, después de cada uso, los guardes dentro de algún cajón limpio o en un estuche cerrado.

4. No dejes la papelera del baño llena por mucho tiempo

Por último, otro error muy repetido en cuartos de baño es dejar la papelera llena de papeles sucios y residuos. Si pasamos muchos días sin vaciarla, se empezarán a generar malos olores y la suciedad acumulada puede también atraer insectos. A partir de ahora, acuérdate de vaciar la papelera del baño a diario o, como mucho, cada dos días.

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