Cuando llega el final del invierno, algunos jardineros experimentados recomiendan plantar ciertas especies de plantas para que tengan tiempo de desarrollar raíces fuertes antes de que suban las temperaturas y llegue el calor. Esto ha llevado a la creencia generalizada de que todas las flores deben estar plantadas ya en abril para garantizar su crecimiento y floración en esta época del año.
Sin embargo, esta idea no es del todo cierta, básicamente porque cada planta tiene su propio ritmo y necesidades, y muchas variedades están pensadas precisamente para ser plantadas en plena primavera. Si aún no te has puesto manos a la obra en el jardín de tu casa, no te preocupes: todavía estás a tiempo de plantar flores que, además de adaptarse perfectamente a esta temporada, te regalarán un espectáculo de color y vida durante todo el verano.
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