10 cocinas pequeñas con grandes ideas que querrás copiar: trucos inteligentes para ganar amplitud y aprovechar el espacio

Una excelente forma de ganar amplitud es abrir la cocina al resto de la casa y para delimitar la zona de trabajo sin perder esa apertura, una península es una solución ideal. Esta "barrera" no solo marca el espacio de manera efectiva, sino que también puede servir como una práctica barra de desayunos, ofreciendo un lugar adicional para comer o trabajar sin ocupar espacio extra. 

Esta cocina es genial, porque, a pesar de su reducido tamaño, cuenta con bastantes zonas de almacenaje y no resulta para nada agobiante. ¿La clave? En dos frentes se han instalado armarios altos y bajos de medidas diferentes, así como una campana telesco´pica integrada en el mobiliario, y en el otro se ha dejado la pared despejada.

Para lo reacios a abrir la cocina por miedo a que humos y olores inunden el salón, esta idea es fantástica: una persiana con motor consigue dar independencia a la cocina cuando se está guisando y cuando no, se deja abierta para permitir el paso de la luz entre los ambiente y una comunicación fluida con salón.

Esta solución, además de comunicar la cocina con la habitación contigua (lo normal es que sea el comedor), permite el paso de la luz natural entre ambos espacios. Este vano se puede dejar desnudo o colocar un estor o una persiana para independizar los ambientes cuando se desee. En este caso se ha cerrado con una ventana de guillotina y se ha remátalo con una encimera a modo de barra de desayunos.

Está claro: son la mejor solución para aprovechar cada rincón de manera eficiente. Al diseñar los muebles específicamente para tu cocina, te asegurarás de que no haya áreas desperdiciadas. Un excelente ejemplo es este piso pequeño en el que el espacio que queda bajo la escalera se ha aprovechado con armarios y estantes para mantener la cocina organizada. 

¿Qué tiene de especial esta cocina? Además de sus muebles de frentes lisos y sin tiradores, que aportan una estética moderna y elegante, los electrodomésticos permanecen ocultos a la vista desde el salón, lo que ayuda a mantener una apariencia limpia y ordenada. 

Una tendencia cada vez más habitual es crear una gran zona social con salón, comedor y cocina en el mismo espacio. Una distribución moderna con la que, además, se gana amplitud y luminosidad. Así se ha hecho en este piso, si bien una puerta corredera acristalada divide el salón de la zona en la que se han ubicado la cocina y el comedor. 

En esta cocina, la barra de desayunos, estratégicamente ubicada frente al cerramiento de cristal, ofrece un lugar acogedor para disfrutar de las comidas, y mantener una conexión visual con la zona de estar del salón. 

En este piso, el tabique que separaba la cocina del recibidor se ha sustituido por una mampara que combina una parte ciega en la zona inferior con cuarterones de cristal transparente en la superior para permitir el flujo de la luz de un ambiente a otro. Además, al ser madera lacada en el mismo tono que el resto del mobiliario queda perfectamente integrada en la decoración.