¡No tires tus corchos de vino! Mira lo que pueden hacer con tus plantas y el moho

Todas nuestras plantas de interior y de exterior requieren de una serie de cuidados que no podemos dejar pasar por alto si queremos velar por su crecimiento, mayor duración y desarrollo. Además de proporcionarles una buena iluminación, una dosis de riego adecuada según las necesidades de cada especie y la cantidad de nutrientes idónea que contribuya a su crecimiento, existen otros trucos naturales, fáciles y baratísimos que pueden ayudarnos a mejorar el rendimiento de nuestra planta.

[En este vídeo te contamos cómo cuidar y regar las plantas de interior de tu casa. A continuación, te desvelamos un truco muy fácil y baratísimo para hacer que tus plantas crezcan con los nutrientes necesarios. ¡Toma nota!]

Los corchos de vino son un material natural y biodegradable, lo que significa que se descomponen gradualmente con el tiempo. Y eso es lo que ocurre también si los introducimos en la tierra de nuestras macetas, se descomponen y acaban convirtiéndose en nutrientes que las plantas pueden absorber. A continuación, te damos todos los detalles para que puedas sacarle el máximo partido a este truco. ¡Toma nota! 

¿Qué hace el corcho en las plantas? 

Los corchos de vino contienen lignina y suberina, dos compuestos orgánicos que son resistentes a la descomposición, lo que significa que tardan más tiempo en degradarse en comparación con otros materiales orgánicos como las hojas o el césped. A medida que se descomponen, liberan pequeñas cantidades de nutrientes (nitrógeno, fósforo y potasio) en el suelo, que son importantes para el crecimiento de las plantas. 

Además, los corchos de vino ayudan a prevenir la aparición del moho en la tierra. Como sabes, el moho es un hongo que puede crecer en condiciones húmedas y cálidas, y puede acabar dañando a tus plantas. Si introduces corchos de vino en la tierra de tus plantas, podrías crear un ambiente más seco y aireado que dificultaría el crecimiento de moho. 

Mujer regando plantas en el comedor.

¿Cómo poner corchos en las macetas? 

Si optas por utilizar tapones de corcho para conseguir que tus plantas florezcan más bonitas y sean más fértiles, deberás romper algunos de estos corchos en trocitos con la ayuda de tijeras y enterrarlos entre la tierra de tus macetas. Transcurridos unos días, verás como los trocitos de corcho se descomponen y sirven como sustrato a la planta. ¡Un truco natural y de lo más ecológico!

¿El corcho es bueno para el suelo? 

Además de los compost a los que ya estamos habituados como las cáscaras de plátano o los posos de café, los corchos de vino orgánicos ayudan a proteger las raíces de las plantas, evitar el crecimiento de las malas hierbas y mantener el suelo húmedo. Este proceso se conoce como mulching y se basa en aplicar materia vegetal u otro material triturado sobre el suelo de la maceta para devolver los nutrientes a la planta a medida que el material vegetal se descompone. 

Otros trucos naturales para tus plantas 

Además de utilizar corchos de vino, existen otros trucos caseros que pueden ayudarte a recuperar el brillo de tus plantas. ¡Toma nota!

• Riega sin cal. En la medida de lo posible, es preferible regar las plantas sin cal. Por ejemplo, el agua de la lluvia es perfecta para el buen desarrollo de tus plantas. Si no puedes conseguir agua sin cal, te recomendamos que la dejes reposar unos días antes del riego. 
• Usa el bicarbonato. ¿Sabías que el bicarbonato actúa como plaguicida y funguicida en tus plantas? Sustituye los productos tóxicos y caros por bicarbonato para cuidar de tus plantas. 
• Elige agua rica en algas. Si dispones de un acuario con peces, estás de suerte. Cuando vayas a limpiar el acuario y extraigas el agua, en lugar de desecharla, úsala para regar tus plantas. Lo creas o no, esa agua contiene desechos orgánicos que contribuirán a la alimentación de tus plantas. 

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