Y por si el descanso no fuese suficientemente relajante en la habitación, llegamos a un cuarto de baño que nada le envidia a un spa. Con un fondo blanco impoluto, más elementos dorados, una alfombra y varias plantas. María José aprovechó la gran pared frontal para diseñar un mueble de lavabo suspendido, y muy ligero, que apenas quita espacio a la zona de paso. Tiene cajones y hueco para colocar cestos y toallas a la vista.
A los extremos situaron la ducha, más reservada, y la bañera bajo la ventana, con una ubicación privilegiada. ¿Por qué elegir entre ducha y bañera cuando podían poner las dos? Al fin y al cabo, en esta casa, uno siente que puede tenerlo todo. ¡Como en un paraíso privado!
En el baño principal, el revestimiento es de mármol y la ducha de Calamita Design. El taco de madera, de Crisal. Y las toallas son de Zara Home. La grifería, por otro lado, es el modelo Sens Oro de Calamita Design. Todas las plantas y jarrones son de Viveros González.