Ya ha llegado el buen tiempo y, con él, nuestro ventilador se ha convertido en nuestro mejor aliado de la temporada. Nos ayuda a estar fresquitas y a conseguir un ambiente en el que fluya el aire de manera correcta, logrando que nuestras estancias estén mejor ventiladas, pero también a controlar la humedad de las estancias en las que lo colocamos, manteniendo a raya el calor. El ventilador es una buena opción con la que refrescarnos en verano, una alternativa mucho más económica que el aire acondicionado y un instrumento muy versátil, que podremos colocar en cualquier parte, modular y ajustar a nuestras necesidades. Sin embargo, para que funcione, debe estar en correctas condiciones.
Al igual que cualquier otro electrodoméstico de nuestra casa, el ventilador acumula polvo y suciedad en sus aspas que, si no limpiamos con frecuencia, harán que el ventilador funcione más lento, reduciendo su eficiencia, haciendo que enfríe menos y, sobre todo, gastando mucha menos energía. Además, cada vez que lo encendamos, esa suciedad, los ácaros y los alérgenos, se expandirán por el resto de la casa, contribuyendo a la proliferación de problemas de salud o respiratorios. Entonces, ¿Cómo debemos limpiar el ventilador para evitarlo? Estela Moreno (@soyestelamoreno) es experta en limpieza y en su cuenta de TikTok nos da las claves para conseguirlo. Por cierto, .
EL truco de experta para limpiar el ventilador
Estela Moreno (@soyestelamoreno) es experta en limpieza, orden y tips para el hogar y nos cuenta el truco más sencillo con el que podremos dejar como nuevo el ventilador.
Ella lo pulveriza con el limpiador 'Milagritos' y, después, le pone una bolsa de plástico por encima y lo activa, logrando que toda la suciedad del ventilador se adhiera a la bolsa y las aspas queden limpias, funcionando mejor, enfriando con más facilidad y logrando mejorar la vida útil del aparato. Después, limpia bien con una bayeta de microfibra el resto de la superficie del ventilador y nos asegura que queda como nuevo.
PASO POR PASO

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- Primero quitamos el polvo, con una brocha o un aspirador, pasándola bien por todas las rejillas. Este proceso es importante para que, cuando comencemos a limpiar, el polvo no se integre de más con el resto de la suciedad. Debemos limpiarlo tanto por delante como por detrás, sin dejar hueco.
- Una vez hecho esto, en un recipiente con pulverizador haz una mezcla de 300 mililitros de agua caliente, 3 cucharadas de vinagre de limpieza y otras 3 cucharadas de lavavajillas (aunque también podemos echarle pasta de dientes). Debemos disolverlo bien para que se extienda de forma correcta por ta la superficie. Lo agitamos muy bien y pulverizamos por todo el ventilador, acercándonos a las aspas todo lo que podamos, sin cuidado de darle al motor.
- Lo envolvemos en una bolsa de plástico, que debemos atar bien para que no se vaya cayendo la suciedad, encendemos el ventilador y lo dejamos que funcione a media potencia durante 5 minutos. De esta forma, conseguiremos que toda la suciedad se impregne en la bolsa. Después, la quitamos con cuidado de que no se caiga nada al suelo.
- Por último, si queremos que el ventilador dure mucho más tiempo, abrimos la parte de la rejilla y, con cuidado, pasamos una bayeta de microfibra seca por todas las aspas y también por la rejilla. Finalmente, rociaremos con la mezcla la pata del ventilador y el resto de sus superficies y las limpiaremos con la bayeta de microfibra. ¡Quedará como nuevo!
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