Espejos decorativos para todo tipo de paredes y estilos

Como si de un amplio ventanal se tratase, este espejo con cuarterones y un marco de forja con espíritu industrial, se encarga de duplicar el espacio visual del salón-comedor mientras se corona como el protagonista de la estancia.

Para viajar al siglo XVII no necesitas una máquina del tiempo, te basta con elegir un espejo de estilo barroco con marco dorado para decorar, por ejemplo, la zona superior de la chimenea. ¡La elegancia de la sencillez al descubierto!

Los espejos redondos siguen siendo tendencia, y es que se trata de un accesorio muy versátil que encaja en casi todos los estilos: nórdico, mid-century, boho, industrial... En el espejo de la imagen, la correa y el acabado metálico de color negro le dan un aspecto de lo más moderno y minimalista. ¿No te parece ideal?

Si te despistas un segundo, puedes pensar que te encuentras en una casita de campo en la Provenza, pero no... se trata de una original ventana espejo de aires rústicos con madera decapada que decora el recibidor como ninguna.

El marco de este espejo redondo trenzado con madera de forma artesanal, lo convierte en un objeto de deseo que pide a gritos ser expuesto en cualquier recibidor que se precie, como pieza central del conjunto. ¿El complemento perfecto? Una consola industrial.

Si lo que deseas es recrear la máxima naturalidad, un espejo con el marco de madera al desnudo (es decir, con todas las imperfecciones a la vista) te dará lo que necesitas. En este dormitorio, las paredes de piedra suponen el contraste perfecto para concebir esos aires de casa de pueblo tan cálidos y acogedores.

Otra idea fabulosa para decorar rincones con molduras como esta chimenea de piedra, es elegir espejos que encajen con la forma y colocarlos apoyados de manera desenfadada, aportando una dosis de elegancia y frescura sin igual.

¿Tu salón es más pequeño de lo que te gustaría? Toma nota de este truco, ¡porque marcará la diferencia y te hará ganar metros! Tan solo tienes que revestir la pared con espejos con cuarterones, y la iluminación se encargará del resto.

Desde hace ya varias temporadas los espejos tipo sol no dejan de arrasar, pero... ¿a qué se debe tanto éxito? Básicamente, a la sencillez y a la naturalidad de sus diseños, con marcos de fibras naturales o acabados metálicos dorados capaces de refrescar cualquier habitación en compañía de unas plantas.

Hay ocasiones en las que dos es mejor que una. Y si no te lo crees, echa un vistazo a esta composición: a primera vista podrías pensar que se trata de dos espejos antiguos, pero en realidad uno de ellos solo cuenta con el marco. Ingenioso, ¿eh? Pues eso no es todo, porque las flores y el libro se encargan de completar este look romántico que parece inspirado en las novelas de Jane Austen.

Muchas soñamos con tener ese tocador de cuento frente al que sentarnos para cepillarnos el pelo antes de dormir, pero a veces el espacio no lo permite.

¿La solución? Hacerte con un espejo de estilo victoriano y colocarlo sobre la mesita de noche. Puede que maquillarte en esta zona no sea lo más cómodo del mundo, pero te aseguramos que el rincón se volverá mágico.

¿Por qué no juegas a crear un collage de espejos? Si te apasiona la estética vintage, puedes probar con el ejemplo de la foto, combinando distintos modelos con maderas decapadas y marcos envejecidos. ¡Derrocharán personalidad!