Un piso en Barcelona con mucho encanto, toques de color y una cocina verde con aires provenzales que enamora
Sofía y su familia se mudaron a este piso en busca de más luz y espacio. Lo decoraron con piezas recuperadas y modernas y han conseguido un estilo muy personal. Sobre todo, súper relajante
Con la llegada de su tercera hija, Sofía y su marido se animaron a buscar una casa con más espacio, donde cupiesen los cinco cómodamente. Y dieron con este piso de 170 m2 en Barcelona. "Nos encantó por la amplitud, pero también porque todas las estancias son exteriores. Además, ¡no le hacía falta reforma! Solo un lavado de cara", nos cuenta la propietaria. Ella misma se encargó del cambio de look, con la ayuda de Cristina Larrumbe, de Trucos para Decorar.
Salón comedor con librería a medida diseño de Gabriela Conde. Sofás de Miki Beumala. Chimenea con embocadura en Little House.
El Mueble / Pepa Oromí
Claro y con mucha luz natural
Nada más entrar, Sofía quedó prendada con el piso, que tiene muchísima luz natural. Venían de una casa oscura y era algo que valoraron mucho. Y la casualidad hizo de las suyas, porque resulta que el piso lo había proyecto la decoradora Gabriela Conde hace muchos años. "Me hizo gracia descubrirlo porque la conozco", nos explica. "Al decorarlo respeté mucho el proyecto de Gabriela. Como la gran librería de obra del salón o la chimenea, a la que solo puse un sobre blanco para darle más presencia".
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Salón con sofás de Miki Beumala. Puf recuperado. Butaca similar en Kave Home. Alfombra de Cotlin, en Trucos para Decorar. Cuadros de Andrea Sorjus.
El Mueble / Pepa Oromí
Un look entre clásico y moderno
El gran espacio de la zona de día dio a Sofía mucho juego a la hora de decorar. Mezcló muebles antiguos con otros hechos a medida, como los sofás, y añadió toques modernos con los cuadros y las lámparas. "El puf estaba en la casa, pero destrozado. Lo retapizamos y ¡a mis hijas les encanta!", exclama. Para hacerlo sereno y relajante, cambiaron los colores de la casa, con una combinación de blancos y grises claros.
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En el recibidor, consola antigua. Cuadro de Claudia Balsells. Librería alta diseño de Gabriela Conde. Alfombra de BSB.
El Mueble / Pepa Oromí
Un recibidor acogedor y personal
En el recibidor, que se encuentra justo al lado del salón, Sofía conservó otro diseño original de Gabriela. Una curiosa librería en el techo que pintó en el mismo color de la pared para que quedara bien integrada. En el pasillo, las paredes son cálidas con un arrimadero a media altura, mientras la consola antigua está acompañada de un cuadro moderno que refleja ese juego de estilos.
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Comedor con sillas de India & Pacific. La mesa es de los propietarios. Lámparas de techo en Avanluce. Sobre la chimenea, espejo de Taller de las Indias.
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Buscaban una decoración relajante
"Quería una casa que transmitiera mucha paz", nos cuenta Sofía. De ahí el predominio de colores claros, pero también de muebles de madera, que sabemos son un gran aliado para conseguir una casa acogedora. Los estores en las ventanas tamizan la luz y ayudan a crear esa atmósfera tan relajada.
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En el comedor, sillas de India & Pacific. Lámpara en Avanluce. Cuadro de Andrea Sorjus. Estores de Bandalux.
El Mueble / Pepa Oromí
Los muebles de madera están muy bien integrados
¿Uno de los muebles más especiales? La mesa maciza del comedor. "Fue un regalo de bodas. Quería integrar en la decoración estas piezas de madera a las que tenemos mucho cariño, pero sin caer en un estilo demasiado rústico". El truco fue añadir pinceladas modernas con las lámparas de diseño y los cuadros coloridos.
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Sobre la mesa del comedor, vajilla mod. Stone, de ia&lia, diseño de la propietaria. Camino de mesa en Carolina Blue.
El Mueble / Pepa Oromí
La cocina se comunica a través de una ventana
Salón y comedor comparten espacio y están conectados en cierta manera con la cocina que, aunque cerrada, tiene una ventana en la pared que le da profundidad. Desde aquí ya intuimos que la cocina también tiene un sello muy personal, pintada de verde...
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Cocina diseño de Gabriela Conde. Vinoteca de Liebherr. Vajilla de ia&lia. Paño de Filocolore. Flores de Colvin.
El Mueble / Pepa Oromí
Tiene un estilo provenzal
"La cocina estaba forrada de madera y se veía un poco antigua. Para darle un estilo más provenzal la teñimos de este verde empolvado y le dimos el toque actual con la encimera de mármol y los tiradores negros", nos cuenta. Gracias a la ventana, la luz entra sin problemas y la pareja tiene siempre a la vista a las niñas.
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El office es un diseño de Gabriela Conde, con mesa y banco a medida. Sillas de Taller de las Indias. Suelo de Edfan.
El Mueble / Pepa Oromí
El office es una estancia muy vivida
"La cocina es una de las estancias donde pasamos más tiempo. Sobre todo el office. Aquí comemos, jugamos y hacemos los deberes con las niñas", nos cuenta Sofía. En su momento, Gabriela Conde lo diseñó con un banco y una mesa a medida. Las dos sillas de fibras dan el toque natural y el suelo blanco da luz a toda la cocina.
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En el dormitorio principal, cabecero con papel pintado de Coordonné. Ropa de cama de Filocolore. Escritorio de Roble Store. Silla de Taller de las Indias. Lámpara de sobremesa de Balataka.
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El cabecero es la clave del dormitorio principal
En el dormitorio principal encontramos otro elemento muy personal: la pared del cabecero con papel pintado. "Lo puse azul oscuro para darle un toque masculino. Es una casa muy de mujeres y quería que mi marido estuviese a gusto", reconoce Sofía. Con la cama vestida de lino verde y un cálido escritorio de madera junto a la ventana, es el perfecto refugio para desconectar. En medio de la ciudad.