Un piso de alquiler de estilo clásico con una decoración actual que no pasa de moda

Si vives de alquiler, olvida el tópico de que has de esperar a que tu casa sea ‘tuya’ para decorarla como de verdad te gusta. Y si tu casa es ‘clásica’, olvida también el tópico de que no puede ser actual. Este piso desmonta las dos ideas de un plumazo.

“Este es un piso con una estructura clásica, pero lo hemos rejuvenecido manteniendo su esencia”, explica Asun Antó. En el salón, la librería y la chimenea ya estaban. ¿Su solución? "Las pintamos de blanco y así queda más actual y más ligero visualmente", dice la interiorista.

Este balcón lleno de plantas llena de vida el piso. Las cortinas blancas dejan pasar la luz y, con los colores claros, el piso deja de ser oscuro y anticuado.

"Buscamos modelos actuales, pero atemporales y frescos, como el sofá, la mesa de centro o esa gran lámpara en la mesa auxiliar", explica Asun.

Para la zona del salón, la interiorista no solo se decantó por piezas atemporales, sino también prácticas. Un buen ejemplo es la mesa de centro con bandejas laterales extensibles. De esta manera, si recibes visita en casa y no te apetece quitar la decoración de la mesa, puedes utilizar esta zona extensible. 

El comedor está junto al salón y aquí el toque de estilo lo ponen las dos lámparas. “Son grandes, de cuentas de madera, que aportan la calidez de la madera y el contraste de lo actual con el mueble de obra de la pared”, apunta Asun.

Una de las claves para cambiar el carácter de este piso fue dotarlo de luminosidad. Para ello, no solo pintaron de blanco, sino que también dejaron que la luz  accediera sin impedimentos al interior, como en el comedor. 

En este caso, la interiorista y la inquilina abrieron la cocina hacia un pequeño cuarto contiguo. La cocina es blanca y muy práctica. Un detalle le da estilo: el aparador antiguo, que sirve de apoyo.

En la cocina, “creamos un office con un papel pintado de langosta que nos pareció muy divertido. La mesa de madera y las sillas blancas de fibra dan el contrapunto rústico", comenta Asun.

Y el papel pintado del office no solo sirve para darle carácter, también lo delimita y resalta su presencia. El modelo elegido es divertido y alegre, gracias a su colorido y vitalidad. 

En este caso, un cabecero que eran puertas de anticuario. “Las pintamos turquesa y decapamos”, explica Asun. Son un cabecero único.

En un piso de alquiler, meterse en obras es un engorro (del que, además, no te beneficiarás a largo plazo). Por eso, para conseguir más almacenaje, todo vale. En este dormitorio, Asun Antó se decantó por un mueble a medida –que alberga también un cubrerradiador– con estantes que regala espacio para guardar y decora la pared a los pies de la cama.  

El truco de Asun Antó para dar encanto a cada estancia ha sido buscar, al menos, un mueble con encanto. En el dormitorio juvenil, fue “la cama con dosel, que da un aire muy romántico con esas telas de lino colgando”.

Como el piso carece de armarios empotrados, la interiorista colocó un modelo exento, de estilo sencillo, para conseguir más espacio para guardar. Cuenta con tres puertas abatibles y, para su apertura, se ha prescindido de los tiradores, ofreciendo una imagen mucho más limpia y ligera (genial en contraste con la cama con dosel).

"El sofá de la entrada tiene tela de arpillera en la base y queda ideal con esos espejos-puerta vintage combinados", apunta Asun. El aparador de madera y la alfombra de fibras completan el recibidor, que podría entrar en nuestro top ten de mejores recibidores.

Los espejos ventana son un recurso que verás mucho en las casas El Mueble. Son atemporales, encajan en cualquier estilo decorativo y ofrecen resultados estupendos. Aquí, se eligió uno con la parte superior redondeada, de manera que es más ligero y dinámico.