'Inspiración Hamptons' en la Costa Brava

La propietaria de esta casa, quería conseguir una casa acogedora, especial, que no pasara desapercibida y donde disfrutar de sus maravillosas vistas. Mesa de centro antigua es de Merc&Cía. La lámpara es de Ay iIluminate. Los cojines son de Calma House.

La interiorista Pía Capdevila, autora de la decoración, explica: "Nos propusimos crear un espacio único, que invite a estar horas y horas en casa. Nuestra idea fue mezclar un look Hampton’s, pero en la Costa Brava”. La alfombra es de Gra. Los cojines son de Calma House, Coco-Mat y Filocolore. 

Las fibras y las maderas en bruto son protagonistas del exterior, junto al color, que crea un ambiente extremadamente acogedor y muy contrastado con un interior donde el blanco es el color rey. Sofá de Maisons du Monde. Butacas de Sacum. Tacos de madera, de Suite Vintage.

Victoria y Pía trabajaron juntas para planificar cada estancia y para decorarlas con detalles con mucho estilo, donde la cerámica, las fibras, la madera natural envejecida y las flores reinan. 

“Me apetecía una casa muy clarita, que me diera paz, ¡pero también práctica!”, apunta la propietaria. La mesa es de Rivièra Maison. Las sillas de ratán son de Sika Design. La lámpara de mimbre es de Tons.

Tuvieron claro que en los tonos de la casa debía predominar “el blanco y más blanco, también para destacar el mar, y los grises suaves", dice la propietaria. La lámpara de la cocina es de Pomax. Las cortinas y los estores de lino se hicieron con tela de Andrew Martin

“No paramos hasta conseguir un suelo cerámico pero con aspecto 100% envejecido. Costó, ¡pero lo encontramos!”, añade Pia. Y la verdad es que el resultado es espectacular y muuuuy sereno. El mobiliario es de Meine Kutchen. Los electrodomésticos son de Siemens.

"Las maderas con un toque envejecido y patina blanca, las fibras como mimbre y ratán, muy de la zona, y los linos naturales fueron nuestros favoritos para dar un aire suave y con encanto a la casa”, nos cuenta Pía. La alacena es de Antic Rocamora. La vajilla procede de Pomax.

Incluso los detalles más pequeños, como los boles de cerámica y los individuales de fibra, que proceden de Sacum, están elegidos con sumo mimo. Se ha buscado el alma en todas las piezas para darle a casa ese aire coqueto y natural que tiene.

Desde el salón comedor subimos al dormitorio por esa escalera sin barandilla (¡los hijos están mayores y podían hacerlo!) que parece una escultura en el espacio. Ligera y bellísima. El suelo es el Vintage Wood de Neocerámica. Los farolillos son de Muy Mucho.

El cabecero - arrimadero se hizo con paneles de lamas decapadas de Bervic. Es una pieza especial de las que transmiten "alma". Son lamas envejecidas rematadas con un friso antiguo. Las mesitas son de Maisons du Monde.

El color del cabecero nos hace pensar en el mar que se ve desde la ventana. Es un estilo marinero ligero, eco y con mucho encanto. La cama fue vestida con lino 100% en Tons. Los cojines y el plaid se hicieron con tela de Yutes.

Procede de Maisons du Monde y la colcha verde es de Filocolore. Las puertas, de persiana y en color madera clara, lo hacen ligero y muy decorativo. Todo en esta casita nos ‘sopla’ lo mismo: es el remanso de paz de Victoria.