Ideas para ordenar tu calzado: 50 zapateros y accesorios para mantenerlos en orden

Si los zapatos son tu debilidad y cuentas con más pares que días tiene la semana, es básico buscarles un sitio. No solo podrás tenerlos todos a mano, sino que evitarás que adopten formas inadecuadas y acaben deformándose. Aquí se ha optado por un armario a medida destinado solo a zapatero. 

 El mejor sitio para un zapatero es el recibidor. Así llegas y te descalzas, evitas que la suciedad entre en casa y los zapatos están siempre en orden. Puedes poner un mueble zapatero muy estrecho en el pasillo. ¿O qué tal debajo de una ventana, de lado a lado, en esa pared donde no tienes nada? 

Coloca arriba los zapatos que menos usas. Destina un par de filas al calzado de deporte. Deja en la parte central los zapatos que más te pongas a diario. Las botas necesitan más espacio, y resulta más cómodo el estante inferior. Para que no se deformen, coloca un trozo de cartón dentro o bien perchas. 
 

¿No quieres integrar el zapatero en el armario? Una alternativa es habilitar un mueble a modo de zapatero. Aquí se ha optado por un mueble bajo de dos módulos equipado con tres baldas extraíbles que permiten aprovechar al máximo el fondo con dos hileras de zapatos, lo que duplica la capacidad de este zapatero. 

Si dispones de poco espacio en el recibidor o la habitación, ubica tu zapatero en un espacio intermedio, por ejemplo el pasillo o debajo de las escaleras, siempre hay un rincón que podemos aprovechar y aplicar orden. 

Aprovecha un recodo en el pasillo o el distribuidor para colocar un mueble zapatero y coloca los zapatos de otra temporada. Elige un mueble bonito que encaje con el resto de la decoración y aprovecha para decorar la casa con algunos detalles como velas y un espejo.

 Lo ideal es que guardes los zapatos separados de la ropa. Así que si no tienes espacio, dedica una parte del armario exclusivamente a ellos. Coloca unas baldas a diferente altura para adaptarlas a cada tipo de calzado. 

Aprovecha las propias cajas de los zapatos si no dispones de espacio suficiente para ordenarlos. Para distinguirlos, bastará con etiquetar la caja o bien poner una fotografía del zapato, será muy útil. 

Si eres prima-hermana de Carrie Bradshaw o llevas una Imelda Marcos dentro y los zapatos son tu accesorio favorito elige un zapatero XL en el que puedas tenerlos todos bien colocados y no amontonados. Una estantería como esta de IKEA puede convertirse en tu mejor aliada para organizarlos.

Si tienes unas cajas de frutas recicladas, puedes tener un zapatero DIY de lo más original. Aquí ha bastado con pintarlas para darles un acabado envejecido. Puedes fijarlas a la pared o entre ellas para que queden más sujetas y evitar que se muevan. 

Esta propuesta demuestra que no es necesario disfrutar de mucho espacio para tener un completo zapatero. Aquí, han bastado cuatro estanterías organizadas con separadores para dar cabida hasta a 48 pares de zapatos. Mínimo espacio y máxima capacidad. 

Estos muebles aúnan capacidad y un diseño, en general de poca profundidad, que permite almacenar en vertical los zapatos. Sus puertas se abren hacia fuera, lo que los hace muy prácticos. Lo habitual es que tengan una capacidad para unos 6-8 zapatos por estante. 

Si vas a guardar los zapatos dentro del armario es importante que busques una forma de evitar posibles malos olores. En este caso los cajones con puertas abatibles tienen un hueco transparente en la parte frontal para poder localizar e identificar los zapatos del interior a simple vista.

Esta propuesta es tan sencilla como decorativa y práctica. Se ha optado por una estantería abierta con ruedas que se ha equipado con cajas de cartón blancas, todas iguales, personalizadas con una foto de cada par de zapatos. Una solución que permite una rápida localización de los zapatos, y a la vez, resulta decorativa por sí sola. 

Este completo zapatero se ha integrado en el armario pero se le ha reservado un módulo aparte de la ropa. Se ha organizado con un sistema de barras de acero inoxidable, que hacen que visualmente resulte más ligero. 

Ordena tus zapatos en un clásico zapatero. Puedes encontrarlo en cualquier tienda o gran superfície. Si tienes espacio en casa es una manera fácil de ordenar y guardar tus zapatos y tener un nuevo mueble en tus estancias.

 Puedes colocar los zapatos que más utilizas diariamente en una estantería de tela destinada a almacenar los zapatos. Es una manera muy práctica de tener los que más utilizas a mano y bien ordenados.Ordena por colores todo tipo de calzado, ¡así los encuentras más rápido!

Si eres de los que tiene la (sana) costumbre de descalzarte al llegar a casa, agradecerás tener un lugar donde dejar los zapatos de calle y calzarte los de casa. No necesitas un gran zapatero, pero sí un mueble que dé cabida a las zapatillas de estar por casa de toda la familia. Este, de Ikea, gracias a sus cajones y su banco a modo de descalzadora cumple perfectamente esta función. 

¿Quieres tener el doble de espacio? Con organizadores como este podrás guardar cada par en el sitio que ocuparía un solo zapato. Puedes encontrarlo en Orden en casa (set de 6 organizadores desde 16,49€).

¿No tienes espacio para los zapatos? Inspírate en esta original propuesta que ocupa muy poco espacio y aprovecha la altura de la pared para tener en orden los zapatos. Cuenta con un raíl al que se fijan las diferentes bandejas, que puedes colocar a la altura deseada. Y en cada bandeja caben uno o dos pares de zapatos, según las medidas. 

Cuando no cuentas con mucho espacio en el vestidor, una de las opciones más habituales es reservar los últimos cm a zapatero. Para que sea más accesible, opta, como aquí, por baldas que sean extraíbles. Tus lumbares lo agradecerán a diario.

Este zapatero es original, divertido y facilísimo de hacer. Para hacerlo, basta con comprar unos tubos de resina de unos 25 cm de diámetro y cortarlos a unos 35-40 cm, en función de la talla de tu pie. Para que la composición quede más colorida, elige diferentes colores de pintura que combinen bien entre sí, pinta los tubos y crea la composición deseada. Puedes fijarlos con silicona. 

Este zapatero recupera el encanto de las casas de campo británicas. Cuenta con dos puertas abatibles con capacidad para cuatro pares de zapatos cada una y una balada equipada con cestas para tener a mano las zapatillas de estar por casa. 

Aprovechar el hueco de la escalera para guardar es siempre un acierto. Aquí se destinó a zapatero con el plus de ser una solución DIY: se optó por baldas extraíbles modelo Komplement de Ikea que se instalaron a diferente altura para poder albergar desde zapatillas deportivas hasta botas, se diseñó un premarco y se iluminó todo con una tira de Leds con un detector de movimiento para que el zapatero se iluminara automáticamente. 

Esta solución resulta decorativa y de lo más práctica para tener a mano los zapatos en el recibidor. A lo alto y volado, ocupa poco y el resultado es muy original. Combina madera y lacado y se accede desde ambos lados. 

Un organizador de zapatos ajustables de plástico es la mejor opción para reducir el espacio al 50% en los estantes y tener los pares de zapatos juntos y ordenados uno encima de otro sin que se estropeen. 

Sus puertas correderas lo convierten en un gran aliado para espacios pequeños. Si se necesita más almacenaje, pueden colocarse dos muebles uno encima de otro, como se ha hecho aquí. Además, las baldas se pueden montar planas o inclinadas, en función del tamaño de los zapatos. 

 Para optimizar el espacio en tu zapatero, intercala un zapato mirando hacia adelante con el otro hacia atrás. Cuelga barras y organiza los zapatos apoyando el tacón en ella. También puedes instalar una horma de madera para los mocasines o zapatos de piel.

 Si tienes muchos zapatos y poco espacio, una solución para ordenarlos y tenerlos a mano es optar por cajas transparentes. De esta forma, los tendrás ordenados y clasificados, importantísimo para mantener el orden y la limpieza. 

En este dormitorio se salvó una columna habilitando un zapatero que aprovecha toda la altura de la pared. Cuenta con espacio para 30 pares de zapatos y 2 de botas en la balda superior, de más altura. 

Este armario del recibidor es un dos en uno: cuenta con zona para colgar los abrigos y un módulo zapatero abierto, que se integra en el lateral del armario a modo de baldas abiertas. Se ha pintado de un azul petróleo que contrasta con las paredes en blanco y le da un look estilo farmhouse. 

¿No cuentas con un zapatero al uso? ¡Invéntatelo! Aquí se han apilado varias cajas que permiten tener en orden los zapatos y, a la vez, proteger la ropa de olores y suciedad. Un consejo: elige las cajas todas iguales, ganarás más sensación de orden. 

Basta con un pequeño hueco en la zona para la ropa colgada en el armario para tener otra solución donde guardar los zapatos utilizando un accesorio organizador como el modelo Skubb de IKEA. Además, puedes usarlo para guardar otros complementos como foulards.

Con tan solo 25 cm de fondo, esta propuesta de La Redoute optimiza al máximo el espacio del recibidor, incluso los más pequeños. El mueble más pequeño mide 50 cm de ancho y cuenta con tres puertas abatibles con capacidad para hasta 6 pares de zapato cada una. 

Esta propuesta reúne tres baldas para guardar los zapatos de otra temporada en cajas, dos estantes de menor altura para las zapatillas de deporte y tres para los zapatos de tacón. Además, la parte inferior de esta estructura volada se ha equipado con una barra para colgar las botas y así evitar que se deformen. 

Esta original propuesta de Pinterest demuestra que con un poco de ingenio se puede contar con un pequeño y original zapatero. En blanco, como las paredes, se integra totalmente en la decoración y el gran tirador le da un plus decorativo.  

Destinar una zona del armario a zapatero es una solución doblemente práctica: tienes los zapatos a mano y, a la vez, separados del resto de la ropa, lo que evita que se mezclen los olores. Aquí, se ha equipado con baldas extraíbles. 

Esta propuesta DIY es muy fácil y super original. Se han combinado baldas con estanterías bajas y módulos abiertos de diferentes acabados y, como si fuera un tetris, se han organizado para dar cabida desde a botas hasta zapatos y zapatillas de deporte de todos los miembros de la familia.  

Esta propuesta es perfecta para recibidores amplios, donde poder reunir en un gran mueble los zapatos, los abrigos y demás ropa de calle. Los zapatos se han reservado para los cestos de fibras extraíbles. 

Esta propuesta realizada en plástico de resina 100% ecológico se organiza por módulos, pudiendo acoger desde 4 pares de zapatos cada módulo, en función del tamaño. Y con el plus que puede crecer fácilmente según las necesidades. La puerta es abatible, lo que facilita un cómodo acceso. Esta propuesta vale desde 68,99 € en Amazon. 

Decora y a la vez permite tener a la vista y en orden los zapatos. El sobre del mueble, además, sirve de banco a modo de descalzadora. 

 Aprovecha el espacio debajo de la cama para los zapatos de temporada o no. Pon unos cajones con ruedas o tarima dónde puedas ordenar los zapatos. Otra opción es guardarlos en bolsas compartimentadas que puedes encontrar en muchos sitios.

¿Original, verdad? Y super práctico. Aquí se ha aprovechado una antigua caja de refrescos, aún con sus compartimentos para las botellas, y se le ha dado un nuevo uso. Gracias a sus divisiones, los zapatos se mantienen en orden. 

Si te animas puedes hacerlo tú mismo, pero si no eres manitas, siempre puedes recuperar una antigua escalera de madera y reconvertirlo en un original y decorativo zapatero. 

Al pensar en soluciones para guardar los zapatos, es importante acordarse también de las botas, que necesitan más del doble de espacio que los zapatos convencionales. Aquí, la estantería doble se ha organizado con baldas de diferente altura para guardar sin problemas los diferentes tipos de zapatos. Y el banco, equipado con cajones, completa el almacenaje.  

Es el modelo Hemnes de Ikea y es un dos en uno super práctico: banco descalzadora y zapatero. Se ha aprovechado la parte inferior del banco con dos baldas que permiten tener en orden los zapatos de uso más habitual. 

Es una solución que ocupa muy poco y al contar con tapa, evita olores. Además, la suciedad que puedan tener los zapatos se queda en la caja, que es muy fácil de limpiar, y no "contamina" el resto del armario. Por su tamaño es perfecto para chanclas y ballerinas. 

Es una solución ingeniosa y muy fácil que te ayudarán a organizar y tener a mano tus zapatos de tacón. Además, los zapatos se convertirán en objetos de decoración por sí solos. Solo necesitas unas baldas metálicas, colocadas a suficiente distancia para que los zapatos no se molesten. 

Esta propuesta aúna zapatero y perchero, siendo una opción muy práctica para el recibidor. Además, su repisa puede servir de banco para descalzarse cómodamente. Las baldas en columna, de mayor altura, son perfectas para acoger botas.  

Para hacer este zapatero solo necesitas unas cajas de madera recicladas de diferentes tamaños. Píntalas de colores, como aquí, para darle un toque más divertido y juvenil y sujétalas a la pared con clavos para asegurarlas. Antes de colgarlas, haz la composición en el suelo, para ver cuál te gusta más. Si colocas algunas cajas en vertical, además de darle más dinamismo al conjunto, podrás guardar en ellas las botas.