7 claves infalibles para decorar un salón pequeño

Dónde y cómo colocar el sofá en el salón es importante. ¿Por qué? Es la pieza más grande y a su alrededor girarán gran parte de las decisiones decorativas. Por ejemplo, una distribución en U del sofá es buena idea en un salón pequeño y cuadrado. También puedes colocar dos sofás enfrentados para dar forma a un ambiente cálido y acogedor. Además, ten en cuenta la apertura de ventanas y puertas a la hora de decidir dónde irá el sofá para que puedas abrirlas cómodamente.

El gris, el beis y otros tonos neutros en el tapizado del sofá no restarán sensación de amplitud visual en un salón pequeño. Decantarse por las rayas, bien sea para el sofá o solo para los cojines, aportará profundidad visual.

Quizá te pueda parecer algo exagerado, pero elegir el sofá equivocado es uno de los mayores errores que se pueden cometer a la hora de decorar un salón pequeño. Por ejemplo, siempre es mejor que se vean las patas. Concretamente, elige un modelo con patas cónicas porque parecerá que el salón está flotando y se crea la sensación de que el espacio es más grande. Más consejos: un sofá pequeño con respaldo alto no es una buena idea. Es mucho mejor que el respaldo sea bajo y los brazos, delgados.

No te empeñes en comprar un sofá si no te encaja en el salón. Compra mejor una pieza más pequeña, como una chaise longue o un loveseat, que es una pieza muy versátil y que puede actuar como pieza de acento. Tendrás sitio para dos, pero no le restarás metros a un salón pequeño.

En la medida de lo posible, no coloques los muebles contra la pared. A mucha gente, la idea le da un poco de miedo, pero deja espacio alrededor del sofá y tu salón respirará y parecerá más grande de lo que realmente es.

Como bien sabes, los colores pastel, y en general cualquier tono neutro (blanco, crema, beis, arena), crea sensación de amplitud y luminosidad. En todo caso, si te apetece incorporar un toque de color al salón, hazlo con cuidado; mejor solo en accesorios o textiles. Pero..., ¿qué pasa si un salón pequeño no cuenta con mucha luz natural? Pues evita los colores oscuros. Úsalos solo en la pared donde están las ventanas para no restar sensación de luminosidad.

Por paradójico que parezca, en un salón pequeño hay que colocar mesas de centro o auxiliares. ¡Son imprescindibles! Especialmente en salones más estrechos, sustituye la típica mesa de centro, que quizá pueda resultar algo aparatosa, por un par de mesitas bajas de centro como, por ejemplo, las de esta imagen. Además, elige mesitas en las que puedas guardar cosas dentro. No te arrepentirás.