Una casa antigua renovada con mucho estilazo: mezcla elementos clásicos y modernos y tiene una espectacular chimenea verde (con vídeo)

En este vídeo te enseñamos el salón comedor de esta espectacular vivienda. Después de verlo, ¡disfruta de las fotos!

"Buscábamos un estilo clásico renovado, por eso conservamos algunas molduras, elegimos muebles modernos y añadimos detalles negros y dorados", explican las interioristas Odone Elorza y Elisa Martínez. Como en el salón con chimenea, que es una de las estancias preferidas de Javier. "El mueble es original de la casa. Lo pintamos en verde para darle personalidad".

"Somos cinco en casa y suelen venir amigos. Soñaba con un sofá grande", confiesa Javier. Para que no molestara, Odone y Elisa colocaron el sofá rinconera junto a la ventana y completaron la zona de estar con dos butacas. El color ayuda a que el resultado sea ligero y luminoso. El blanco de las paredes, el sofá, las butacas y las cortinas da claridad y permite jugar con colores mostaza, linos y maderas suaves. 

"En la planta baja comunicamos salón, comedor y cocina para crear un gran espacio diáfano", señalan las interioristas. Y aunque todas las estancias están abiertas, la zona de estar queda recogida frente a la chimenea. El comedor está muy bien integrado, vestido con linos suavizados y unas sillas y lámparas modernas con detalles negros. Una curiosidad: el suelo de madera lo pusieron en espiga solo en el salón y el comedor, para resaltar esta gran zona abierta. 

Y pisando la misma madera, llegamos casi sin darnos cuenta a la cocina, que se comunica con el comedor a través de una puerta de hierro y cristal. Los perfiles arqueados le dan un toque entre clásico y moderno. Desde aquí intuimos una cocina muy acogedora con isla... ¿La quieres ver al detalle?

"Para quedarnos en un color neutro entre el blanco y el gris, elegimos el mobiliario de la cocina en un tono visón clarito", apuntan Elisa y Odone. ¡Un acierto! Igual que empotrar la campana en el techo para disfrutar de las vistas al jardín, o poner cortinas en la cocina. "Nos sirven para arroparla e integrarla aún más en la casa". ¿Otro extra de calidez? Lo vemos en el office, con las sillas de madera, y una alfombra que parece natural, pero es lavable. ¡La comodidad que buscaba Javier!

En esta otra foto, vemos cómo la isla cumple con varias funciones: sirve de barra de desayunos, alberga la zona de cocción y tiene armarios con capacidad de almacenaje. Como en el salón, aparecen más detalles dorados, en la grifería, los focos del techo y el sistema de apertura tipo gola de los muebles. Y, aunque el suelo sigue siendo de madera, cambia en la zona de trabajo por baldosas cerámicas. "¡Así aguanta el ritmo diario!", aconsejan las interioristas. 

Con estos trucos, llegamos a la suite, separada del baño y el vestidor por una puerta corredera. A Javier le encanta: "Viajo mucho y me voy temprano. Para no molestar, esta distribución es muy práctica". Para dar continuidad a estos espacios comunicados, las interioristas unificaron paredes y puertas de armario en blanco y con molduras. Los tiradores negros de los armarios van a juego con los pomos de las puertas, los apliques de lectura y las mesillas de noche.

En la zona de descanso, las paredes blancas ceden el protagonismo a la ropa de cama. La combinación de verdes lavados, ocres y tonos mostaza da al dormitorio toda la calidez del mundo y un look perfecto para el otoño. El truco también está en combinar texturas: del tacto aterciopelado de la colcha, al plaid jaspeado y la funda nórdica de lino.

Como decíamos, las interioristas diseñaron los armarios a medida, hasta el techo, y pusieron molduras cuadradas y tiradores negros para darles el toque moderno. La ventana no les frenó, y aprovecharon el espacio hasta el suelo para diseñar un mueble con cajones. La alfombra viste el espacio y el puf sirve de apoyo para vestirse y descalzarse. ¡Es un básico en cualquier vestidor!

En el baño en suite, Odone y Elisa no dudaron en instalar una bañera donde está la ventana. Eligieron un mueble volado para no sobrecargar el espacio (con cajones) y pusieron un par de espejos sin marco muy disimulados. Si te fijas, la pared de la bañera solo está alicatada a medida altura. El resto está decorada con pintura. Es el truco de las interioristas para cambiar el look al baño en un futuro. 

En la butaca, las interioristas Elisa Martínez y Odone Elorza, del Estudio Martínez Elorza, que llevaron a cabo una completa reforma de esta casa antigua en Zaragoza. Junto a ellas, la estilista de El Mueble, Sol Van Dorssen.