22 ideas de decoración de Navidad para el exterior de casa más bonitas y especiales de la revista El Mueble

Este año, el árbol de Navidad puede lucir dentro del salón y fuera. Deja que el del interior se vea a través de la ventana, pero decora el porche o el jardín con uno o varios abetos. Y llénalos de luces. No necesitas colgar adornos en todas sus ramas, basta con llenarlos de diminutas lucecillas de luz cálida. ¿Te damos el truco de este encantador resultado de decoración de exterior de Navidad? Todas las bombillas tienen el mismo color o temperatura y la unidad es total.

Esto es lo que vemos en detalle en esta casa cuyo exterior se ha engalanado por Navidad. Una guirnalda de luces que enmarca la puerta de entrada, dos jaulas en los laterales con una bombilla, una corona blanca en la puerta y un árbol efecto nevado con lucecillas. El camino hasta la entrada no tiene pérdida…

Junto con las guirnaldas de luces, las velas darán ese halo mágico al exterior de tu casa en Navidad. El resultado no puede ser más encantador. Enciende velas de varios tamaños y formas, algunas ubicadas dentro de farolillos. Si quieres despreocuparte, escoge velas con llama de luz LED, de esta manera no habrá ningún peligro.

Haz que desde la entrada a tu casa ya se sienta el espíritu navideño. Incluso puede que tengas más espacios en el porche o descansillo que en el salón. Así que no dudes en sacar el árbol de Navidad al exterior. Aquí con un modelo desnudo, salpicado de luces y piñas. Cubre el pie con un trozo de tela de arpillera o lino. Y no olvides la tradicional corona de Navidad para la puerta. ¡Es perfecto el conjunto!

Esta idea de decoración navideña del exterior es idónea para los que lo dejan todo para el último momento o para los que no sienten que tienen mucha gracia decorando. Una corona vistosa cuelga de la puerta de entrada con una bonita cinta y varias velas enmarcan el paso de acceso. ¿Sabías que para colgar las coronas de las puertas venden un accesorios específicos? Son perchas alargadas que se fijan en la parte superior de la puerta y que permite colgar en ellas la corona.

Esta Navidad deja tus muebles de exterior preparados para ser usados con un rayo de sol o junto a un brasero. Saca cojines de tejidos gruesos, una alfombra y mantas para cubriros. Os va a apetecer disfrutar de ese exterior decorado. Un árbol, velas y farolillos son aquí los responsables de crear una atmósfera navideña perfecta. Nunca falla la iluminación de Navidad y su magia.

Corona en la puerta, árbol de Navidad junto a ella, farolillos y una guirnalda verde con luces que decora la zona del balcón del piso superior. Y es que no solo tienes que decorar el acceso a nivel de suelo, sino que terrazas y balcones también pueden aportan mucho. Basta con fijar o enrollar una guirnalda a la barandilla. Si cuenta con algo de verde o flores de Pascua prendidas será también decorativa y vistosa durante el día. No dudes en encargar un arreglo especial para exterior en la floristería.

Lo que coloques en ellas por el interior, decorará por fuera. No solo puedes colocar tiras de luz en el marco, perfilando la ventana, sino que colgar figuras luminosas desde la parte superior del marco o desde el techo y que caigan en la ventana, hará que desde el exterior se vean perfectamente. No podemos más que rendirnos a las estrellas con luz, de estructura calada. ¡Nos gusta decorar las ventanas de Navidad! Otra opción: los adhesivos especiales para ventanas en forma de copos y mensajes navideños.

Es el camino que da la bienvenida a casa en Navidad. ¡Cuida su decoración! Y hazlo con farolillos con velas y velas sueltas ubicadas en cada peldaño. Puedes hacerlo a cada lado del escalón si es largo o solo en un extremo, de manera que no se reduzca demasiado el paso. También puedes rellenar peceras con luces, colocar bolas de Navidad de gran tamaño de las que se rellenan con otros adornos pequeños, o flores de Pascua o arreglos de eucalipto y acebo en cestas.

Con una entrada tan acogedora como esta, cuesta incluso entrar en casa. ¿La clave? Los cojines y mantas de pelo que abrigan el banco, una invitación a sentarse bien acurrucadito a esperar a los invitados; los portavelas XXL, que contribuyen a crear esta atmósfera mágica y festiva; y los detalles navideños, como el mini árbol, la corona o la guirnalda. ¿Sientes la inspiración nórdica por Navidad en esta casa?

¡A esta entrada no le falta detalle! Una guirnalda y una corona de acebo enmarcan la entrada. Y el porche cuenta tambie´n con su propio a´rbol de Navidad, rodeado de plantas y velas. Una propuesta muy apetecible para disfrutarla durante el día, antes de que se enciendan las luces. No dudes en apostar por las plantas. Las artificiales también son una opción. Hoy hay reproducciones muy realistas.

En este porche se han usado los textiles para reforzar el look navideño: cojines con copos de nieve, corazones o con el mismísimo Santa en el trineo, mantas de estrellas... Y es que, además de decorar, los textiles son un aliado indispensable para abrigar el porche en invierno. ¡Suma calidez fuera como dentro! Aprovecha para hacerlo con estampados muy Christmas.

¿Cuentas con una camarera o un carrito para el exterior? Ese que en verano sirve para llenarlo de cócteles, ahora, en Navidad, puede ser un rincón navideño único. Aquí se ha optado por decorarlo con bolas –en jarrones transparentes y colgadas–, velas –que crearán ambiente al caer la noche– y mini arreglos florales y de verde.  

Si cuentas con un porche como este, que al estar acristalado se convierte en una estancia más de la casa, ¿por qué no vestirlo de Navidad como si del salón se tratara? Aquí no hay que recoger ni temer si se levanta aire o llueve. Se ha decorado con un gran a´rbol, guirnaldas, coronas y centros con velas que decoran sus muebles de fibras, madera y metal. Es una opción perfecta para disfrutar del exterior, resguardado y con la decoración más completa.

Este rincón es doblemente decorativo: porque viste el exterior y, a la vez, crea una bonita estampa desde el comedor. Los cestos de fibras dan calidez a la decoracio´n naviden~a y las guirnaldas de luces destacan cada detalle. Para iluminar estos elementos puedes hacerlo con guirnaldas solares que se cargarán durante el día y no consumen. Y para los elementos más pequeños como las coronas, basta con una tira de luces que funcione con pilas.

Mantas abrigadas, cojines mullidos, portavelas de madera que llenan de encanto este porche alpino y unas vistas de lujo no solo al jardín sino al salón, con su gran árbol de Navidad. ¿Qué más se puede pedir? Si hay continuidad visual entre el interior y el exterior, puede que no necesites más que disfrutar de la decoración navideña que has preparado dentro.

La Navidad también puede ser DIY. Mira esta idea: se ha decorado la trepadora con una cascada de estrellas confeccionadas con cartulinas rosas y cada una con su número, uno para cada día que falta para que llegue la Navidad. 

Sí, sí, ¡de plumas! Es una manera original y delicada de vestir la entrada de casa de Navidad. Se han aprovechado las plantas del exterior para colgar diferentes adornos, que decoran sin competir con la corona de la entrada. Nuestra recomendación: compra una corona natural (que por las variedades que trae suele secar bien y podrás aprovecharla otros años) o artificial y decórala para que sea única con flores, lazos, piñas, frutas…

Si cuentas con un amplio jardín, una manera muy resultona de decorarlo sin esfuerzo es crear un camino de luces con velas -recuerda que las de luz LED son muy seguras- o usarlas para enmarcar visualmente espacios, como se ha hecho aquí con el porche. Además de crear un ambiente mágico, servirán de divertida guía para tus invitados.

¿Cuentas con un banco en la entrada? ¡Vístelo de Navidad! Aquí se ha completado con unos cojines en gris y rojo, el color por excelencia de estas fiestas, y con un divertido reno de peluche que parece estar esperando a Santa Claus para unirse a la fiesta. Un guiño a los peques de la casa. 

Un porche de sabor tradicional como este pedía una decoración a juego, con mucho rojo y detalles en blanco, desde la decoración del árbol hasta los textiles. Para lograr ese aire campestre juega con la madera y los tejidos de pelo largo o estampado a cuadros. Añade algo de fibra como en una alfombra y disfruta del tiempo en familia.

Este es otro ejemplo de sencillez. Es la decoración interior la que también decora, quedando a la vista y expuesta a través del gran ventanal de fachada. En la puerta, unos sencillos farolillos con velas y una corona en la puerta.