Una casa para una familia numerosa completamente inspirada en las de El Mueble (con vídeo)
Muchos números de El Mueble llenos de post-its. Esa fue la inspiración de María Paz para decorar su nuevo piso ¡con toda su gran familia dispuesta al abordaje!
Periodista especializada en decoración. Directora adjunta de El Mueble
Actualizado a 27 de octubre de 2022, 13:15
La familia de María Paz crecía, ¡y parecía que su piso se encogía! Dos años se pasó buscando un nuevo hogar donde estuvieran todos cómodos (son una familia numerosa en toda regla: cuatro niños y los padres), hasta que al fin dio con este. “¡Fue amor a primera a vista! Y eso que estaba destrozada. Me llamó el de la inmobiliaria y ese día me iba fatal, pero dije 'venga, voy'. Vi la sala, la terraza y le dije: “Es este”. Me contestó 'espera a ver el resto', ¡pero yo ya lo tenía claro! Fue como de película”, cuenta aún enamorada de su casa.
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Una casa acogedora y renovada para una familia numerosa.
Una casa acogedora y renovada para una familia numerosa.
El Mueble
Una casa acogedora y renovada para una familia numerosa.
Es casi imposible imaginar que esta casa donde ahora vive una familia con cuatro hijos fuera antes una seria y silenciosa oficina. ¡Menudo cambio! Te lo enseñamos en el vídeo.
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Sofás, de IKEA. Mesa de centro, en India&Pacific. Mesa auxiliar y alfombra, en Sacum. Lámpara de pie, en Hada. Butacas, en Coton et Bois. Estores, de Imazonaestudio. Cesto, de Cabinet.
El Mueble / Pepa Oromí
Un piso con chimenea, ¿por qué no?
“Y no te lo creerás, pero es verdad. Yo iba con vuestra revista y decía 'quiero una casa El Mueble, que no sé qué estilo es, pero así es como la quiero. Todas mis ideas eran 10.000 revistas vuestras con mil papelitos pegados y luego me miraba la web y cogía más ideas”, nos cuenta (¡y nos encanta!).
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Sofás, de IKEA. Cojines estampados, de Cabinet, y los beige, de Sacum. Mesita auxiliar, de Imazonaestudio.
El Mueble / Pepa Oromí
Lleno de luz
Las interioristas Cristina Gamiz e Inés Sanchiz le echaron una mano con la reforma y la decoración, pero ¡María Paz sabía muy bien lo que quería! “Tiramos paredes para ganar luz. Veníamos de un piso oscuro y lo que queríamos era luz”, explica.
Y después de todo, sigue fiel a su espacio favorito, “el salón es lo que me enamoró. Y aquí estamos siempre, con las niñas jugando y sobre todo un momento que nos gusta es cuando ya dormimos al pequeño y estamos aquí con cuentos”. Porque lo suyo de una casa familiar como esta es que sea para disfrutarla.
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Escritorio, de herencia, restaurado por la madre de la dueña. Lámpara y silla, de Sacum. Bolsa, de LuciaBe.
El Mueble / Pepa Oromí
Una zona de trabajo en el salón
Al tirar los tabiques, el salón queda completamente lleno de luz, donde también colocaron una zona de trabajo con un escritorio de herencia y un mueble a medida con estantería y banco.
Su madre, que por cierto restaura, le aconsejó quedarse la mesa de su abuelo. “Me decía '¡esto va a quedar brutal!', y ahora es la mesa del despacho, y me encanta porque me recuerda a él”, dice la dueña.
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Mesa y sillas, de Sacum. Mantel, de Estudi Meritxell Ribe. Bandeja, de Coton et Bois. Vajilla, de Sacum.
El Mueble / Pepa Oromí
Todo unido
La ausencia de tabiques ayudó a que el comedor quedara completamente bañado por la luz que entra desde el salón y la ventana ubicada junto a la mesa.
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Mobilirio, diseño de Inés Sanchíz, de Kivik Cocinas. Taburetes, de Superstudio. Lámparas de techo, en Pluslight.
El Mueble / Pepa Oromí
Una cocina con isla
Otro lugar donde comparten mucho es la cocina. “No estaba ahí, la cambiamos de sitio, cerca de la terraza para que tuviera luz. ¡Y queríamos una isla! También nos apetecía que fuera blanco y madera porque es lo más acogedor. Mi marido también es muy cocinitas. Queríamos taburetes altos para que las niñas se pudieran poner a ayudar. Todas tienen su delantal, les encanta hacer pizzas, aperitivos... Y luego bueno, detallitos de mi madre como 'cogemos estas cajas y las restauramos'...”, dice la propietaria.
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Diseño de la cocina, del office y de la mesa, de Inés Sanchiz. Sillas, de Indian&Pacific. Mantel, de Matèria.
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Muy práctico, con office
Siempre habíamos querido un banco y una cristalera y aquí lo pudimos cumplir. Pusimos un banco grande para que cupieran todos los niños que tenemos y los que vengan y los amigos y ganamos luz con la cristalera", dice la propietaria.
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Detalle de silla de fibras naturales.
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Preparados para más
La casa les gusta tanto, que al menos por ahora aquí se quedan. “Nos gustaría ampliar visto que tenemos sitio y que podemos con más niños. ¡Ya iremos poniendo literas!”. Ay, ¡la vidilla que da una familia numerosa!
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Recibidor con mueble a medida con percheros y banco con cajas debajo.
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El recibidor está planificado para el día a día
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Funda, de Filocolore. Cojines de rayas, de Sacum, los lisos y la manta azul, de Matèria. Manta blanca, de Catalina House.
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Un dormitorio bañado de luz
El dormitorio se decoró para ser un espacio tranquilo, de descanso. En él priman los tonos claros y la calidez, especialmente gracias a los elementos de fibras y los toques de color ocres.
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Banco, en Maisons du Monde. Papel pintado, de York Wallcoverings.
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Papel pintado protagonista
El dormitorio principal cuenta con su baño en suite, donde se ha optimizado el espacio con puertas correderas. El papel no es pintado sino “con textura”. A la dueña le resultaba más acogedor.
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Banco, de Maisons du Monde.
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El rincón de María Paz
“Buscaba algo para sentarme y ponerme los zapatos. Puse este banco de Maison du Monde, con idea de pintarlo, pero al final puse papel pintado en la pared y lo dejé así. ¡Con los cajones debajo es muy práctico!”, dice María Paz.
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Mueble bajolavabo, diseño de Cristína Gámiz e Inés Sanchís. Puerta corredera forrada con papel pintado de York Wallcoverings.
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Una puerta con secretos
Una de las ideas más originales no solo fue el papel pintado que colocaron en la pared, sino que además, revistieron la puerta con él, de manera que, cuando está cerrada, el baño queda completamente escondido.
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Mesa y camas, diseño de Inés Sanchiz. Taburete, de Filocolore y sillas, de Superestudio.
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Un dormitorio infantil cambiante
A nosotros uno de los rincones que nos ha encantado es el cuarto de sus hijas. “La puerta corredera comunica la habitación de la niñas, cuando hay amigos la abrimos ¡y ahí duermen como ocho! Mi idea es que tuvieran una habitación para todas con tres camas, pero que si una crece que pueda cerrarse... O que vengan amigos y sea la superfiesta, con camas nido debajo.
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Mural, un papel pintado por Leonor Feijo-Little Hands Illustration. Colchas, de Mont Petit Nicolas. Edredón de flores, de Filocolore.
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Camas en línea para aprovechar el espacio
Las camas están en línea, y eso fue cosa mía. En todos los planos la interiorista me ponía las camas de la otra manera, pero ¡yo quería mucho sitio para las niñas! Ahí es donde jugamos, hasta hacen gimnasia ahí", dice María Paz.
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Las interioristas Inés Sanchiz y Cristina Gámiz.
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Las decoradoras responsables del proyecto
Inés Sanchiz y Cristina Gámiz, las interioristas responsables de la reforma.