Espacios pequeños

La decoradora Begoña Susaeta planificó un estiloso cabecero de doble uso. De hierro y cristal arriba, y madera debajo, sirve para ganar un vestidor, porque crea un pequeño corredor que aísla la zona del vestidor y a la vez deja que pase la luz.

Esta solución de la decoradora Marta Tobella nos encanta, porque lleva luz a raudales al baño sin tener que abrirlo al dormitorio. La decoradora eliminó la pared que comunicaba ambos espacios y la reemplazó por un tabique acristalado, que alberga la zona de ducha. Y, en el caso de necesitar privacidad, unos estores de lamas permiten darle intimidad a ambos espacios. 

Este baño es pequeñito, pero la decoradora Marta Tobella ha sabido optimizarlo al máximo con muebles a medida e ingenio. Aprovechó el murete de la cisterna empotrada de este baño pequeño para ganar un armarito alto que completa el almacenaje del mueble bajolavabo. 

El espacio de almacenaje nunca sobra. Y en pisos pequeños, ¡menos aún! Por eso la decoradora Olga Gil-Vernet aprovechó el pasillo de este piso para ganar un armario que camufló decorativamente, reproduciendo el arrimadero para que así se mimetizara con el espacio. 

Abrir la cocina al salón está en el orden del día cuando hablamos de pisos pequeños. Pero, las cocinas abiertas no son la solución magistral siempre. Prueba de ello es esta solución de la decoradora Mireia Masdeu, que planificó un murete bajo que permite comunicar ambos espacios, ganando luz y amplitud, pero sin renunciar a un punto de apoyo para los muebles bajo de la cocina y el mueble del salón. 

Este piso tiene poco más de 30 m² y se ha aprovechado al máximo con muy buenas soluciones, como la gran cristalera que separa la zona de día y de noche. Por un lado, lleva luz hacia el dormitorio y, por el otro, sirve de pared de apoyo del cabecero. 

Además de llevar el espejo de lado a lado de la pared, puedes dejar que ascienda hasta el techo. Así, el efecto de amplitud será total. Se trata de una opción perfecta cuando el baño, además de pequeño, cuenta con el mueble bajolavabo encastrado entre dos paredes. Esta es una idea de los arquitectos Fran Mengíbar y Ana Blanco. 

Si te gusta la decoración monocromática y no quieres perder calidez en tu baño pequeño, apuesta por el color beige. Y para darle aún más homogeneidad, elige un espejo con marco del mismo color que el resto de la decoración. En este baño, el contraste cromático lo aportan los apliques en negro. Este es un proyecto de Chone de la Sotilla y Patricia Palacios. 

Atenta a las dimensiones de este baño: son mínimas. Y aun así se ha empapelado con un papel pintado de motivos vegetales muy llamativo que se extiende, incluso, por debajo de la encimera del baño, que se alarga por toda la pared, aunque acortando su anchura. Y lo mismo hace el gran espejo, que se encarga de multiplicar toda la luz que entra por la puerta, contrarrestanto el efecto del estampado. Es una idea de Gabriela Conde.  

Si te decantas por un decorativo espejo redondo para tu mini aseo, es importante que elijas todos los complementos con el mismo acabado o, al menos, del mismo color. Este baño decorado por Paula Duarte hace del negro su seña de identidad. Además de en el marco del espejo, lo vemos en la grifería, en el borde del original lavamanos y la estructura del mueble.  

Un baño pequeño puede contar con dos lavamanos si la distribución lo permite. En este caso, una opción es elegir un gran espejo sobre los dos lavabos o, como ha hecho aquí la interiorista Isabel Otero, colocar dos espejos iguales que se fundan con el acabado de la pared. 

Si quieres una opción algo más decorativa al elegir el espejo del baño pequeño y no lo quieres con un marco llamativo, selecciona uno con bisel. Así reflejará más la luz. Aquí, los interioristas del Estudio Boira han dejado que sea el papel pintado floral el que sea el auténtico protagonista de este aseo. 

Lo ideal al elegir un espejo para un baño pequeño es que este ocupe, al menos, toda la longitud del mueble del baño, de manera que la imagen resulte mucho más homogénea. Para que no robe protagonismo a la decoración, elígelo sin marco. Aquí la interiorista Natalia Zubizarreta ha dejado que sean los cuadros sobre el inodoro los que se encarguen, junto con los detalles en dorado, de dar el toque personal y decorativo a este baño blanco. 

Al decorar un baño pequeño, es fundamental pensar en todos y cada uno de los elementos que le darán carácter. Si eliges una pieza con mucho peso visual, como este mueble de madera de nogal, es preferible seleccionar un espejo con un marco blanco que se funda con la pared. Este espacio fue decorado por la interiorista Natalia Zubizarreta. 

Hasta ahora, nos ha quedado claro que la mejor opción para un baño pequeño es un espejo de grandes dimensiones. Pero si no quieres que vaya de pared a pared y prefieres un espejo con marco, elige un modelo con el marco fino. En este baño, para evitar que los apliques quedaran demasiado altos, se colocaron a ambos lados de las paredes que acogen el mueble bajolavabo. Es una idea de la interiorista Bárbara Serra.  

Otra opción para un baño pequeño son los espejos redondos. Y si lo eliges sin marco su imagen será mucho más pura y homogénea, pasando casi desapercibido, ya que reflejará la pared de enfrente y hará que este reflejo se funda con el resto de la pared. Aquí las interioristas Elisa Martínez y Odone Elorza se han decantado por un modelo redondo que refleja el decorativo papel pintado y amplía el espacio. 

Además de elegir un espejo XL para un baño pequeño, si lo quieres con marco, asegúrate de que combine con el resto de elementos. En este baño, la interiorista Bárbara Serra ha seleccionado un gran espejo con marco negro, en combinación con los apliques. El mueble bajolavabo y las baldas de madera son las encargadas de aportar calidez. 

Aunque parezca una contradicción, la mejor opción para un baño pequeño es un espejo grande. De hecho, lo ideal es que sea como este, de pared a pared, de manera que refleje toda la luz que sea posible. En este baño, la interiorista Eva Baena ha colocado un gran espejo sobre el mueble de lavabo completamente encastrado entre las paredes.  

Toma nota de esta idea. En una habitación infantil pequeña con dos camas, si eliges diseños evolutivos (con estructuras que amplían en longitud su tamaño) ganarás centímetros mientras los niños son pequeños. Esto te permite incorporar una zona de estudio o juego, muebles o armarios. Y con el tiempo, "hacer que crezcan" las camas. Quién sabe si en unos años, cambiaréis de casa o separaréis a los hermanos en dos habitaciones.

Esta toma cenital de una habitación pequeña muestra cómo esta distribución con dos camas en ángulo saca partido al espacio. La zona central queda despejada. Lo ideal es no saturar las paredes. A cambio es posible diseñar a medida estructuras altas que ofrezcan espacio de almacenamiento debajo del colchón con cajones y puertas.

Misma idea de espacio pequeño con dos camas en ángulo, cada una con su estructura que gana en anchura (más de los 90 cm convencionales de una cama individual) para incorporar una zona de almacenaje estrecha a modo de zócalo alrededor de las camas.

Los apartamentos ganan mucho cuando se tiran tabiques. En los espacios pequeños las paredes compartimentan en exceso, haciendo más oscuro y angosto cada lugar. Así que en estos casos, anímate a tirar tabiques. Hay razones de peso. Aunque el sofá quede cerca del frente lineal de la cocina en este proyecto de 32 metros cuadrados, imagina el espacio con una pared divisoria entre ambos ambientes. ¡Nada que ver!

Otra excelente idea para aprovechar los pasillos en pisos pequeños es esta que nos brinda Marta Tobella. La interiorista ha colocado en la pared unos estantes superiores de almacenamiento y un tablero que sirve de barra de desayunos. Son prácticos y aportan ligereza. Este office improvisado queda separado de la cocina por una puerta corredera.

Si tu recibidor es tan pequeño que no cabe una consola o un aparador, mira cómo se las ingenió aquí Asun Antó para decorar esta entrada. Una consola mini volada sirve para guardar móviles y llaves gracias a sus dos cajones. En el suelo, una cesta para objetos más grandes y en la pared un espejo que amplía el espacio.

Aprovecha la decoración de las paredes para crear un efecto óptico de amplitud, además de lograr un espacio sereno y elegante. ¿Cómo? Con un zócalo con cuarterones pintado del mismo tono que la pared. Recuerda que los colores más claros harán que los recibidores pequeños y estrechos se vean más grandes. Las molduras le darán personalidad y un aire señorial al espacio.

Una intervención que no puede faltar en la reforma de tu recibidor es un buen lavado de cara. Crea un fondo neutro con paredes pintadas en un color claro y luminoso y, después, añade detalles en madera y fibras naturales que aporten dinamismo y calidez. Los recibidores en blanco y madera son acogedores y muy estilosos. 

Decorar la pared del recibidor con una composición de espejos está muy bien, pero una vez metida en obras… ¿por qué no revestir el frente de espejo y así aumentar la sensación de amplitud y luminosidad? 

En ese caso, no lo descartes, pues no hay duda de que tu recibidor ganará carácter y personalidad. Eso sí, busca soluciones que aligeren el resultado final: elige tonos claros para el suelo, alterna paredes y rodapiés en blanco y decóralo con pocas piezas, a ser posible también en un acabado claro.

En casas unifamiliares, una idea estupenda para que la luz natural inunde el recibidor es sustituir un muro por una espectacular superficie acristalada como hizo en esta casa la decoradora Catalina Alós. Esa conexión con el exterior también te ayudará que se se vea más grande y lleno de vida.

Si eres reacia a unir habitaciones para crear un solo ambiente, opta por instalar una puerta corredera que te permita conectar e independizar los espacios según las necesidades del momento. 

Si a la falta de metros, le sumamos una planta irregular o la presencia de retranqueos, la cosa se complica aún más. Solventa este pequeño inconveniente con un mueble a medida integrado en la pared. En este caso, el diseño incluye un cubreradiador a modo de consola, que se ha lacado en el mismo gris que el resto del mueble. 

Seguimos apostando por la idea de sustituir el tabique que separa el recibidor del salón por un cerramiento acristalado, pero esta vez con perfilería negra para dar a la estancia un look moderno. Así lo hizo la decoradora Marta Noguera Trias en esta vivienda, quien, además, logró potenciar el estilo actual con las piezas elegidas para la decoración del espacio: un gran espejo redondo en la pared y un banco de líneas rectas y depuradas, acabado también en un tono oscuro. 

Además de las piezas estrechas y visualmente ligeras, los diseños hechos a medida son siempre la mejor opción para resolver la decoración de espacios pequeños. Y si no fíjate en el recibidor de esta casa, de planta estrecha y alargada: un frente se ocupó con un mueble que recorre la pared y que incluye un banco, perchas y un estante superior, y justo enfrente, armarios para aprovechar el hueco de la escalera.

Una solución para crear un efecto visual de amplitud es sustituir los tabiques tradicionales por un cerramiento acristalado. Y si buscas potenciar su valor decorativo, opta por un diseño con cuarterones. En el caso de que la estancia contigua sea la cocina, piensa en un cerramiento que combine una parte inferior opaca para poder apoyar el mobiliario sin que la trasera quede a la vista.

Tira tabiques para que el recibidor se vea como una antesala del salón. Al unir estas dos estancias, además de lograr mayor sensación de espacio, ganarás en comodidad. Después, si quieres que ambas estancias queden bien delimitadas, bastará con decorar la pared del recibidor con un papel pintado o bien pintarla de un color diferente al de las demás. Y a la hora de buscar los muebles para recibidores pequeños, ya sabes: mejor que tengan poco fondo y un diseño ligero.

Ahora que vas a diseñar un nuevo recibidor no te olvides de incluir soluciones a medida que optimicen los metros y te permitan ganar espacio de almacenaje. Armarios a medida o con huecos para guardar, cajas y cestas... Toda solución es buena para que un recibidor pequeño sea también práctico. 

¿Pensabas que los papeles pintados con efecto textil solo pueden decorar las paredes de salones y dormitorios? Esta cocina, diseñada por la interiorista Natalia Zubizarreta, demuestra que es un recurso ideal para dar calidez también a la cocina. Lo ha combinado con unos muebles blancos y un antepecho que imita al mármol. ¡Vaya combinación!

En un baño pequeño también tiene cabida el papel pintado. Las mejores opciones son los vinílicos o TNT (tejido no tejido), que son impermeables y aguantarán la humedad. Combinado con un revestimiento porcelánico te aseguras de su efecto deco. 

Como has podido ver en las imágenes anteriores, uno de los recursos que se empleó en este baño fue colocar el mismo revestimiento porcelánico en la encimera, el suelo y las paredes. Así el baño parece más amplio de lo que es. 

Como se puede apreciar en el plano, aunque el baño cuenta con dos senos en el mueble de baño, uno queda justo a la misma altura del inodoro. 

Uno de los inconvenientes de un baño pequeño es la apertura de la puerta. Por eso, si no hay espacio suficiente, lo mejor es colocar el inodoro de manera que no se dé al abrir la puerta. 

En el plano de este baño con ducha se puede ver cómo los espacios que necesitan mayor intimidad están separados por puertas abatibles. 

En este baño, se colocó un murete separando la ducha del lavamanos, de manera que se ha prescindido de colocar la mampara. De hecho, la zona de la ducha queda completamente oculta. El blanco ayuda a multiplicar la luz y los detalles en negros aportan un look moderno al baño. 

Otro recurso en baños pequeños es colocar un inodoro suspendido y con la cisterna empotrada. Así se elimina el ruido visual y la imagen del espacio es mucho más limpia. 

Ten en cuenta que para que una ducha sea cómoda ha de tener unas dimensiones de 60 x 60 cm como mínimo o ducharse será incómodo. En cualquier caso, nuestra recomendación es que el ancho sea, como poco, de 70 cm. 

Si no quieres un baño blanco, aunque sea pequeño, elige un modelo de azulejo estratificado con brillo que refleje la luz sin prescindir del color. En este caso se ha elegido un color topo que aporta un look atemporal y moderno. Cabe destacar también la mampara corredera, con perfiles encastrados, lo que aporta un look más limpio.