Duchas

Sin mamparas, sin cortinas, sin cabina, una ducha a ras de suelo. ¿Sueñas con tenerla? Inspírate en este baño donde la ducha y la bañera exenta se situaron una junto a la otra, ofreciendo la máxima libertad de movimientos. En el suelo y la pared de esta zona, el pavimento de gresite evita problemas de humedades.

Hay tradición y modernidad, porque las interioristas han combinado azulejo y microcemento en un juego de texturas. "Para dar calidez, el pavimento que elegimos fue un suelo parecido a la madera, pero mucho más resistente. Lo pusimos hasta en la zona de ducha", indica Loreto. "Por otro lado, la mampara de cristal y hierro negro da personalidad a la estancia", añade. 

Si decorar en color azul es definitivamente lo tuyo, ganarás un baño muy dulce y luminoso con el azul cielo. Combinado con unos azulejos tipo metro en blanco, como en este baño, el ambiente aún cobrará más luz. Esta mezcla es idónea para baños con estilo campestre y vintage, así que para el suelo te recomendamos escoger unos azulejos con mosaicos como colofón.

Lo bueno del gris suave es que refuerza la luminosidad de los baños sin ser el 'típico color blanco'. Además, es igual de sencillo de combinar con todo tipo de mobiliario, aunque ya sabes que la madera es, por descontado, el material con el que ganarás mayor calidez. ¡Alucina con lo bien que queda en las vigas vistas!

Oro, dorado o latón, tonalidades metalizadas que, aunque arriesgadas para algunos, son espectaculares para otros. Es otro de esos acabados que rompen y marcan. No tienes que abusar pero unas notas en la grifería y algún aplique harán que se note la diferencia.

Por separado, cada zona puede hacer que sea el foco de atención de un baño espectacular. Pero se sale de lo corriente aún con más fuerza si "juntas" bañera exenta y ducha en el mismo espacio. Puedes crear una cabina para la ducha y exhibir la bañera o ubicarlas a continuación en línea o en paralelo, bañera tras ducha.

Porque este elemento dará elegancia y actualidad al baño, haciendo que pase de corriente a espectacular. Una mampara de barrotillo forma cuarterones o cuadrados en el cristal. Todo del mismo tono que la perfilería y puede ser en negro, blanco o dorado, tan de tendencia. Como consejo, escoge un diseño en el que el barrotillo quede integrado en el vidrio para que la limpieza sea más sencilla.

¡Infalible! La baldosa hidráulica o el cerámico que imita este tipo de acabado siempre es impactante a nivel visual. Su presencia aporta personalidad. Así que harás que quede espectacular con un revestimiento de baño hidráulico de motivos y patrones repetitivos. Llévalo al suelo, a una pared o reviste solo una zona de un frente. Hay tantos diseños que podrás jugar con el estilo (desde más retro o rústico a actual y óptico).

También se denomina enrasado. Es un truco que dará continuidad al baño. Puedes optar por un plato a ras de suelo. Hoy los materiales sintéticos permiten que los platos tengan color, no solo el blanco de la porcelana. O bien puedes optar por un suelo continuo de microcemento que revista también la zona de la ducha, como aquí.

Piensa en conjunto y, sobre todo, en materiales y acabados que casen en pareja. Es decir, elige los revestimientos de suelo y paredes como si fueran un mismo elemento. Para que casen. Solo así crearás una base perfecta que hará que tu baño no se sienta corriente sino espectacular. Busca el contraste o genera unidad entre paredes y suelo.

En baños muy pequeños, apostar por una balda flotante es un recurso de lo más acertado, ya que ayuda a que el espacio parezca más ligero y a su vez ofrece una zona de almacenaje muy útil. Al quedar a la vista, ¡es fundamental que prestes atención a la decoración! Haz como en la foto y elige una bonita cesta de fibras naturales para guardar las toallas y otros accesorios.

Este baño está pensado para ser compartido, porque cuenta con dos zonas de lavamanos gemelas que flanquean el paso abierto a la gran ducha de obra. El arquitecto ha aprovechado los muretes en los que se apoyan los muebles para prescindir de la mampara, creando un baño integrado y con sabor a campo. 

En duchas XL, como la de este baño proyectado por Cris Afán de Ribera y Loreto Balbuena, una solución práctica y muy decorativa es optar por un panel fijo acristalado. Te ahorras la perfilería, que siempre "mancha" el vidrio, y logras un look más minimalista, diáfano y moderno. 

Esta ducha es doblemente cómoda. Por un lado, por sus generosas medidas y, por el otro, porque al llevar las dos grandes puertas batientes hasta el techo, resulta más hermética, lo que evita salpicaduras y ayuda a preservar mejor la temperatura. 

Esta solución, ideada por la decoradora Marta Tobella, es súper eficaz si cuentas con un baño contiguo al dormitorio que no tenga ventana o disfrute de poca luz natural, ya que conviertes una pared en un gran vano de cristal, inundando este espacio de claridad. Para que tanto el baño como el dormitorio disfruten de intimidad, basta con instalar un estor de lamas por el lado de la zona de noche.   

La ducha de este baño, proyectado por la decoradora Paula Duarte, ocupa todo el año del espacio y cuenta con un banco para sentarse. Por sus medidas es perfecta, incluso, para ser compartida. El juego de blanco y negro le da un contrapunto actual a una ducha con vocación de spa. 

Si puedes llevar la ducha de pared a pared, como ha hecho en este baño la decoradora Paula Duarte, ¡no lo dudes! Ten presente que deberás dejar un paso de al menos 60 cm libres frente a la ducha para poder acceder con comodidad. Si vas justa de espacio, opta por una corredera, como aquí. 

Este baño, proyectado por Sube Interiorismo, se ha decorado para ser tan práctico como cálido y acogedor. Y la escogida combinación de materiales ha sido clave, con papel pintado y un porcelánico con efecto mármol en la zona del lavamanos, y una madera cerámica en la pared de la ducha, que da un toque actual y de contraste y suma calidez. 

A grandes males, ¡ingeniosas soluciones! Y esto es lo que hizo la decoradora Marta Tobella con este baño: tirar de ingenio. ¿Te has fijado en la ducha? Es estrecha y alargada, por eso la decoradora ubicó la grifería empotrada al fondo, y así ganó una zona más completa para ducharse cómodamente, hasta el punto que prescindió de la típica mampara al uso. De hecho, esta es meramente decorativa. 

Este baño tenía los metros para disfrutar de una ducha cómoda, perfecta para el día a día, pero también para contar con una bañera. Así que la decoradora Natalia Zubizarreta no lo dudó. La clave fue distribuir estos dos elementos en paralelo, con la ducha en primer plano. La bañera se ha colocado sobre el mismo pavimento de la ducha, que es con el que se ha unificado todo el baño. 

La decoradora Paz de Tord llevó el verde del mueble a la pared de la ducha, creando un look moderno, casual y fresco. El murete tiene una doble función: sirve de apoyo del mueble y de la mampara fija. El acceso, para mayor comodidad, es mediante una puerta abatible.  

Este baño es pequeñito, pero se han cuidado al máximo todos los detalles. Empezando por la gran ducha, a la que se ha llevado el mismo suelo del baño a modo de plato, creando un espacio totalmente continuo. La mampara, metálica y con cuarterones, suma estilo y personalidad.  

Al igual que 1 metro cuadrado es suficiente para crear una ducha en un baño, lo es también para ganar un refrescante espacio en la terraza. Tendrás una ducha de exterior que puedes delimitar con un murete bajo o un biombo. 

De 100 x 100 cm. Un plato de ducha muy cómodo. Así que es una manera de aprovechar 1 metro cuadrado en el baño y que haya un hueco para colocar al lado un armario en el que almacenar toallas y botes de repuesto.

El mármol sigue siendo tendencia absoluta en revestimientos. Para ganar un baño de aires modernos, apuesta por líneas limpias y definidas y utiliza el mármol, por ejemplo, como frente del mueble bajolavabo, le darás un aspecto muy pulcro y elegante.

Si estás pensando en reformar el baño para adaptarlo a los niños, ten en cuenta su estatura a la hora de elegir el mobiliario. De este modo, serán más independientes y aprenderán desde pequeños la importancia de ser ordenados.

El microcemento está de moda, si buscas un baño indiscutiblemente moderno, este es tu material. Colocado de forma continua y mezclado con detalles en madera y la presencia de plantas, genera ambientes fluidos y muy frescos, 100% atemporales.

También puedes reinventar el aspecto de los azulejos en espiga eligiendo un color diferente. El azul cielo es estupendo para el baño, ya que transmite serenidad y resulta muy luminoso además de moderno. Si no dispones de muchos metros cuadrados, construir una o dos hornacinas en la ducha también te ayudará a ganar almacenaje de una manera supersencilla y estéticamente bonita.

Instalar dos lavabos en el baño principal os ayudará a aprovechar más el tiempo en el día a día (sobre todo por las mañanas). Si, como en este baño, también contáis con vuestros propios cajones para guardar accesorios y productos, las ventajas se duplican. Nos gusta cómo queda la mezcla de las paredes blancas con la grifería y los apliques en negro mate, le da un toque moderno y actual a la par que vintage gracias al suelo hidráulico. Contar con (al menos) un punto de luz natural también ayuda.

Aquí te mostramos otra diseño de un baño con ducha y bañera. Sin embargo, con esta idea no perderás ni un solo metro a nivel visual. Piensa que al optar por una mampara transparente, la vista no se topa con ningún obstáculo. Los colores claros y neutros, junto a la madera, también contribuyen a ganar espacio y mucha luz en el baño.

¿Tu baño es amplio? Entonces, no tienes motivos para renunciar a una ducha y una bañera: una para los momentos de relax y otra para el día a día. Si te apetece probar con un baño moderno, puedes instalar una mampara fija que cumpla su cometido y a la vez actúe como divisor de ambientes. Los revestimientos de microcemento encajan a la perfección con la perfilería negra metálica de aires industriales. Para evitar que el conjunto resulte muy frío, no olvides añadir elementos de madera como el mueble bajolavabo.

De obra, amplísima y acristalada con paneles fijos. Así podemos definir la cabina de ducha en este baño. El material de las paredes y el suelo, Silestone de color blanco, aporta luminosidad y contrasta con el pavimento de madera del resto del espacio. Un rincón de relax blanco y puro que invita a ducharse.

Otra forma de cerrar una ducha de obra es hacerlo con un muro construido en ladrillo y revestido con el material elegido para el resto de las paredes. El baño de la imagen lleva un revestimiento cerámico de color blanco que aporta luminosidad al espacio.

Seas o no fan del minimalismo, seguro que te apasionan los baños limpios, serenos, en los que se respira calma. En ellos, la ducha se convierte en un espacio de líneas puras y rectas, sin perder ni una pizca de encanto. Como la de la foto que se ha revestido en microcemento de color arena y acabado irregular, y se cierra con una sola pantalla de cristal fija. La grifería empotrada contribuye a transmitir sencillez y ligereza.

Lejos de ser un elemento antiestético, la mampara puede convertirse en el foco de atención de la ducha si decides poner una especial. Como la de la imagen, un diseño con cuarterones y perfiles negros, que combina de maravilla con el suelo de patrón geométrico y la presencia de la madera en la encimera y el marco del espejo.

Si las mamparas te parecen un estorbo y crees que no son tan importantes, puedes prescindir de ellas y dejar tu ducha abierta, pero lo cierto es que evitan salpicaduras de agua hacia el resto del espacio. En caso de elegirlas, tienes un amplio repertorio de alternativas: transparentes, con o sin perfilería, fijas, abatibles o correderas, etc.

Una ducha amplia y sin escalones que limiten el acceso se convierte en la opción más atractiva para evitar accidentes. Así ganas en comodidad y estilo, ya que los suelos continuos resultan elegantes y decorativos. En la imagen, la zona de ducha queda separada por sendos muros de obra que no llegan hasta el techo para no interrumpir el paso de la luz natural.

No importa cómo sea el espacio en el que quieres instalar la ducha. Si te decides por una de obra, será posible. Este tipo de instalaciones se realiza a medida, incluso cuando el hueco es angosto, muy pequeño o con techo abuhardillado, como en la imagen. Las mamparas de cristal se pueden encargar.

A la hora de hacerte con una ducha de obra tú tienes la llave del diseño. Puedes crear espacios sencillos y elegir los materiales y colores que prefieres. La ducha de la imagen está revestida en microcemento blanco, un material resistente e impermeable. Contrasta, además, con la grifería negra, de tendencia total, y los cerramientos de las ventanas, del mismo color.

En un baño pequeño puede darse que solo haya 2 elementos (más un aseo) o 3 con ducha, inodoro y lavabo. Conviene intentar que frente a la puerta de acceso quede la zona más estética, que suele ser el frente del lavabo. El inodoro, mejor en una zona más íntima, por uso y porque no es la pieza más bonita. En este mini baño, se ha colocado el lavabo en una posición central y ducha e inodoro a cada lado.

Este baño cuenta con puerta corredera, un detalle que también concede amplitud y metros reales (al menos 1 metro cuadrado) a la estancia. En una pared se sitúa lavabo e inodoro (este queda semi oculto por el mueble) y, al fondo, la ducha. Precisamente una planta alargada favorece la ubicación de la ducha tal y como se ha hecho en este proyecto.

¿A quién no le gusta estar calentito en el baño? Estos toalleros radiadores son ideales. Instalados en la pared, apenas ocupan espacio. Los hay eléctricos y de agua, en acabado metalizado o lacados en negro y blanco, como el que ha elegido la interiorista Begoña Susaeta en este baño.

"Este baño alargado y estrecho era todo un reto", explica Jorge Moser, de Moser Mur Arquitectura. El inodoro y la ducha logran su intimidad mediante un panel fijo que lo separa de la zona del lavabo y una puerta de vidrio que permite el paso de luz. Dos armarios, diseñados por el decorador, flanquean la encimera. Gracias a ellos y a la grifería empotrada se mantiene despejada la superficie.

Son las señas de identidad del baño de casa de la interiorista Paula Duarte. "El revestimiento de mármol ya estaba, y lo actualicé al combinar dos modelos geométricos en blanco y negro para el suelo. El negro también está presente en la mampara, los espejos y en pequeños detalles, como los tiradores de concha vintage", apunta Paula. 

"La idea de este baño era conseguir una atmósfera acogedora, pero que a la vez resultara muy limpia", explica la interiorista Maria Just, autora del proyecto. El revestimiento porcelánico es de color piedra y la ducha, de 175 cm x 80 cm, se hizo a medida con una mampara casi invisible.