Bañeras

El estilo de la bañera, junto con las molduras del revestimiento de la pared y las originales cortinas, llevan la calidez a este baño puramente blanco bañado por la luz. Mira el resto de este piso de estilo gustaviano.

Una bañera exenta es ya un reclamo para la mirada, pero si, además, va situada en un espacio destacado su protagonismo escalará posiciones, como en este minimalista y acogedor dormitorio con bañera. Alucina con el resto de esta casa de ciudad.

Disfruta de un relajante baño ante al paisaje que ves a través de los grandes ventanales. Eso sí, mejor si dan a una zona privada, los cristales son efecto espejo o tu casa es un ático.

La arquitectura estilo de este dormitorio con baño, predominantemente clásica, contrasta con las líneas orgánicas de la bañera, más contemporáneas. Un ejemplo de mezcla de estilos infalible.

Tener una bañera no significa que haya que prescindir de una rápida y cómoda ducha. Al clasicismo de la de este baño –en impecable blanco– se suman los detalles en dorado, entre los que destaca la barra de cortina curvada, muy retro, y la alcachofa en el techo.

Para darle color a tu baño con bañera exenta, elígela con faldón. En este caso, de un gris amarronado luce unas molduras acentuando, aún más, el aroma a casa de campo que desprende este bucólico baño.  

La mesita auxiliar es una opción, pero otra –que ocupará menos espacio– es una bandeja sobre la bañera. Servirá para apoyar el gel, el champú o un libro mientras te das un relajante baño. ¿Ideal, verdad?

La otra opción para las bañeras exentas es un grifo en la pared, aunque entonces sí o sí debe ir colocada junto a una. Es la mejor alternativa en baño pequeños en los que no se quiere renunciar al confort que aporta una bañera.

Las de hierro fundido son las más tradicionales. Son resistentes y el hierro hace que la temperatura del agua se mantenga durante más tiempo, además de absorber el ruido que hace el agua al llenarse.

También se las llama independientes o en isla. Son aquellas que no van empotradas en ninguna pared o esquina. Destacan porque roban el protagonismo a cualquier otro elemento del baño, convirtiéndose en el centro visual.

Si la bañera está rodeada de cantos rodados, gana aún más protagonismo y sensación de estar en un auténtico y relajante spa.

Si la bañera está lejos de la pared, querrás tener la toalla cerca. Un toallero de pie será la solución para llevarlo al lado de la bañera que tú quieras.

Esta antigua rectoría reconvertida en vivienda tiene todo lo que uno podría desear: materiales recuperados con una decoración moderna, como la bañera exenta de este romántico baño.

Si además de disfrutar de un relajante baño, puede hacerse bajo la luz del sol, la sensación será increíble. Y en este moderno y acogedor –gracias a los estores beige, la alfombra de fibras y la banqueta de madera– baño blanco, mucho más.

Aunque son algo más caras que las encastradas, la inversión merece la pena si te gusta disfrutar con frecuencia de un baño de espuma.

¡Quién tuviera esas vistas para poder colocar una bañera así! Esta, en el exterior y mirando al océano, tiene todo lo que se necesita para un baño relajante. Mira el resto de este paraíso bajado a la tierra.

Aunque la de este romántico baño es blanca, también pueden tener un acabado metalizado, con aroma a antiguo. ¡Y cómo no! Ya que este tipo de bañeras son un auténtico viaje en el tiempo y para los sentidos. Mira el resto de esta casa recuperada.

Aunque, sobre todo, dependerá de la toma de agua, si estás proyectando el baño desde cero puedes ponerlo donde quieras: a los pies, a uno de los lados o como en la imagen.

En este ostentoso y espectacular baño todo parece sacado de un palacio. Desde la bañera con patas, pasando por la lámpara de araña y llegando hasta la pared acristalada con efecto envejecido. Y el resto de este piso madrileño piso, luce la misma elegancia. Pasen y vean.

Si las dimensiones de un baño lo permiten, además de una bañera exenta, destina también un espacio para una ducha. Para evitar que tenga demasiado peso visual y le robe protagonismo a tu bañera, mejor con la mampara de cristal y fija.

Una bañera exenta ofrece mucha más libertad en el diseño de la zona de baño, además de una instalación más sencilla y rápida. Y para este dormitorio con baño ofrece más ligereza y dinamismo que una encastrada a la pared. Inspírate con el resto de este baño situado tras un cabecero.

En este baño de líneas minimalistas y líneas supermodernas, el ritmo y el dinamismo proceden de la redondez de la increíble bañera exenta y el lavabo sobre encimera. Por cierto, ¿a que no parece que este baño esté en una casa de campo en Ibiza?

Si quieres una bañera exenta, no es necesaria una gran obra, tan solo una toma de agua para instalar la grifería. También tendrás que tener en cuenta la posición del desagüe para ubicarlo en el punto exacto.

Que no, que no hay por qué renunciar a una bañera independiente aunque el baño sea de reducidas dimensiones. Encajada al fondo y con una cortina –para usarla también a modo de ducha– se puede disfrutar también de un baño de burbujas.

Para acentuar aún más el protagonismo de una bañera exenta, pavimentos y revestimientos juegan un papel fundamental. Y sirven también para separar una zona de otra.

Para no privarse de los rayos de sol que entran por la ventana, elige unas cortinas venecianas: permiten regular la luz que entra gracias al giro de sus lamas.

Es una de las ubicaciones más habituales de las bañeras exentas. Ofrece la oportunidad de disfrutar de un baño con vistas y bajo la calidez de los rayos del sol, pero para más intimidad, coloca un estor. Descubre el resto de esta casa de fin de semana.

…puedes acceder a ellas desde cualquiera de sus lados. Son, además, piezas escultóricas con especial protagonismo que transforman cualquier baño. 

¡No sabemos qué tienen las bañeras con patas que nos fascinan! No pasan de moda y dotan de encanto a tu baño. Y sumada al espejo con marco dorado y el mueble de madera maciza contrasta con el toque actual que aporta el color gris grafito de su exterior. 

Uno de los inconvenientes de las bañeras exentas es que no tienen espacio sobre el que apoyar los productos de higiene personal. ¿Otra solución? Si va junto a la pared, una estantería de obra es una opción estupenda para tener todo a mano cada vez que te relajes en tu superbañera.

Una particularidad de las bañeras exentas es que no suelen tener una superficie en la que apoyar las cosas mientras te das un relajante baño. Una mesa auxiliar es será el aliado perfecto para apoyar un libro o colocar una vela aromática.

La luz que entra por el enorme tragaluz es fundamental para los enormes cactus plantados sobre un manto de piedras. Llena el baño de luz y de un toque exótico que contrasta con la contemporaneidad del vaso y la grifería en negro.  

Una bañera exenta tiene la habilidad de convertir un baño en un spa. Son elegantes, sofisticadas y dotan de un punto de distinción. Combinar sus líneas modernas con la calidez de la madera en el techo, suelo y pared es un acierto seguro. 

Aunque es de obra, esta bañera integrada en el dormitorio, se erige como protagonista. Gracias al acabado en color arena del microcemento, se dota a la bañera de una calidez que no tendría en su acabado tradicional en gris. 

Juntos pero no revueltos. En este baño, proyectado por Natalia Zubizarreta, la mampara con perfiles en negro sirve también de separación entre la zona de baño –formada por una bañera exenta sobre un enorme plato de ducha– y la de aseo. 

Las bañeras exentas con patas dotan de un toque retro a cualquier baño gracias a sus patas contorneadas y en relieve que levantan el vaso del suelo. Aunque sus diseños se han actualizado sin perder su esencia, siguen siendo sinónimo de personalidad, estilo y clase.

Lo habitual en las bañeras exentas es que el grifo sea alto y de suelo. Después el estilo lo marcará el de la propia bañera. ¿Más clásico o de líneas depuradas? ¿Cromado o en negro? Crea contraste entre una bañera más clásica y un grifo moderno, como en la imagen. 

Pueden ocupar un lugar central en el baño y con espacio para circular a su alrededor, como si de una isla se tratara. También pueden ir colocadas junto a la pared, aunque sin ir pegadas. 

Los nuevos materiales permiten unos acabados cálidos y suaves al tacto al mismo tiempo que pueden experimentar con nuevos y modernos diseños.

Este tipo de bañeras son también señas de identidad en baños contemporáneos y más actuales, en los que triunfa un aire minimalista y de líneas sencillas. Y el suelo de cantos rodados funciona como una alfombra, creando una zona delimitada. Inspírate con el resto de este piso con una luminosidad increíble. 

¡Y que no falla nunca! Es elegante, romántica y con muchísimo encanto. Y el efecto se ve acentuado por las molduras, la increíble lámpara de araña, el lavabo con dos patas –¡precioso!– y el suelo de parqué en espiga. Un baño en esa bañera debe ser como viajar en el tiempo. Mira el resto de este clásico piso madrileño.  

Sí, ¡también el baño! No es necesario que lleves el árbol de Navidad al baño, pero sí puedes contagiar del espíritu navideño esta estancia de la casa. Basta con hacer un mini centro con velas o bolas de Navidad para decorar la encimera, o colgar una corona en la puerta o, como aquí, en la ventana. Elige una cinta que sea bonita y realzarás aún más la corona.  

Las velas no son exclusivas de las decoraciones navideñas, pero con sus juegos de luces y sombras ayudan y mucho a crear atmósferas acogedoras y mágicas, que es lo que buscamos especialmente en estas fechas. Si tienes niños pequeños o no quieres arriesgarte, opta por velas tipo led. Hoy en día las hay de muy logradas, que reproducen fielmente el parpadeo del fuego y sus tonalidades. Incluso las hay de cera natural.