Cómo limpiar el baño de una manera ecológica (y fácil)

Se puede aplicar a todas las estancias y la explicación es muy sencilla. Si empiezas limpiando el suelo y luego el polvo se cae lo volveremos a ensuciar. Así que primero limpia las zonas altas, como espejos y azulejos. Las juntas de los azulejos se limpian bien con agua, vinagre y lavavajillas. 

Para una limpieza a fondo. Primero, espolvorea 1 vaso de bicarbonato. Rocía por encima 2 vasos de vinagre blanco de manzana y deja actuar 15 minutos. Echa agua hirviendo por encima y pasa la escobilla.

Solo tendrás que tirar 4 cucharadas de bicarbonato en el desagüe y, a continuación, verter un vaso de vinagre blanco. Verás que sale espuma. Deja que actúe 15 minutos y luego vierte una olla de agua hirviendo y de sal gruesa. Arrastrará la suciedad.

El bicarbonato es tu aliado contra la cal. Pon abundante bicarbonato en una esponja y pásala por toda la mampara sin presionar para que no se raye. Después acláralo con una bayeta empapada en vinagre blanco. También puedes usar KH7 Baños Antical ECO. Previene la cal, perfuma y da brillo

La ginebra y el vodka no solo abrillantan la grifería, también repelen el polvo y hacen que permanezca más días limpia. Otra opción muy económica es echar un chorrito de vinagre. Si el grifo tiene mucha cal empapa un paño con él y déjalo actuar 10 minutos. Luego, seca con un paño.

Lo primero es identificar de qué está fabricada. Si es de madera debe evitar el agua, con un trapo húmedo será más que suficiente. Cada dos o tres meses aplica un aceite especial. Si la encimera es de granito (piedra natural) echa mano del bicarbonato disuelto en agua para desinfectarla.

Tus toallas y albornoces deben ponerse a secar tras cada uso para no acumular humedad. Lávalas sin suavizante: es mejor con agua, bicarbonato y vinagre, que desinfectan, suavizan y eliminan malos olores. Sacúdelos antes de tenderlos para soltar las fibras y que estén más suaves.

El agua, los geles... pueden ir dejando 'huella' en tu bañera y crear un antiestético cerco. Para evitarlo, pasa una esponja con jabón después de cada baño. Si detectas alguna marca de óxido, la puedes eliminar frotando con sal y zumo de limón. Este cítrico también es un efectivo antical.

El suelo es lo último que debes limpiar. Queda perfecto si lo friegas con agua con un chorro de vinagre. Aunque el vinagre no deja olor, si prefieres una fragancia más agradable puedes añadir al agua unas gotas de aceite esencial o de suavizante. Si el suelo está muy sucio puedes poner, además, un poco de lavaplatos al agua.

con menos productos y objetos tu baño será más rápido de limpiar. Intenta mantener la encimera despejada. Prima los productos de higiene naturales, como las pastillas de jabón. Ahorrarás dinero y tendrás menos envases de plástico en el baño. Así limpiarlo será más sencillo. Deja los tarros y los botes cerrados y, preferiblemente, dentro de alguna cesta o cajón.