Sillas

Si te gusta la estructura de unas sillas clásicas pero su tapizado está muy deteriorado, siempre puedes retapizarlas. Es lo que ha hecho aquí la interiorista Fanny Iniesta. Se ha decantado por un tejido de cuadros en blanco y negro que sube de nivel la decoración del comedor. Con un mantel liso de lino, sin duda, los asientos son las auténticas estrellas.

Aunque se suele optar por el mismo acabado para todos los elementos a la hora de renovar un armario por dentro, en su reforma, si escoges módulos sin puertas, sí es estético combinar dos acabados diferentes: uno para la "caja" en sí del armario y otro para cajones y baldas, como en este vestidor.

Si bien las ventanas influyen en este aspecto, también el aislamiento de paredes y techos, incluso, el suelo si se trata de un piso bajo. Es una buena reforma para hacer antes del invierno y así no perder calor. Al igual que revisar el tema de las humedades. Aislar con lana de roca, por ejemplo, ronda los 30-40 €/m², aunque el precio final dependerá del tipo de solución y de cómo se instale (por ejemplo, con cámara de aire se puede insuflar lana de roca).

¡Tachánnnnn! Aquí está la sorpresa. Un office que queda semi oculto y para que no esté tan oscuro, la luz natural se cuela por la ventana abierta en el escritorio. La mesa y las sillas son todo un icono del diseño. Una zona ideal para improvisar cenas más íntimas. ¿Crees que el banco tiene almacenaje en su interior? ¡Bingo! Sí, lo tiene.

Si quieres sumarte a esta tendencia, elige muebles de formas redondeadas y líneas sencillas. Los diseños curvilíneos transmiten la sensación de comodidad y confort que busca esta tendencia decorativa.

Decorar las sillas con coronas de abeto es una de esas tendencias eternas que año tras año nos ayudan a recrear un estilo tradicional que nunca falla.

Aunque vivas en el centro de la ciudad, puedes recrear un estilo navideño inspirado en las casas de montaña. Una mesa de comedor de madera rústica, sillas de fibras, un mantel de lino... y completar el look con coronas, guirnaldas y centros de mesa con hojas y ramas. Las velas también son imprescindibles.

Cuadrada y rectangular son las más habituales, pero también hay mesas de centro redondas y ovaladas. Algunas irregulares o amorfas. ¿De qué depende escoger una forma u otra? Del espacio y la composición de estar en función del resto de muebles. En los salones más pequeños, las mesas circulares son más ligeras al prescindir de esquinas. Las formas orgánicas también "suavizan" un conjunto de líneas rectas.

El color gris, en todos sus matices y tonos, aporta equilibrio, es luminoso, elegante, sofisticado… ¡Lo tiene todo! Y aunque combina con todos los colores, su complemento perfecto es el blanco. Juntos destacan y crean decoraciones luminosas, sobrias y equilibradas.

Este año lo hace en tapicerías, más que en las paredes. Y al ser neutro encaja bien con cualquier otra tonalidad. El gris claro (RAL 9018) es más luminoso pero frío. El gris intenso (RAL 7037) resulta personal. Una buena combinación es con rosa. Aunque el más claro es el que más vemos en la tendencia de la temporada, hay una versión fresa (RAL 4002) que se acerca al granate que resulta buena opción para caldear los ambientes más fríos.

Esta cocina es cálida y acogedora y el papel pintado que reviste las paredes contribuye y mucho a ello. Para sacarle el máximo provecho al espacio, la decoradora Asun Antó ubicó en la zona central el office. La madera de la mesa y las sillas, enmarcada por una alfombra muy natural, transforma la cocina es un espacio muy cosily.

Esta cocina no va sobrada de metros, pero sí de soluciones ingeniosas. "Era muy oscura, así que abrimos una ventana en la pared que da al distribuidor, y ahora tiene luz natural y contacto visual con el salón", explica la decoradora Asun Antó. Además, optaron por un mobiliario muy discreto, con los frentes lisos y sin tiradores, y aprovecharon la distribución en "U" de los muebles para separar la zona de la cocina del office. Además, prolongaron la encimera unos centímetros y así ganaron una barra que además sirve de práctico pasaplatos para el comedor de diario. 

A esta cocina no le falta de nada. Cuenta con mucho espacio para guardar al integrar armarios altos, tiene un isla central de trabajo equipada con armarios, estantes, una zona de vitrina y una pequeña vinoteca; y adosada a la isla se ha habilitado un office muy práctico. El suelo de mosaico da la nota de color a una cocina con un total look en blanco.  

Esta cocina, proyectada por la decoradora Asun Antó, es blanca, atemporal, luminosa y abierta a la zona de día. A su vez, cuenta con mucho espacio para guardar. De hecho, se ha planificado el mobiliario en "L" y hasta el techo y para aligerarlo visualmente se han combinado módulos tipo vitrina, que además dan un toque más acogedor. La isla, además de la reunir la zona de fuegos y contar con mucho espacio de almacenaje, integra una zona de barra muy práctica. 

El office es una de las estancias que mejor resume el mix de tradición y modernidad, con esa mesa redonda antigua recuperada, la original lámpara hecha con tela de saco, la alacena contemporánea y el ventanal XL metálico y en negro. 

Esta casa en Cantabria, por eso se decidió cerrar el porche para así poder disfrutarlo durante todo el año. Las paredes acristaladas lo inundan de luz y le dan un look de invernadero, que lo hace muy acogedor. 

"Las vigas y el cerramiento acristalado hacen que la cocina de por sí ya sea espectacular, por lo que la decoración debía ser neutra y sencilla, con pocos muebles", explica la decoradora. La única concesión es el suelo, con un original juego de dameros en gris y blanco que da personalidad a este espacio diáfano. El mismo tándem cromático lo vemos en la mesa y las sillas del comedor. No te pierdas el resto de espacios de esta casa.  

Te lo dice Sol, y es que las lámparas de grandes dimensiones son las que cobran protagonismo este otoño. Sobre todo las de fibras naturales como estas, perfectas para introducir en el comedor, salón o incluso en los dormitorios.

Los bancos se han convertido en un recurso superútil para equipar el office o el comedor, sobre todo si cuentas con poco espacio. Además de ofrecer más plazas de asiento, un banco da más juego a la hora de sentarse, sobre todo si hay peques en casa; permite guardar en su interior, si lo diseñas tipo arcón; y gana 40 cm respecto las sillas, porque puedes arrimar la mesa a unos 40 cm de la pared, mientras que las sillas necesitan unos 80 cm libres. 

“La crisis del Coronavirus ha generado la necesidad y el deseo de permanecer en un hogar lo más adaptado y ergonómico posible, para lograr un confort óptimo. La tendencia en 2022 será, por tanto, mantener a las personas en casa el mayor tiempo posible y desarrollar mecanismos y diseños que optimicen la comodidad y la facilidad de uso”, exponen desde Mobalpa. En el diseño de la cocina se traduce en espacios para compartir, con espacio para todos y lugares en los que sentarse aunque no se esté cocinando. Incluso, teletrabajar desde un rincón de la cocina.

Banquetas y bancos. Esta es la recomendación que nos dan desde Mobalpa para planificar el espacio de la cocina, y concretamente del office integrado, conforme a las tendencias 2022: "permiten ganar espacio y crear así una zona de comedor más amplia. Se ahorran centímetros, ya que el asiento se integra en la pared. Puede convertirse también en un mueble para almacenar debajo del asiento".

A la hora de diseñar una cocina, pensando en lo que se llevará en 2022, trata de dar protagonismo a las sensaciones que percibes a través del sentido del tacto. A ello nos invitan desde Ábaton. "El sentido del tacto toma protagonismo, encontramos acabados suaves en encimeras, cantos redondeados, maderas cepilladas…"

Como hemos visto, al tender a espacios ordenados y cómodos, no es raro que los diseños depurados se impongan en los muebles de cocina. En este sentido, no hay que olvidar que lo mejor es integrar los electrodomésticos para que no queden a la vista. Y en los que no se pueden ocultar, como la campana, ya hemos señalado que la tecnología juega a favor de integrarla en la encimera o placa, o encastrarla en el techo.

Con esta idea se separa la cocina del salón cuando la primera se integra por completo. La idea es crear un elemento de separación de gran tamaño para que delimite visual y espacialmente sin cerrar. A la isla central se adosa una mesa de comedor, que puede convertirse en office o en el comedor principal de la estancia. Las lámparas de techo sobre la zona de la mesa ayudan a crear más un límite visual. Una cocina abierta perfecta.

Una librería o estantería sin trasera es un buen elemento para separar ambientes. De nuevo lograrás delimitar con una solución estética y práctica. Al no tener trasera, la continuidad visual y el paso de la luz no se cortan. Es una buena idea para usar en un recibidor, como en este proyecto.

Sin obras y de la manera más sencilla, cómoda y estética posible. Es una idea similar a la que comentábamos sobre el uso de varios pavimentos. Una alfombra o varias te ayuda a delimitar los espacios y a separarlos visualmente, concediéndoles unidad. Lo que queda dentro de la alfombra es un ambiente en sí mismo.

¿Conoces este término? La pintura sectorizada en un concepto que se aplica en decoración y que sirve para usar la pintura y el color para delimitar espacios. Bien aplicando un tono diferente en la pared principal de un ambiente o bien usándola para definir o enmarcar un mueble concreto en una pared. Es lo que se ha hecho aquí a través del verde para separar el escritorio.

El espacio libre que quedó bajo la escalera de peldaños volados se aprovechó para ubicar el comedor. Al estar junto a una ventana que da al jardín la luz entra a raudales y se multiplica por el blanco de las paredes. Las sillas de diseño, la propia escalera de micromortero o la leñera vertical hasta el techo son todo un ejemplo de modernidad. 

Cuando no se tiene espacio hay que ser ingenioso. En el lado de la bancada se dispuso un pequeño comedor con una mesa plegable fijada a la pared capaz de albergar hasta tres comensales. Las aberturas en el muro hacen posible que la luz circule sin obstáculos. Al fondo se ve la cocina.

La mesa de madera diseñada por el interiorista es capaz de acoger a 10 comensales. Las sillas antiguas se decaparon ligeramente para enfatizar el estilo rústico. Llama la atención la lámpara de techo con damajuanas suspendidas, un original diseño firmado también por Pablo González.

Moderniza tu dormitorio creando una zona de trabajo. ¿Qué no te cabe? ¿Estás segura? Aprovecha el espacio bajo la ventana para improvisar un escritorio luminoso. Fija una balda a medida a modo de superficie, coloca una silla ¡y ya lo tienes! Además, en cuanto guardes el ordenador, podrás utilizar la mesa a modo de tocador. Y todo, en poco más de diez minutos.

El color naranja es propio del otoño y de las hojas de los árboles. Llévalo a tu mesa con un mantel de lino para que su textura arrugada se convierta en protagonista, y que su tonalidad aporte la calidez necesaria al comedor.

Como ya ha comentado alguna interiorista, la madera oscura regresa. La veremos en mesas, pero también en sillas. Para Lucía Mariñas, las sillas de madera oscura ya son una de sus piezas de otoño más deseadas. ¿Sus favoritas? Las sillas tapizadas a rayas. "Me gustan porque son cálidas, funcionales y de líneas curvas". 

Al derribar los tabiques de la zona de día, se ganó un espacio amplio y diáfano con la cocina, pequeñita y blanca y en "U", el comedor adosado a uno de sus laterales con un banco con cajones para sumar plazas y almacenaje, y el salón, junto al ventanal. 

El naranja Adobe que Pantone nos propone para este otoño tiene un toque de marrón, por lo que resulta muy cálido y llena de vida las estancias. Puedes hacer como en este comedor y llevarlo a tu hogar mediante textiles como este precioso mantel de lino para comer en compañía de los tuyos.

Úsalas en todas las estaciones, tanto en verano como en invierno. En el salón son ¡imprescindibles! Crisantemos y hortensias aportan rosas viejos y naranjas, ideales para conseguir ese punto cálido que buscas. 

Y si en el salón la decoradora ideó un sofá convertible, en el "comedor", que ha creado literalmente en el pasillo del recibidor, ha diseñados dos mesas rectangulares con ruedas que pueden juntarse o, como en la imagen, separarse y, arrimadas a la pared, sirven de escritorio doble. Descubre el resto de soluciones ingeniosas de este piso.