Muebles de salón

Sin duda, el tabique que separa la zona de día de la de noche es el gran acierto de este piso. La arquitecta Mar Marcos lo proyectó multifunción: por el lado del salón es un banco que completa el estar y con espacio para guardar. Y,en la zona de los dormitorios, un estudio para dos personas con armarios altos. La parte central de este tabique es un cristal fijo para llevar luz natural al dormitorio infantil y la zona de trabajo. No te pierdas el resto de ideas de este piso. 

Este sofá modular en forma de "U", con un módulo rinconero y uno chaiselongue, delimita visualmente el espacio del salón, con un gran mueble que combina madera en acabado natural y lacada en negro. 

Armarios para guardar en el acceso a la terraza, un mueble de televisor muy capaz, un sofá confortable, mucha luz ¡e incluso una chimenea! Qué más se le puede pedir a este salón, reformado por completo por el equipo de Nook Architects. 

El salón es pequeñito, pero se ha equipado con muebles que aúnan varias funciones para que sea más práctico. Así, el sofá se transforma en cama para recibir invitados, el puff es tipo arcón con almacenaje y la butaca del rincón de lectura puede sumarse a la tertulia cuando se necesite para ofrecer más plazas de asiento. 

¿No te cabe una alacena al uso? ¡Apuesta por una esquinera! Pensadas para aprovechar un rincón de la casa, son piezas muy prácticas en salones de pocos metros, ya que apenas ocupan espacio y ofrece mucho almacenaje. Aquí se ha usado como apoyo al rincón de lectura. 

La decoradora Bárbara Sindreu aceptó el reto de convertir una oficina viejuna, oscura y compartimentada en un loft moderno y super luminoso. Para empezar eliminó todas las separaciones, dejando un espacio amplio y diáfano donde salón, comedor, cocina y dormitorio conviven en total armonía. Y lo tiñó todo absolutamente de blanco, lo que multiplicó la luz y la sensación de amplitud. 

Más allá de las paredes, la decoradora Begoña Susaeta combinó a la perfección en este salón el blanco y la madera en el mobiliario, creando una propuesta moderna y atemporal y a la vez personal y cálida, ya que la madera no solo es el contrapunto cálido, sino también el elemento "rompedor" y de contraste. 

La decoradora Bárbara Sindreu se alió con el blanco para regalar mucho espacio en este salón sin con ello renunciar a la luz ni a la ligereza visual: paredes, techos, sofás, muebles, estores... Con excepción del suelo, un pavimento de madera rústico que la decoradora eligió precisamente para contrarrestar la frialdad visual de un espacio monocolor. ¡Qué maravilla!

Era lo que le pedía la propietaria a su nuevo piso. Y la decoradora Asun Antó supo darle esa marcha extra de calidez con una cuidada selección de textiles y una paleta cromática escogida: "Con los textiles, además de dar textura y calidez, dimos color a unos espacios que eran muy monocolor", explica Asun.  

El mix de estilos está presente en toda la casa. De hecho, la decoradora destaca que a la hora de elegir el mobiliario tuvieron muy presente equilibrar las dos almas de la vivienda. Y como ejemplo nos menciona la butaca del salón, "porque aunque es un diseño actual, el terciopelo le da esa elegancia clásica", resume. 

Así ha proyectado este salón Dara Díaz, en perfecto equilibrio: el frío del metal convive en armonía con la calidez de la madera y la fibra, materiales encargados de subir la temperatura. 

La madera envejecida sin tratar transmite nostalgia por otros tiempos y formas de vida. En este salón la impresionante cómoda de almacenaje de estilo rústico —que bien podía pertenecer a un sastre— contrasta con la sencillez del mueble de televisión de diseño más moderno. Ese contraste del blanco y la madera, de lo viejo y lo nuevo, hace que este salón gane en equilibrio y calidez.

En estancias pequeñas debemos ser mucho más cuidadosas con el orden. Cada cosa tiene que estar en su sitio y tiene que haber un sitio para cada cosa, como diría Marie Kondo. En este salón se ha conseguido gracias al mueble ligero de la televisión con un espacio cerrado para guardar y otro abierto para dejar los pufs, cuando no se utilizan. ¿Más soluciones de almacenaje? Una cajonera de patas altas que le da estilazo al salón.

"En un rinconero es básico que las paredes en las que se apoya el sofá formen un ángulo de 90º para que encaje el módulo de la esquina", sostiene Natalia Zubizarreta. 

"Si cuentas con un rincón de 250 x 180 cm ya podrás disfrutar de un sofá rinconero cómodo", sostiene Miki Beumala. Si, además, quieres aligerarlo visualmente, Miki recomienda optar por un diseño que prescinda de uno de los brazos laterales, "una tendencia cada vez más habitual". También ayuda elegir un sofá con las patas vistas, siempre se ve más liviano, y optar por tapicerías de colores claros.

Esta cómoda, inspirada en los antiguos muebles de oficio, destaca por su sabor muy natural con la madera envejecida sin tratar y su gran capacidad de almacenaje, gracias a sus 12 cajones. 

Toda reforma es un cambio, pero las hay que le dan totalmente la vuelta a una vivienda. U oficina, como en este caso. Y es que este loft, tan blanquito, moderno y con luz a raudales, era un despacho lúgubre y compartimentado. Pero aún así, la propietaria le vio las posibilidades y con la ayuda de la decoradora Bárbara Sindreu convirtió su visión en realidad. 

Del local comercial que fue ya no queda nada, pero Andrea recuerda la aventura que supuso transformarlo en la vivienda que es ahora. Empezando por los trámites y siguiendo con las obras. Llegaron incluso a retiraron el piso unos metros para poder ganar la actual terraza, y abrieron el ventanal del salón de pared a pared. ¡Quién lo ha visto y quién lo ve!

En este salón proyectado por Marta Prats se ha optado por una decoración actual que se ha completado con toques industriales, como el gran cerramiento de hierro que separa el salón del comedor, o el mueble que integra la chimenea y el leñero, también de hierro.  

Este mueble del televisor es mucho más que eso. Además de albergar el televisor, cuenta con una balda decorativa y dos grandes cajones gaveteros que ayudan a mantener en orden el salón. Y con el mismo fin se ideó el hueco a la medida de los dos puffs. Así, cuando no se usan, quedan integrados en el mueble sin ser un estorbo. ¡Qué gran idea!

Es un poco como ignorarla. Coloca delante una butaca y olvídate de que está ahí. El salón volverá a ser un lugar de reunión y largas conversaciones y abandonaréis la sensación de que se ha convertido en una sala de cine.   

Gracias a este mueble a medida, realizado por Molins Design, la televisión se esconde tras un panel cuando no se utiliza. Una solución discreta que oculta al cien por cien la televisión. 

Una de las mejores ideas para esconder la televisión es un mueble a medida que lo integre todo. Desde la librería hasta la chimenea, pasando por la tele, por supuesto. Así se hizo en este acogedor piso, en el que se proyectó un gran mueble de pared a pared.

Tradicionalmente relacionamos la decoración con muebles oscuros con estancias en las que predomina el clasicismo, con piezas de gran peso visual y mucho volumen. Pero, en realidad, los muebles en maderas nobles o lacados en colores como el gris o el negro se adaptan a la perfección a ambientes más contemporáneos. De hecho, son el aliado ideal para crear contraste y dotar de calidez.

Una cómoda es una solución fantástica si quieres aunar estilo y almacenaje en el salón. Esta de la imagen en madera recuperada y con múltiples cajones se ha colocado junto al mueble de la televisión, de factura moderna, jugando al contraste. Un par de cuadros, un flexo de madera XL y objetos de cerámica la decoran.

Más allá de las consideraciones estéticas, no solemos prestarle mucha atención a los reposabrazos del sofá. Y esto, sobre todo en salones pequeños, es un gran error. "Hay sofás que cuentan con unos reposabrazos muy gruesos que acaban restando espacio útil al asiento", sostiene la decoradora Natalia Zubizarreta. En este sentido, la decoradora recomienda apostar por diseños con reposabrazos discretos que, además, harán que visualmente el sofá pese menos. 

El decodificador, el DVD o un home cinema quedan bastante mal encima del mueble de la tele. Busca uno en el que haya almacenaje para no tener a la vista los aparatos ni los cables. Los hay que vienen ya con los agujeros en la parte trasera.

Si el mueble para la tele tiene un espacio debajo para poder almacenar los puffs o asientos extra, ganarás en comodidad y funcionalidad. Es una solución extra decorativa y que dotará tu salón de un aspecto ligero y acogedor.

Están supeditadas por el tamaño de la televisión. Y tanto va apoyada como si está suspendida en la pared, el mueble ha de ser algo más grande que el aparato para conseguir un resultado simétrico y equilibrado.

Los muebles de pared a medida son una genial alternativa que ofrece un resultado completamente integrado en la decoración. Ofrecen mucho almacenaje y muy discreto y los hay que vienen con un panel que oculta la televisión, como en el salón de la imagen. 

“Hay que escoger un mueble para que la televisión quede a la altura de los ojos, con lo cual, el mueble se verá condicionado por el tamaño de la televisión”, matizan desde la tienda deco online. Si eliges un mueble de televisión muy bajo y el sofá está alejado, será incómodo. Igual pasa si el sofá está muy cerca de la televisión y el módulo es muy alto, tendréis que levantar la cabeza para verla, una postura molesta.

“Lo primero que tenemos que hacer es ubicar la pared donde va el mueble, ya que si hay algún reflejo puede ser molesto”, nos explica Alberto Torres, gerente de PortobelloStreet.es.

Tanto si cuentas con pocos o muchos metros, este error conviene evitarlo siempre. Es básico favorecer el paso de la luz natural dentro de casa, por lo que conviene despejar de muebles altos las ventanas y elegir telas livianas y poco pesadas para vestirlas. Si no te queda más remedio que apoyar el sofá en la ventana, apuesta por un modelo con el respaldo bajo y evita los sofás muy mazacote. 

Este piso de Barcelona pasó por las manos de dos equipos de interiorismo diferentes, que dieron lo mejor de cada uno para lograr una casa moderna pero acogedora y pensada para disfrutarla. Así, Molins Design le dio forma al piso y Coton et Bois, el alma y la calidez que la propietaria quería. ¿El resultado? No tiene desperdicio.