Tener los cuchillos bien afilados es fundamental. No solo nos hace ahorrar tiempo en la cocina, ya que podemos trocear todo más rápido, sino que también es más seguro. Al contrario de lo que pueda parecer, es más fácil cortarse con un cuchillo que no esté correctamente afilado que con uno que corte mucho. Esto se debe a que uno con el filo gastado puede moverse por accidente al no clavarse bien en el alimento que estemos cortando y acabar impactando en nuestros dedos.
Por eso, de vez en cuando merece la pena dar un repaso a nuestros cuchillos y tenerlos siempre a punto. ¿Hay que llevarlos siempre a un profesional? En el caso de los cuchillos más comunes no es necesario, lo podemos hacer nosotros en casa siguiendo alguno de los métodos que te proponemos a continuación. Para cuchillos más profesionales y caros sí que merece la pena que nos los afile un afilador o cuchillero.
Métodos y utensilios para afilar cuchillos en casa
- Piedra de afilar. También llamadas piedras de agua. Son la forma más efectiva de afilar un cuchillo. Hay de distintos granos y es fácil encontrar piedras de dos caras. Cuanto menor sea la medida, más gruesa es la piedra. Para afilar se recomienda utilizar un gramaje de entre 1000 y 4000.
- Chaira. La chaira, al contrario de lo que se suele pensar, no sirve para afilar, sino para mantener el filo o asentarlo tras el afilado. Por eso, se recomienda utilizarla cada vez que usemos el cuchillo.

Para cortar alimentos duros siempre utiliza un cuchillo muy bien afilado.
ANA GARCÍA/RBA
Cómo afilar un cuchillo con una piedra de agua
- Moja muy bien la piedra. Puedes meterla debajo del grifo durante unos 20 o 30 segundos o sumergirla en un recipiente con agua durante unos minutos.
- Dispón la piedra sobre un paño y vuelve a humedecerla.
- Sujeta el mango del cuchillo con una mano y la parte superior de la hoja apoyando encima los dedos de la otra mano.
- Coloca el cuchillo en perpendicular a la piedra con la hoja inclinada unos 20º sobre esta.
- Realiza movimientos hacia adelante y hacia atrás siguiendo todo el recorrido de la hoja.
- Repite la operación por el otro lado de la hoja.
- Pasa el cuchillo por la chaira de arriba a abajo varias veces por ambas caras para asentar el afilado.
Trucos para afilar bien un cuchillo:
- Si se seca la piedra, vuelve a humedecerla. Nunca debe secarse del todo.
- Intenta realizar siempre las mismas pasadas de un lado que del otro.
Cómo afilar un cuchillo jamonero
El jamonero es uno de los cuchillos imprescindibles con los que tenemos que contar siempre en casa. El proceso de afilado es el mismo que aparece en el punto anterior para todos los tipos de cuchillo. La particularidad del cuchillo jamonero es que no hay que inclinarlo, sino pasarlo recto o con un ángulo muy bajo sobre la piedra.
Para ello, es mejor presionar con los dedos sobre la hoja. Así evitaremos que quede un bisel que nos impida cortar bien el jamón. Puedes usar primero una piedra de gramaje 1000 y luego una 5000 o la chaira para asentar la hoja.

Todos los tipos de cuchillos han de afilarse una vez al mes.
PEPA OROMÍ/RBA
Trucos caseros para afilar un cuchillo en casa
Si no tienes una piedra de agua para afilar tus cuchillos puedes recurrir a alguno de estos trucos caseros.
- Lima de uñas. Funciona bastante bien para afilar los cuchillos más básicos. Hay que colocar la hoja un poco inclinada y pasarla varias veces en direcciones distintas.
- Un canto rodado cualquiera. Si tienes una piedra de río a mano también puedes utilizarla para afilar tus cuchillos de manera puntual.
- La base de una taza de cerámica. Pasa el filo del cuchillo varias veces y con cierta inclinación sobre la parte que esté sin pintar de la base de una taza.
¿Cómo saber si un cuchillo está bien afilado?
Para saber si has conseguido afilar tu cuchillo hay una forma de probarlos rápidamente y de forma segura.
Sujeta un folio en vertical con una mano y con la otra trata de cortarlo desde arriba y colocando el filo en perpendicular al folio. Corta hacia abajo. ¿Ha funcionado? Entonces ya tienes tu cuchillo como nuevo.
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