Productos naturales como el limón, la sal, el vinagre o el bicarbonato son tus mejores aliados a la hora de dejar el baño reluciente y perfectamente limpio de manera saludable. Te contamos cómo hacerlo.
Eliminar la cal con vinagre
Para que la mampara del baño esté siempre como nueva conviene aclararla con agua cada vez que se utilice la ducha. Si es de cristal, lo mejor es secarla con un paño que no deje pelusa o una espátula limpiacristales que elimine los restos de agua y evite que, al secarse, las gotas dejen cerco en el cristal. Cada semana conviene repasar la mampara con una esponja empapada en vinagre blanco que ayudará a eliminar los restos de cal que puedan quedar. Cuando las mamparas son rugosas o de material plástico quedan muy bien con una mezcla de amoníaco, alcohol y agua a partes iguales. Frótala con la ayuda de un cepillo suave, aclárala y sécala con un paño.
Mármol sin manchas
Un baño con encimera y revestimientos de mármol es bonito, elegante y no pasa de moda. Pero para mantenerlo impecable necesitará de tu atención y cuidado porque el mármol es un material poroso en el que las manchas, cuando penetran, son muy difíciles de eliminar. Debes evitar que sobre la encimera se derramen colonias o aceites. Pero si te ocurre, lo mejor es limpiarlo inmediatamente: si el mármol está bien pulido bastará con que pases un paño o una servilleta de papel, pero después te convendrá utilizar un jabón neutro, aclarar y secar bien para que quede como nuevo. Si las paredes también son de mármol, pásales un paño con una mezcla de agua oxigenada y amoníaco a partes iguales. Luego, sécalas con un paño para que queden brillantes.
Toallas: usa poco suavizante
Las toallas quedan perfectas lavándolas con agua tibia y un detergente neutro. El aire caliente de la secadora las deja más suaves y mullidas, pero si no la tienes puedes utilizar una pequeña cantidad de suavizante. No pongas demasiado para que no pierdan absorción. Lava juntas y por separado las de colores fuertes similares, sobre todo si utilizas agua caliente.
Secar bien las jaboneras
Las jaboneras de plástico o de loza se limpian bien con jabón. Para las de madera irá bien frotarlas con unas gotas de vinagre antes del aclarado. Todas, y muy especialmente las de acero inoxidable, hay que secarlas a fondo después del lavado para evitar que se formen manchas por restos de cal.
Sal para la cortina de la ducha
Aunque las cortinas del baño se aclaren después de cada ducha, si son de un material lavable lo mejor es meterlas en la lavadora al menos una vez al mes para evitar la formación de hongos. La parte inferior es la que más se ensucia y la que se deteriora con más rapidez: para limpiarla puedes frotarla pasando una esponja con bicarbonato de sodio y aclarar después con agua salada. El agua oxigenada es otro remedio que también resulta eficaz. Y para evitar que se sigan ensuciando por el moho que se produce debido a la humedad que se genera en el cuarto de baño, lo mejor es ventilar esta estancia lo máximo posible y utilizar sal para aclarar la cortina.