El secreto está en agrupar los libros por género, usar archivadores para revistas y saber cómo colocar los objetos decorativos. Mira nuestras ideas. Te ayudarán ¡y mucho!
Los libros definen los huecos
Planifica la distancia entre los estantes en función de los libros que tienes. Puedes hacerlo con una librería a medida o con una de baldas regulables.
Todas las medidas
Los libros de lectura necesitan una altura de 25 cm; las revistas 35 cm; y los libros de gran formato, 45 cm. Para todos, con un fondo de 30 cm basta.
Su mejor ubicación
Lo más cerca que puedas de la zona de lectura. Elige una pared alejada del sol directo y la humedad, que deterioran los libros. Quita el polvo regularmente y haz una limpieza en profundidad dos veces al año.
No los guardes todos
Lleva los libros que ya no quieras a bibliotecas o asociaciones o participa en redes de intercambio (bookcrossing).
El orden, de abajo a arriba
1. En la parte de abajo
Una zona de armarios es muy práctica para guardar documentos y facturas. Los importantes, mejor bajo llave.
2. En el centro
Ten a mano (entre los 70 y 170 cm) los libros de más consulta. Usa como mesa auxiliar la balda a la altura de la butaca.
3. Arriba del todo
Es el lugar ideal para guardar los tomos más voluminosos y los libros que consultes esporádicamente.
Cada cosa en su sitio
Archiva los documentos con etiquetas
Guarda tus papeles
y facturas dentro
de archivadores y carpetas. Ten uno para cada tema (casa, colegios, médicos...)
y ponles nombre para localizarlos más rápido.
Cestos para los CD
Tienen el tamaño ideal, unos 15 x 15 cm, para reunir tus CD favoritos. Guárdalos siempre en sus cajas.
Pequeñas colecciones de cristal
Son un punto de luz dentro de la librería. Combina velas y pequeños jarrones con flor.
Los libros, por género y todos igual
Clasifícalos por tema
Coge todos tus libros y agrúpalos por género (novelas, guías, cocina...). Después reúnelos por autor y colócalos intercalados junto con otros objetos. Si puedes, organízalos por tamaño.
En el mismo sentido
Haz que los lomos de todos los libros miren hacia el mismo lado: queda más estético y es más fácil encontrarlos. Lo mejor es colocarlos en una única fila.
Pon algunos planos
Te ayudan a aligerar un poco la librería y sirven de base para apoyar objetos encima, como fotos o portavelas. Hazlo con libros grandes.
Si guardas revistas
Agrúpalas por temática (decoración, moda, viajes, salud...) y reúnelas en archivadores abiertos. Guarda a la vista las de un par de meses y el resto en un lugar cerrado, a salvo del polvo.
Decora con complementos y un toque natural
Una gran librería llena de libros resulta pesada a la vista. Para evitarlo, combínalos con otros objetos que rebajen su presencia y, además, hablen de ti. Fotos, recuerdos de viajes, iniciales, pequeñas esculturas..., todo vale. Eso sí, para que el resultado sea armónico es importante que tengan algún elemento en común como el color o el material. Y no te olvides del toque natural de plantas y flores.