No te lleves ni el cargador del móvil porque aquí solo lo necesitarás para consultar la ruta que te llevará a estos destinos. Una vez allí, apágalo y disfruta del paisaje, de sus estancias confortables y decoradas con mimo, del sonido de los pájaros y de la gastronomía de la tierra. ¡Planazo!
En primer lugar te recomendamos La Finca del Monasterio: un complejo rural que parte de la casa solariega del médico del pueblo a la que se añadieron dos construcciones de nueva planta llenas de encanto. Situado junto a la Reserva Nacional del Saja y el Monte de Canales, el tranquilo municipio cántabro de Silió regala la belleza de sus tierras verdes y una tonificante calma.
Y si la tradición y el arte te apasionan, visita el sueño hecho realidad de Josetxo y Luis: una antigua fábrica de embutidos de un pueblo de Salamanca, donde sus propietarios crearon el hotel de sus sueños, confortable y sofisticado. Es La Casa de la Sal, un soplo de autenticidad y tradición.
Te invitamos a visitar la galería para saber más de estos lugares tan especiales.

Vamos de escapada
Dos hoteles rústicos con muchísimo encanto