Este armario es el sueño de cualquier pareja. Es un diseño de Velafusta compuesto por dos frentes en "L" que aprovechan al máximo la planta cuadrada del vestidor. Cada frente tiene dos armarios, de 80 cm de ancho, que cada miembro de la pareja ha organizado según sus necesidades de espacio y su ropa.
Muy ligeros: Para que no resulten pesados los armarios se han lacado en blanco y combinan puertas con cuarterones, con otras acristaladas y enteladas. Además, no llegan hasta el techo lo que permite aprovechar la parte de arriba con cajas para guardar la ropa de otras temporadas.
Con mucha luz: El vestidor tiene mucha luz natural gracias al mueble a media altura que lo "cierra". Por un lado, es un perfecto mueble zapatero y, por el otro, sirve de base a la zona de tocador.
Una completa zona de tocador
La mesa de tocador tiene cajones para lo más pequeño y un espejo integrado. Junto a ella, se han aprovechado las paredes para organizar los complementos: los fulares en barras y los collares en colgadores.
El armario para ella
En el armario de una mujer se guarda mucha ropa, pero también muchos accesorios (bolsos, fulares, gafas...).
Todo agrupado: Lo mejor para encontrarlo rápidamente es que agrupes prendas y complementos por tipo y los guardes en cajas. Si son translúcidas, como aquí, lo tendrás todo en orden y a la vista.
Barras de doble uso: Si necesitas tener más baldas para jerséis y camisetas, puedes colgar de la barra un accesorio casillero. También puedes colgar los bolsos para que no se deformen.
No pierdas ni un cm: Saca partido a las baldas más altas con cajas para la ropa de otra temporada. Y coloca colgadores en la parte superior de las puertas.
El armario para él
Que las camisas no se arruguen y estén ordenadas es la prioridad del armario de muchos hombres. Por eso suelen tener más barras: es donde cabe más ropa y se arruga menos.
Perchas iguales: Elige perchas resistentes, tipo sastre, y con la misma forma: se adaptan mejor entre sí y aprovechan el espacio. Cuelga las camisas abrochadas y no se desbocarán. Aprovecha el espacio que queda bajo las camisas con cajas para los complementos, como corbatas o cinturones. Calcula que camisas y americanas necesitan unos 100 cm de alto.
En los cajones: Usa casilleros y organizadores para sacar partido a todo su fondo y evitar que calcetines y ropa interior se mezclen.