¿Cuál es la diferencia entre una almoneda y una antigüedad?
La edad es lo que marca la diferencia principal entre una pieza de almoneda y una antigüedad. Y es que el calificativo de antigüedad se reserva para aquellas piezas que tienen, al menos, cien años, aunque en ocasiones también se consideran como tales las de antes de 1930, lo que incluye al art decó. Por su parte, las piezas que pueden encontrarse en una almoneda se caracterizan por superar el medio siglo.
¿Qué determina el valor de estas piezas?
Junto a su carácter irrepetible, existen una serie de elementos que son los que determinan que tengan mayor o menor valor: su originalidad, rareza o exclusividad, el origen, los materiales con los que está elaborada, su buen estado de conservación…
¿Cómo sé si es realmente una antigüedad?
Conviene hacer unas comprobaciones previas, buscar “pistas” que avalen su antigüedad: maderas desgastadas, asimetrías, cajones con colas de milano (encajes de la madera en forma dentada)… Comprueba que las maderas de fuera y las de dentro son las mismas, que no faltan piezas y que todos los elementos son del mismo estilo.
¿Qué es un mueble vintage?
En la actualidad, “vintage” es un término que se ha puesto de moda y que se utiliza para infinidad de cosas –desde ropa y complementos a motos o mobiliario–. El elemento común de todos ellos es haber sido fabricados en otro período o época (años 50, 60, 70…). Se trata, por tanto, de piezas que no son antiguas, pero sí viejas.
¿Cómo puedo saber si el mueble está en buen estado?
Inspeccionándolo a fondo. Tanto por fuera, como por dentro y por detrás. Comprueba que los cajones abren y cierran correctamente, que no le falta ninguna pieza o herraje y que estos últimos no están oxidados. También, que todas las patas son iguales y no le falta ninguna. Y muy importante: asegúrate de que no presenta agujeros sospechosos ni serrín que pudieran indicar la presencia de carcoma. En caso contrario, podrías negociar una bajada de su precio.
¿Cómo comprar con garantías?
Reconocer si una pieza es realmente una antigüedad o es una reproducción no resulta sencillo. Y menos aún cuando no se tiene un conocimiento profundo del tema. Los expertos coinciden en que la mejor garantía es siempre acudir a un profesional cualificado. Ellos podrán asesorarte en todo lo referente a la compra, conservación, restauración y cuidados. Además, siempre ofrecen más garantías de que atenderán cualquier reclamación sobre la pieza en caso de que ésta no responda a los criterios planteados. También es útil comprobar que el anticuario pertenece a una asociación profesional o solicitar un certificado de autenticidad.
Desconfía de las tiendas que tienen muchos muebles parecidos e, incluso, en diferentes medidas.
¿Es obligatorio un certificado de autenticidad?
Los expertos coinciden en que todas las piezas deberían venderse con su correspondiente certificado. Sin embargo, dichos documentos solo suelen entregarse con piezas muy raras o valiosas. A pesar de ello, aconsejan que siempre que vayas a comprar una antigüedad o un mueble de almoneda te acostumbres a exigir el certificado y desconfíes de quien se niegue a entregarlo. Además de darte confianza, puede ser muy útil si surge algún problema.
¿Dónde puedo acudir si tengo algún problema?
La primera reclamación debe hacerse a quien te ha vendido la pieza. Si no atiende tu queja, puedes dirigirte a una asociación de consumidores o a la agrupación de anticuarios a la que pertenezca. Los comerciantes agremiados tienen más obligaciones, ya que los que pertenezcan a una asociación de la Federación Española de Anticuarios deben cumplir una serie de normas. En caso contrario podrían ser sancionados. Sin embargo, si la persona que ha realizado la venta va por libre, las asociaciones de anticuarios no podrán exigirle responsabilidades ni tampoco amonestarle. En este caso, deberías recurrir a la vía judicial para reclamar tus derechos.
¿Es seguro comprar por internet?
Se trata de una alternativa que despierta gran desconfianza entre muchos profesionales del sector. Sus argumentos son, básicamente, dos. Por un lado, aseguran que puede haber diferencias entre lo que ves en la foto y la apariencia real de la pieza. Y, por otro, sostienen que la mayoría de los vendedores que se pueden encontrar a través de internet son particulares que poca información podrán dar sobre lo que venden, y que es muy probable que se desentiendan si el objeto no responde a tus expectativas. Aunque económicamente no resulte tan ventajoso, si quieres comprar por Internet, lo mejor es hacerlo en la versión on line de tiendas y casas de subasta conocidas y con una amplia experiencia.
¿Es necesario hacer un mantenimiento?
Aunque según el material serán necesarios unos cuidados u otros, no hay duda de que se trata de piezas delicadas. En general, para una buena conservación del mobiliario restaurado deben tomarse precauciones como alejarlo de las fuentes de calor y humedad que haya en la casa; limpiarlo con un paño limpio y seco para evitar manchas en la madera y, cada seis meses, hacer una limpieza a fondo con un producto especial para muebles. Deberás prestar atención a la carcoma. Lo notarás por la aparición de pequeños montoncitos de serrín junto al mueble. En este caso, al trastarse de una pieza delicada, lo mejor es ponerse en manos de un experto.
¿Hay algunas piezas o estilos más demandados que otros?
Depende en gran medida de las modas y los gustos de cada momento. Actualmente, junto a las piezas del siglo XVIII que siguen siendo un éxito, también son muy demandados los clásicos de finales del XIX y principios del XX. Una clara tendencia al alza es la mezcla de muebles de diferentes estilos, pero siempre con piezas de calidad y muy bien escogidas. Una vez en casa es importante elegir la ubicación con sumo cuidado para que las piezas no compitan entre ellas.
¿Es una buena inversión comprar una antigüedad?
Sí, es algo en lo que todos los expertos coinciden. Y no solo por el beneficio económico que se puede obtener con ellas, sino también porque, frente a inversiones de otro tipo, de ésta se puede disfrutar a diario. Aunque cada pieza es un mundo, como término medio se estima que una antigüedad puede revalorizarse en torno a un 10% anual y que, para que resulte rentable, debe plantearse como una inversión a largo plazo (con una media de diez años). Lo mejor es invertir en piezas de calidad cuyo precio se mantendrá más estable en épocas de crisis, así como en muebles anteriores al segundo tercio del siglo XIX, ya que al ser manufacturados son únicos y tienen más valor.
¿Pueden comprarse antigüedades en el extranjero?
No es extraño plantearse la compra de antigüedades en otros países. Sin embargo, antes de lanzarte a internet para comprar una pieza en el extranjero, debes ser consciente de que aunque no tengas ningún problema para traerlas a España, sí que puedes encontrar dificultades para sacarlas de forma legal del país donde se encuentren. Aún siendo de ámbito comunitario, cada país mantiene una legislación propia sobre este tema y en algunos casos es muy restrictiva. Es muy importante informarse bien antes de los requisitos de exportación, trámites e impuestos de cada país.