Si de decoraciones navideñas se trata, no vamos a centrarnos en el clásico espumillón en verde, rojo y dorado. Afortunadamente todo ha evolucionado, incluso la Navidad, y encontramos formas de dar a nuestra casa ese toque pero con mucho estilo y originalidad. Por ejemplo, un clásico de la temporada son las coronas. Las colgamos en las puertas y dan la bienvenida a todos nuestros invitados, pero…. ¿quién dijo que solo pueden ser verde abeto o redondas? Mira todo lo que puedes hacer con ellas. Y prepárate para romper alguna regla.
Juega con las formas
Parece una condición inamovible que las coronas deban ser redondas y muy frondosas, sin embargo ¿dónde está eso escrito? Una vez más se trata de abrir miras y puedes hacer cosas preciosas jugando con formas geométricas. Nos encantan estas pequeñas coronas para colgarlas en una pared de la casa en conjunto.
Juega con los materiales
Otra de las aparentes reglas de las coronas es que deben estar hechas casi en su totalidad de follaje verde… pero nosotros te demostramos que las reglas están hechas para romperse. Ramas secas, flores de colores, mimbre, alambre, o incluso pintadas sobre una tabla de madera. No te limites a la hora de aventurarte a crear tu propia corona navideña.
Juega con el lugar
¿Quién dijo que solo pueden colgarse en las puertas? Crea tus propias normas y llena alguna pared con pequeñas coronas (como en el caso de las coronas geométricas que te mostramos), o cuélgalas en una silla, incluso puedes posarlas sobre el recibidor de tu casa. Sin duda son formas distintas de incluirlas en la decoración y de hacer que sumen al ambiente navideño general.