Cómo decorar la pared

En la redacción de El Mueble nos chiflan los estampados florales y más aún en las paredes. Si no quieres arriesgarte, empapela solo una pared. Fíjate en este office, los colores pastel del papel de Sandberg (90 €, en Pepe Peñalver) quedan muy bien con los cojines y la lámpara. ¡Los estampados florales nunca pasan de moda!

Es momento de innovar alargando el parquet del suelo al cabecero. Copia este dormitorio, las vetas de la madera y su color miel destacan más sobre la pared pintada en azul oscuro. Los cabeceros de pared a pared arrasan.

Está tapizado con tela de rayas de un azul marinero, como la pared. ¿Te has fijado qué bien queda a su lado la lámpara colgante? Un último detalle: el cabecero integra enchufes e interruptores.

Las molduras son un cambio muy fácil, puesto que se pegan con adhesivo. En cualquier ferretería puedes conseguir molduras como estas para cortar y decorar como más te guste (estas son de Orac Decor). Al colocarlas, ten en cuenta la altura del techo para que quede proporcionado.

Si te has venido arriba con la tendencia del papel pintado tienes que tener en cuenta el tamaño de la habitación, la luz que recibe y muy importante, el estampado del papel. Si es muy oscuro, mejor úsalo en una habitación con luz. El resto de detalles, sobre todo si son blancos y de madera, destacarán mucho.

Con unos rodillos especiales, que venden en cualquier tienda especializada. Es un dos en uno: un rodillo de espuma y otro con relieve que estampa. Debes cargar el rodillo de espuma en una superficie plana y pasar el que tiene relieve por la pared. Pinta de arriba abajo, sin presionar para que el dibujo se calque bien.

La pared es azul petróleo. A media altura, pusimos una moldura para crear un zócalo. En la mitad superior, pasamos el rodillo que estampa. ¡Ha quedado genial! (aquí puedes ver un vídeo paso a paso)

Las ventajas del papel pintado y los vinilos son infinitas. Elige la que mejor se ajuste a tus necesidades. El papel vinílico es más fácil de limpiar y uno preencolado, más fácil de poner. En el mercado encuentras infinidad de diseños y calidades. 

¿Ves este baño? En un primer vistazo parece que tenga un zócalo azul. Pero la realidad es otra, se ha instalado un listón en horizontal a unos 90 cm de altura y se ha pintado la parte inferior de la pared en azul y la superior en blanco, siguiendo el estilo del half-painted. Si quieres pintar las paredes del baño elige una pintura con tratamiento antimoho o de látex. 

Un papel pintado de rayas queda genial en el cabecero. Y si tienes el techo bajo, la pared parecerá más alta. El truco para no recargar la estancia está en que los textiles sean de la misma gama de color.