A la sombra de una aromática glicina, una mesa vestida de lila aguarda a los invitados con platos ligeros y refrescantes. Este buffet al aire libre es una romántica propuesta para disfrutar de un delicioso día en el exterior.
Ya ha llegado el buen tiempo, y es el momento de vivir al máximo el exterior. ¿Te apetece organizar una comida ligera al aire libre? Te proponemos que reúnas a tu familia o a tus amigos en el jardín y les sorprendas con recetas originales y un espectacular pastel con frutas y flores. La idea es que cada cual se sirva lo que quiera y lo deguste mientras charla tranquilamente.
Decorar antes de cocinar
Pero antes de ponerte a cocinar, elige el mejor rincón para poner la mesa. Ten en cuenta que si está cerca de la cocina te será más fácil servir la comida y tiene que estar bajo cubierto para que se mantenga fresca durante más tiempo. Nosotros hemos elegido el porche de hierro, que en esta época está cubierto por una aromática glicina. Sus flores lilas han sido nuestra fuente de inspiración a la hora de escoger el mantel, los complementos de mesa... y la decoración de las recetas, con las flores como protagonistas. Todos los platos del buffet se sirven a la vez y se disponen sobre una gran mesa, decorada con dos ramos de peonías, rosas y flores de cera.
Unas fuentes pasteleras de dos pisos sirven para presentar las raciones individuales, servidas en vasitos o envueltas en papel de seda. Y junto con los jarrones de flores y el pastel, hacen que la mesa gane altura y sea más espectacular.
Los platos salados son ligeros y veraniegos: la sopa fría de guisantes con cilantro y menta, la miniquiche de calabacín, brócoli y panceta o los rollitos de gambas, aguacate y espinacas. Y las recetas dulces... auténticos caprichos. Como el granizado de fresones que ayudará a bajar la temperatura y refrescará el paladar, la mousse de queso con frutos rojos y el pastel de verano, cómo no, decorado con flores.
¿Con qué receta te atreverás? Cuéntanoslo en los comentarios de este artículo.